EL NEGEV
O. Introducción
El desierto
del Negev (en hebreo נֶגֶב, en árabe النقب, an-Naqab) es un desierto de Asia,
situado al sur de Israel. Su nombre proviene de la raíz hebrea "נגב"
que significa "seco", al igual que en árabe, pero en hebreo bíblico, Negev
tomó asimismo el significado de "sur", por la ubicación del desierto
del Negev (Génesis 13:14). Existen 110 referencias de la palabra "negev"
en la biblia, y a cerca del 30% se le da una traducción de "sur".
Otras referencias como meridional o "sur" son: Génesis 28:14, Éxodo
38:9, Éxodo 40:24, Números 34:4, Josué 11:2, Josué 15:1, Josué 17:10, Jueces
21:19, 1 Reyes 7:25, 1 Crónicas 26:15, Daniel 8:4, Daniel 11:9, Zacarías 14:4,
etc... Aunque la más significativa es Ezequiel 46:9 donde habla de "la
puerta sur", o Ezequiel 47:1 donde dice "al lado sur del altar",
teniendo siempre en cuenta que la palabra original en hebreo es "negev".
El desierto
del Neguev ocupa un área de unos 13.000 km², con forma de triángulo invertido
cuyo vértice meridional está situado en Eilat, sobre la costa del Mar Rojo. Al
Oeste limita con la península del Sinaí (Egipto), y al Este con la zona
meridional de Jordania, sirviendo de frontera el wadi Aravá.
La ciudad
principal es Beersheva, situada en el borde septentrional del desierto (200.000
habitantes). Otras ciudades importantes son Eilat al sur (en la costa del Mar
Rojo), Dimona, Mitzpé Ramón y Rahat.
1.
La ocupación Egipcia en el Negev.
Para hablar de este tema hemos de
considerar el valor estratégico y económico que esta región tenía para los
egipcios. Estratégicamente hablando, el Noroeste del Negev, la franja de Gaza,
era la puerta de Egipto hacia el Oriente; si se quería controlar el tránsito,
el comercio (las relaciones comerciales entre Siria y Egipto) y la defensa
militar, había que controlar esa zona. Por lo que respecta a los recursos
materiales (intereses económicos), hay que decir que a los egipcios les
interesaba el cobre de la región de Timna, aunque en principio, las minas del
Sinaí les quedaban más cerca. Por tanto, al hablar de la presencia egipcia en
el Negev, habremos de centrarnos en el Noroeste, zona de Gaza y alrededores,
con alguna mención a Arad, que si bien no fue ocupada por los egipcios estuvo
muy relacionada con ellos, y a Timna, en el Sur.
El inicio de la "ocupación"
egipcia en estas tierras no se conoce bien. Según parece, el Sur de Gaza estuvo
organizado como provincia egipcia desde muy temprano, siendo guardado por
mercenarios al servicio de Egipto junto con sus familias, cuya misión era
proteger este camino en general, y defender la carretera militar en particular.
Así, durante la I Dinastía de Egipto
parece ser que hubo ya varias invasiones egipcias en dirección Noreste, y que la
presencia egipcia en la zona de Gaza y alrededores fue fuerte. Así, en En-Besor
(muy cerca de Tel el-Farah Sur) III y I se han encontrado cerámicas típicamente
egipcias, adobes idénticos en forma y medidas a los que se usaban en Egipto en
aquel momento, y 64 sellos egipcios de arcilla, la mayoría de los cuales son,
aparentemente, del reinado de Den
-Bronce Temprano (B.T.) II cir. 3100-2950 a.C.-.
Materiales aislados de la última parte de
la Dinastía V
se han encontrado en Tell Arad, Erani IV y en otros sitios. Son de gran
importancia los vasos de piedra del templo de Ai, datados en la segunda parte
de la I Dinastía.
A la vez, en Egipto es posible encontrar cerámica cananea en las tumbas reales
de la I Dinastía
en lo que se conoce como el "Abydos Ware".
En la época final del B.T.II y en la del
B.T.III, no se encuentran, en cambio, en ninguno de los dos lados materiales de
la otra zona. Parece ser que esta es la época de esplendor de Arad (III-I), que
en este momento explota las minas de cobre del Sur del Sinaí.
Hay un largo lapso de tiempo del que no
sabemos mucho. Durante la dinastía XII parece que esta zona es reducida a
provincia egipcia.
El período del que se sabe más es el de
los Hicsos, siendo estos quienes establecieron toda una serie de fortalezas
entre Gaza y Avaris. En los textos egipcios, al hablar de la expulsión de los
Hicsos por Ahmosis, Dinastía XIX, se menciona Sharuhen como una de las ciudades conquistadas por Ahmosis cuando
les perseguía.
Durante la Dinastía XIX o XX los
egipcios sustituirán a la gente de las fortalezas hicsas por los Caphtorim o Cretenses (en I Sam 30,14 se
hablará del "Negev de los cretenses"). En una fecha algo posterior se
sitúa el relato de Isaac y Abimelech, príncipe de Gerar (Gen.26), en el que, al
final, los Hebreos se quedan con la zona de Beersheva. Este relato parece
mostrar un período de fricción entre los Habiru
y la población sedentaria.
Durante las dinastías XIX y XVIII se
habla en los textos egipcios de Gaza como capital administrativa de Palestina.
A la XIX Dinastía
se le adjudica un templo donde las minas de cobre de Timna.
Se sabe que el Sur de Canaán no participó
en la rebelión contra Tutmosis III (se cita Yurza
-Tell Jemmeh- como la ciudad rebelde situada más al sur).
Poco después de Seti I se sitúa la
invasión hebrea de Palestina (que se venía dando desde el siglo XVII a.C.),y,
más o menos a la vez, se constata el movimiento de las tribus de los clanes del
Sur, Calebitas, Kenitas y Jerahmelitas, que se desplazan hacia el Norte y toman
las ciudades fortificadas del Negeb, sobre todo Arad y Hormah (Tell es
Seriáh?).
Entre 1180-1160 a.C. se situá la
ocupación filistea de las 5 ciudades de la Pentápolis, tras una
repulsa inicial. Se hacen así con la llanura costera del Norte del Negeb, más
tarde con la Sefela
y luego con el Negeb Occidental. Tanto Gerar como el Negeb cretense quedan bajo
el dominio filisteo ("Viaje de Wen
Amon" cir.1125 a.C. ).
En el
reinado de Salomón se habla de la ciudad de Gezer,
más al Norte, como ciudad conquistada.
Después de las excavaciones realizadas
alrededor de Ber-Sheva en Abdah, y sobre
todo por las minuciosas exploraciones realizadas por Nelson Glueck (1900-1971),
la historia de la ocupación del Negev es bastante conocida. Además de los restos de un
establecimiento humano paleolítico y neolítico, se descubrió una importante
civilización calcolítica en la comarca que se extiende del este al oeste de
Ber-Sheva, con algunas localidades más hacia el sur.
Una de las más importantes épocas de
ocupación del Negev se abre hacia finales del Bronce Antiguo (s. XXIV-XXI
a.C.) y
florece durante el primer periodo del Bronce Medio (s. XXI - XIX a.C.)
Otra tan intensa como la anterior, aparece durante la época israelita (s.
VII-VI a.C.); los restos de gran número de torres fortificadas, que custodiaban
las rutas de comunicación, pertenecen a aquel período. La última y más
importante ocupación histórica del Negev va desde la época nabatea hasta el
final del la bizantina (s. II a.C. - VI
d.C.).
2.2. Ocupación Israelita Antigua.
En la Biblia, la palabra Negev identifica el sur y
sur-este de Judá, un área dividida entre varios grupos, cada uno de los cuales
relaciona su nombre con el término Negev, y así
tenemos: Negev de Juda (alrededor de Ber-Sheva, en la región
montañosa al sur de Hebrón), Negev de Caleb (al norte del anterior,
indicado exactamente por Tel-Zif, Main y Kermel), Negev de los filisteos (al nor-oeste de Ber-Sheva), Negev de los quenitas (al este, formado
por Tel-Arad y las planicies vecinas extendiéndose hasta la extremidad
sur-oeste del Mar Muerto), Negev de los
Yerajmeelitas (al sur-este, la meseta delimitada al norte por el wadi
Rakhmah y al sur por los wadis El Abyadh, Marrah y Maderah).

Siguen las tradiciones bíblicas (cfr.
Gen. 20,1-18; 21,22-34; 25,11; 26,1-33) Abraham e Isaac residieron en el Negev.
Si la hipótesis de Albright es cierta[1],
Abraham y sus hombres se dedicaban al transporte entre Cades y la frontera de
Egipto llamada Sur, mientras su familia residía en Gerar. Fundándose en los
datos de la arqueología, dicha hipótesis supone que los hombres de Abraham e
Isaac conducían por las rutas del Negev, grandes caravanas de asnos y se
consagraban temporalmente al cultivo de la cebada en las tierras fértiles de la
región. A ambos patriarcas se les atribuye la excavación del pozo de Beersheva
y de otros de la misma región, sometida en aquel tiempo al protectorado de
Abimelek, rey de Gerar (Gen. 21,22-32; 26,15-33). También se les asigna el
origen del santuario llamado El-Olam (un árbol sagrado y un altar, Gen. 21,33;
26,25). En todo caso, sea cual fuere la explicación de estos hechos, parece
verificable que la residencia de los patriarcas en el Negev coincidía
probablemente con la ocupación que, siguen atestigua la arqueología, ocurrida
durante el siglo XIX a.C. (Bronce Medio).
Una tradición, conservada en Nm. 21,1-3,
refiere que Israel empezó la conquista de Palestina con la derrota del rey de
Arad y la destrucción de la ciudad de Jorma, al nor-este del Negev En el libro de los Jueces la ciudad se llama
Sefat (1,17). En Nm. 34,4 y Jos. 15,3, el norte de región es incluida dentro de
los l mites de la tierra de Israel.
En efecto, la más temprana ocupación
israelita evidenciada por la arqueología es Tel Masos (lugar que se propone con
frecuencia para ubicar Jorma), donde se estableció un asentamiento al final del
siglo XIII a.C. Pero sin embargo, no se ha descubierto en esa región ningún
resto de asentamiento cananeo correspondiente al último Bronce. Esta falta de
evidencia ha creado dificultades con el relato bíblico del asentamiento
israelita y la narración de las batallas contra el rey cananeo de Arad y la
conquista de Jorma. Actualmente existen varias explicaciones al respecto:
1)
N. Glueck[2] sugirió
que el rey de Arad no era rey de esa ciudad sino el jefe de una tribu vagabunda
en el área.
2)
B. Mazar. propuso identificar Arad con Tel
Malhata, aunque no se hayan restos cananeos del òltimo Bronce all .
3)
V. Fritz[3], sugiere
que la conquista de Arad es una historia etiológica en la cual el autor bíblico
refleja la experiencia de la temprana ruina
de la ciudad cananea.
4)
Y. Aharoni[4],
apoyándose en la lista de las ciudades conquistadas por Seson que durante la
campaña en Canaán en el 925 a.C.
en la cual se mencionan dos fortalezas llamadas Arad rabba y Arad le bet
Yeruhem, considera que se podría identificar la primera con Tel Arad y la
segunda con Tel Malhata.
5)
N. Naaman, ofrece una localización para Jorma en
Tel Halif (y no en Tel Masos) dando como una de sus razones para esta
identificación, que Tel Halif tiene evidencias arqueológicas de una ocupación
en el período cananeo tardío, aunque este período corresponda a la época del
Hierro.
Después de la etapa de Josué, Simeón tuvo
una débil posesión sobre el norte del Negev centrándose alrededor de Ber-Sheva.
Algunas listas de ciudades, redactadas en distintas _pocas han conservado el
recuerdo de aquella ocupación de tribus israelitas (cfr. Jos. 15,21-32; 19,2-8;
I Sam 30,26-30)[5], aunque
esta ocupación no ha sido muy fuerte. Recientemente ha sido descubierto al este
del Tel Ber-Sheva un amplio asentamiento que data aparentemente del período de
los jueces (s. XI a.C.). Dicho asentamiento no estaba fortificado y su
población probablemente se ocupaba de la cr a de ovejas, del comercio y quizás
de la agricultura.
Antes del reinado de David, la ciudad
filistea de Gat extendía su protectorado por el nor-oeste del Negev (cfr. I Sam. 27,1-7). Samuel y David combatieron contra los amalecitas (I Sam.
15,1-9; 27,5-11; 30,1-25) en defensa de los asentamientos fronterizos los
cuales, sin embargo, fueron destruidos al final del s. XI, quizás por una de
las tribus vagabundas del desierto.
Salomón y sus sucesores establecieron
fortalezas sobre los restos de los anteriores asentamientos, para vigilar y
defender las rutas hacia Elat y Egipto a la vez que para defenderse de los
ataques de este œltimo. Sin embargo, durante el reinado de Roboam, en el 925 a.C. aproximadamente, el
faraón Sesonq se apoderó de la parte occidental del Negev.
Durante los siglos IX y VIII, la
ocupación del Negev por parte de Judá fue escasa y reducida casi exclusivamente
a asentamientos fortificados como Ber-Sheva, Tel Malhata y Arad. La Biblia señala que Ozías
(781 - 740 a.C.)
hizo el gran esfuerzo por desarrollar el Negev conservando sus comunicaciones
con Elat a través de la región,
extendiendo la agricultura y construyendo fortalezas (II Cro. 26,10).
En el siglo VIII la frontera del Negev ha
sido escenario de varias campañas Asirias contra Filistea y Egipto. Es probable
que en una de esas campañas contra Filistea en el 720 a.C., Sargón II haya
penetrado en el área de los asentamientos de Judá, provocando una importante
devastación. Los restos de destrucción encontrados en Ber-Sheva (stratum II),
puede asignarse a este año, aunque Aharoni, que ha excavado este sitio,
atribuye esa destrucción a la campaña de Senaquerib del 701 a.C.
En el siglo VII nuevos asentamientos se
fueron estableciendo en Tel Ira, Tal Masos, Horval y Uza. El más importante es
el de Tel Ira, pues estaba estratégicamente situado y fortificado. Este
asentamiento parece que puede identificarse con la ciudad bíblica de Ramá en el
Negev (cfr. Jos. 19,8; I Sam. 30,27). Es muy probable que este Tel Ira haya
devenido la ciudad central del Negev de Judá, reemplazando a Ber-Sheva cuando
esta desapareció en ese tiempo.
Las muestras de asentamientos en el este
del Negev para este per odo, indica una gran densidad de población, resultando
esto probablemente de los esfuerzos de la administración central para asegurar
el límite sur contra los ataques de las tribus árabes y de los intentos por
parte de Edóm de apoderarse de partes del Negev, con lo cual se aseguraba el
control de las rutas hacia el mar.
Sin embargo, estos esfuerzos de
asentamientos defensivos del reino de Judá, no fueron eficientes contra
Babilonia, quien llevó a cabo su primera campaña militar contra Judá a fines
del siglo VII. Con la destrucción del reino de Judá (587 a.C.), la región cayó
bajo el dominio de los idumeos y la ocupación sedentaria sufrió una nueva
regresión[6] Aunque
segœn Neh. 11,25-30, parece que algunos judíos vivían en en su época en ciertas
poblaciones del Negev.
Crece la evidencia arqueológica de que
los edomitas participaron activamente en la destrucción de las ciudades de Judá
en el Negev[7].
Los datos arqueológicos indican además
que extensas áreas del este del Negev fueron anexadas hacia el final del Primer
Templo por los edomitas, quienes quizás fueron tambien responsables por la
destrucción de las ciudades de Judá durante la campaña militar de Babilonia
contra Jerusalén en el 586 a.C.
o unos pocos años después.
Después del retorno de Babilonia, la
ocupación en el área del Negev declinó. La parte norte queda bajo control de los
nabateos, quienes usaron sus caminos para viajar desde su capital Petra y desde
su puerto de Elat, a Gaza y a las costas del Mediterráneo. Los nabateos
comenzaron a desarrollar la agricultura alrededor de ciertos puntos en el Negev,
incluyendo Avedat y Elusa, en orden a proveer agua, como as también forraje y comida para sus camellos y
hombres. Hacia el final del dominio nabateo en el Negev, el área cultivada tuvo
que ser expandida para proveer a la población campesina, tal como lo atestiguan
las inscripciones descubiertas alrededor de Avedad.
Después de la anexión de Nabatea por
Roma, la importancia de la región declina nuevamente y revive hacia la mitad de
la tercer centuria y entra en la más próspera era de la antigüedad al final del
período Romano y durante el período Bizantino.
Hay dos circunstancias que marcan el
inicio de esta época: la conversión de Constantino al cristianismo y el
traslado de la capital del imperio de Roma a Bizancio[8].
Palestina y Jerusalén se van a beneficiar de esta circunstancia y el
cristianismo va a iniciar un período de florecimiento. En los lugares en donde
había una recuerdo sobre la vida de Jesús van a surgir basílicas o iglesias. Se
intensifican las peregrinaciones y los
desiertos se van a poblar de monjes y monasterios.
Tuvo vida durante cuatro o cinco siglos
(324-640 d.C. aproximadamente)[9]. Los
restos que encontramos sobre toda la denominada Tierra Santa ofrecen una pálida
idea de lo que era la vida cristiana por aquellos lugares. Muchos monasterios
le van a dar vida a las ciudades.
3.1. La ocupación Bizantina en el
Negev y sus características.
Sin lugar a dudas, a uno de los lugares
al cual el cristianismo le va dar mayores cambios será al centro del Negev. El
Negev se caracteriza por su aridez y la población primera después de profesar la religión nabatea
pasará a la cristiana. El cristianismo penetra en este lugar hacia siglo IV y
tendrá un gran desarrollo. Antes del Medievo el Negev perderá esta enorme
afluencia, volverá a ser desierto y el acceso a él será difícil hasta nuestros
días.
Durante el período romano habían templos
en algunos lugares, así tenemos: Elusa, Oboda y probablemente en Nizana que
habían sido adaptados por los romanos. Durante el período bizantino los lugares
serán ocupados por los cristianos y desde la perspectiva cristiana, estos van a
sufrir adaptaciones, lo mismo que las ciudades serán ampliadas. Pero el proceso
es bastante lento y algunas ciudades, como Elusa, sigue siendo pagana y
perdurarán así durante 5 siglos[10]
Se crean numerosas iglesias relativamente pequeñas en el centro del Negev y en
el oriente del reino. Abundan las iglesias que son de una o tres ábsides, con
presbiterio y un nicho en donde se guardaba la reliquia. Se cree que las
paredes estuvieron recubiertas de figuras de santos, de los misterios
cristianos, de mosaicos, pero de ello no ha quedado rastro al ser destruida por
los islámicos[11]
Se puede
observar muchos marcos y capiteles ornamentados con cruces y diseños
geográficos, dado que la piedra se prestaba para esto. Diversas fuentes
bautismales nos hacen constatar la disposición interna cruciforme, con
escaleras adaptadas a los adultos[12]. En el
pavimento de las iglesias hay muchas tumbas con nombres de los individuos
sepultados y el tiempo que vivieron, lo cual, permite establecer una cronología
bastante precisa sobre el tiempo en que la iglesia estaba funcionando. Hay
diversidad de nombres: pocos de origen nabateo, muchos de carácter griego y
nombres de árabes en los últimos tiempos.
La única
diócesis de aquella región es la de Elusa, cuyo obispo tomó parte en el
Concilio de Efeso (421)[13] y
Jerusalén (518 y en 536)[14]
En lo urbano aún cuando mantienen el
legado Nabateo, pues los romanos no había realizado mayores cambios cuando
ocuparon estos lugares, los bizantinos sobre esta estructura va a realizar
algunos cambios: se reorganizan los planos de la ciudad como son los casos de
Nizana, Oboda, Mampsis, Sabata, Rehovat y Elusa. Las instituciones religiosas y
militares, así como sus alrededores no sufren necesariamente cambios drásticos.
Los espacios de las viviendas son replanteados y ante el crecimiento de la
población se le asigna a cada familia determinadas habitaciones.
Pero, lo
más crucial fue el cambio de economía.
El papiro de Nizana describe la venta ambulante a gran escala dentro de la
ciudad. Sin embargo, estos pueblos del desierto tienen una presencia notoria de
peregrinos que por motivos religiosos se encuentran por esos lugares y deseaban
celebrar las memorias de los santos, mártires o van de paso hacia el sur del
Sinaí y su paso por aquellos lugares hará crear una nueva fuente de ingresos a
las ciudades del Negev.
La agricultura es la columna vertebral de la economía
del desierto. Aún cuando existía la ganadería, hay campos de cultivos que se
extienden por el valle y las faldas de los cerros. La agricultura va a
continuar gracias a los sistemas de irrigación que los Nabateos habían
desarrollado. El trigo, la cebada, los vegetales y frutas se cultivan para la
consumición local. El cultivo del viñedo y su producto, el vino es una
importante iniciativa agrícola[15]. Se
crean sofisticadas prensas de uvas para extraer el zumo y esta evidenciada por
la existencia de cinco prensadoras de vino en Oboda, tres en Sobata y una en
Elusa. Las bajas temperaturas del invierno y el calor que cae sobre la uva
hacen que este producto produzca un buen vino. Las bodegas que son excavadas
bajo las rocas, aseguran una temperatura estable para la fermentación. El vino
del Negev es consumido por los soldados romanos establecidos en el este del
desierto y es posible que se exportara a Europa[16].
Otro producto que va a tener mucha importancia es el aceite de oliva.
En el aspecto comercial, sabemos que estas ciudades se
encontraban dentro de las rutas comerciales entre la ciudad de Petra con Gaza,la Decápolis y otras.
Dentro de esta ruta comercial las ciudades del Negev fueron de las primeras
beneficiarias.
Los nombres de los habitantes en el Negev, nos dan a entender que no
se dieron drásticos cambios con los nativos de Negev durante los periodos
nabateo y bizantino. Los descendientes de los nabateos tienen cargos en la
administración de la iglesia (hay dos obispos en Elusa con nombres nabateos),
en la vida militar y social[17].
La literatura antigua
de esta región es
escasa. Poseemos el diario de algunos peregrinos que han llegado hasta
nosotros: el del anónimo de
Burdeos", el de la española Egeria,
el anónimo de Piacenza y otros.
Pero, las principales noticias que poseemos hoy se deben sin duda a los datos
que nos ofrecen los resultados de las excavaciones arqueológicas.
3.2. Ciudades en el Negev.
Son muchas
las ciudades en el desierto de Negev que tuvieron un fuerte influjo Bizantino.
Veamos las ciudades y la importancia que tuvieron durante el período bizantino[18].
a) Elusa, Khalasa,
Harvot Haluja (Mapa D,25).
Se
encuentra a 15 kms del sur oeste de Berseva, San Jerónimo en "La vida de
San Hilarión" menciona la ciudad de Elusa como una ciudad en la que se
encuentran anacoretas pero que tiene una mayoría de gente semibárbara a causa
de su ubicación geográfica. Muchas afirmaciones de Jerónimo han sido retocadas
gracias a los datos que ofrecen las excavaciones realizadas en el desierto.
Parece que
Elusa pertenece a un grupo de nabateos que lo fundan por el 4to ó 3er siglo a.
C.[19]. Gran
parte de su gente se dedicaba a la agricultura, especialmente a la industria
del vino y también al comercio, así como a la enseñanza, medicina y a refugiar
a los peregrinos.
b) K.
Ruhebeih, Raheira, Rehovet, Horvot Rehovat (Mapa C,26).
Se
encuentra en el noroeste de la parte central del Negev. Está a 11 kms del
suroeste de Elusa. El nombre se deriva según se dice de un pozo excavado por
Isaac (Rehovot of Isaac)[20].Es una
ciudad de fundación nabatea que tuvo un gran desarrollo en el período cristiano
y que termina después de la ocupación romana.
Dentro de
la ciudad hay una iglesia con un ábside y en las afueras hay una con tres
naves. La iglesia tiene algunos fragmentos de vidrio con imágenes de los
santos. Los nombres encontrados en las tumbas que datan de entre los años 483 a 555 son de origen
griego y otros nombres son del Antiguo Testamento y Nuevo Testamento: Elías,
Juan, Esteban, Pedro y María. Un nombre es nabateo (Abadelga), otro árabe
(Zoneno). Algunos difuntos llevan el apelativo de "Trismacaros"
(Beatísimo) título honorífico entre los tantos superlativos que se usaban en
este período.
En 1926 el
P. Tounneau andando por el Berseva hacia el sur, se detuvo en Aluj y notó que
no tenía historia escrita[21]. A un
trozo del muro antiguo abandonado, los habitantes le llamaban
"al-kemiseh". Cree que se trataba de un establecimiento bizantino. En
estas ruinas, lo soldados turcos edifican o reedficaron una mezquita y algunas
casas donde habitaban tres o cuatro familias que se dicen provenientes de Gaza.
d) Misrafa, Mesrafeh
(Mapa C,26).
Fue
construida sobre una colina. Se encuentra cerrada por un muro y se nota una
capilla. Se piensa que más que una fortaleza era una construcción monástica,
denominada como el monasterio de Subeita de tipo eremítico.
e) Nizanna, Nessana,
Augia El-Hafin (Mapa B, 27).
Una ciudad
construida sobre una antigua fortaleza donde los cristianos levantan dos
iglesias: la del norte dedicada a los santos Sergio y Bacco y la del sur
dedicada a la Theotokos.
Algunos
difuntos que se encuentran en las iglesias se les señala el año de su muerte
que van de 464 al 630. Las iglesia del sur tiene los nombres de sus
benefactores, así como una inscripción que el clero también tenía cargos
civiles. En muchas de las inscripciones se invoca la ayuda del Señor, la virgen
María, los santos Esteban y Sergio. La lengua predominante es la griega y los
nombres árabes revelan que la población era mixta. Hay una
serie de elementos arquitectónicos y gráficos de la Iglesia que permite
conocer la vida del país y de la región: el caballo, el camello, los pájaros de
la región y un cristiano (puede ser un peregrino) que camina con la cruz en la
izquierda, mientras que en la derecha tiene el bastón.
La cerámica
con vasos ordinarios hace referencia a la manufactura ordinaria del período
bizantino.
Los
habitantes deben pagar una tasa en dinero y los árabes en especies. Da a
entender como los cristianos se encontraban bajo la presión árabe y como poco a
poco la lengua va a cambiar de griega a árabe. Se cree que a finales del siglo
VIII la ciudad fue abandonada. No se conoce la razón concreta, pero parece ser
que la causa fue el fisco agobiante.
El hecho
más característico de Nessana es el descubrimiento de un grupo de papiros que
guardan las costumbres de los habitantes (soldados, vida civil, contrato de
matrimonio, tasas a pagar) y otras que eran leídas en la iglesia: fragmentos
del evangelio de San Juan, de Pedro, de los Hechos de San Jorge y la carta de
Abgar al Señor, doce capítulos sobre la fe y fragmentos teológicos. Hay también
un glosario griego, un latino-griego y fragmentos de la Eneida (II-VI).
f) Subeita, Shivta,
Sebata (Mapa C-D, 27).
La ciudad
era de origen Nabateo, pero obtiene su máximo desarrollo en el período
cristiano hacia el siglo IV[22].
Después de la ocupación árabe del 638, construyeron una mezquita sobre la
iglesia sin destruir los edificios cristianos.
Los
cristianos construyeron tres iglesias y el plano de la ciudad no era regular.
El asentamiento fue gradual como en los otros lugares del Negev; los individuos
venían de fuera y convivian con los nativos. En el atrio de la iglesia hay
inscripciones que hablan de la construcción de la misma, así como otros que
hablan de las virtudes de algunos de los que vivían allí. El cementerio fue
encontrado por los padres dominicos y se encuentra a cierta distancia de la
ciudad. Dos epitafios tienen la forma circular.
g) Abdedh, Eboda, Avdat
(Mapa E,28).
Una ciudad
de origen nabatea. Tiene su máximo desarrollo en los siglos V-VI con los
bizantinos teniendo una población de 2,000 a 3,000. De esta época son los monumentos
hoy visibles en ella. Una ciudad próspera gracias principalmente al comercio y
más tarde a la agricultura, mediante un sofisticado sistema de recojo de agua
de las lluvias. Cuando los árabes ocupan el país (s. VII) la ciudad es
abandonada. Está construida sobre la cima de una colina y sus principales
monumentos son : fortaleza e iglesia, después del declive se encuentra la casa
y algunas grutas.
Las
excavaciones son las que dan las noticias sobre los cristianos y en el aspecto literario sólo tenemos el dato
del anónimo de Piacenza, el cual después de visitado Elusa dice:
"Partiendo de la ciudad de Elusa, entramos en el desierto a veinte millas.
Allí está el fortín en el que se encuentra el hospicio de San Jorge, está la
gente de paso y los eremitas encuentran un refugio"[23].
La fortaleza es de forma rectangular con torre a los lados y pertenece al
período bizantino. Las inscripciones de las tumbas sobre el pavimento de la Iglesia van de los años
541 al 623.
h) Kurnub,
Mampsis (Mapa H,26).
Los hebreos
llamaban Kurnub a Mampsis, para recuperar el nombre origina semítico, pues el
nombre árabe no guarda ninguna relación con el nombre primitivo.
Una ciudad
que está situada entre dos importantes vías de comunicación antiguas: la de
Jerusalén por Hebrón, a Eilat y la de Gaza a Eilat. Está construida sobre el
declive de una colina. Es uno de los más grandes complejos monumentales del
Negev. Las dos iglesias tienen la sólida estructura tipo basílica. El
cementerio se encuentra fuera del recinto.
i) Mezad
Yeroham (Mapa F-G, 26).
Al oeste de
Kurnub en medio del camino para Avdat, está Meyad Yeroham (Qasr Yeruham). Tiene
un complejo bizantino del siglo V-VI.
j) Gruta En El Wadi
Jarahi (Mapa G-H. 25-26)'
Al nor-este
de Kurnub en el Wadi Jaraba se encuentra una gruta con una inscripción bastante
singular. El wadi franquea la gruta y una tumba. Las inscripciones son de una misma mano que
hace pensar a Milik que sea obra de un monje que vive en la gruta hacia el
siglo VI-VII.
Kirk,
Baumstark y Peter traducen: "El tesoro estable es el conocimiento de Dios,
deséala y te la dará"[24].Milik
piensa que las dos inscripciones sean obra de un monje que vivía en la gruta
hacia los siglos VI-VII .
En el sur
del Negev, cerca de Eilat se encuentra Horvat Bodeda, la cual tiene una
capilla, una estancia rectangular con decoraciones en el muro entre las cuales
hay cruces e inscripciones griegas. El lugar era una cantera de piedra.
Pbro. Roland Vicente Castro Juárez
rolancaju@gmail.com
[1] W.F. ALBRIGHT, Abraham the hebrew. A new Archeological Interpretation. BASOR 163, págs. 36-5
[2] Rivers in the Desert, New York 1968, págs. 114-115.
[3] Arad in der biblischen Ubirlieferung und in der Liste Schoschenkes I, ZDPV 82, (1966) p‡gs. 331-342
[4] A. F.
Rainey , The Land of the Bible, 3» de., rev. and enl., Philadelphia 1979, p‡gs.
215-216.,
[5] The Inheritance of the
Sons of Simeon,
ZDPV 96, (1980) p‡gs. 136-152
[7] Estas evidencias incluyen
alfarería encontrada en muchos lugares pertenecientes a los asentamientos de
Judá (especialmente Qitmit) as como
documentos escritos, de los cuales el más importante es Arad ostracón n¼ 24Ó.
En El, al jefe de Arad se le ordena enviar información a Ramat Negev para que Edóm llegue allá.
[8] Hans-Georg Beck, considera que la constitución del mundo
bizantino no significa el despertar de un pueblo carente de historia a la
conciencia histórica, ni la entrada de una joven nación "bárbara" en
la antigua cultura grecorromana del Mediterráneo. Cree que es más bien una
forma de esta cultura mediterránea con todo lo que esto implica; es una forma
tardía del imperio romano, del antiguo mundo espiritual de los griegos y de la
clásica actitud vital mediterránea. Cfr. Hans-Georg Beck, "
Cultura cristiana de Bizancio",
en AAVV, Sacramentum Mundi
(Enciclopedia Teológica), tomo I, Edit. Herder, Barcelona 1976 (1ra Edic.
alemana 1969) págs.586-594.
[9] Correspondería a la primera época dentro de la división clásica
que se le da a esta etapa cultural. Las otras dos serían: la edad media
bizantina (650-1204 aproximadamente) y la época posterior del Bizancio
(1204-1453). Para nuestro estudio nos interesa la primera etapa.
[10] NEGEV, Avraham; "The
Persian to Byzantine Periods", en Idem, The New Encyclopedy of Archeologycal excavation in the Holy Land,
The Israel Exploration Society and Carta, Israel 1993, pág. 1133.
[11] MEIR BEN DOV - YOEL RAPPEL, Mosaics of the Holy Land, Adama Books,
New York 1987, pág. 110-111.
[12] BAGATTI, Belarmino,
Antichi Villagi Cristiani di Giudea e Neghev (Colección Studium Biblicum
Franciscanum, 24), Franciscanum Printing Press, Jerusalén 1993, pág. 185.
[13] ABEL, F._M, Geographie de la Palestine. Geographie
politiques. Les villes. (Etudes Bibliques, 28/2), Gabalda, Paris 1938 pág.
199-201.
[14] BAGATTI, B., o.c., Pág. 184.
[15] NEGEV, Avraham, voz "Negev"
en Idem, The Archeologycal Encyclopedia
of the Holy Land, 3rd. ed., Prentice Hall Press ed., Jerusalén 1990, pág.
280-281.
[16] NEGEV,
A., "The Persian to Byzantine Periods" o.c. pág. 1134.
[18] La base de este apartado será el libro del P. BAGATTI o.c. págs.
185 -208 y cuando utilice otro autor lo mencionaré en la nota de pie de página.
[19] NEGEV,
A., "Elusa", en Idem, The Archeologycal Encyclopedia..., o.c., págs. 128-129.
[20] NEGEV,
A., "Rubheih
(Khirbeter)", en Idem, The Archeologycal Encyclopedia..., o.c.
págs. 331-332.
[21] P. Tonneau, RB 1926 pág. 584. Citado en Bagatti, B.; o.c. pág.
191.
[22] La única referencia literaria que se tiene de estas ruinas,
visitadas y descritas son las de S.Nilo, cuando los árabes sarracenos asesinan
a muchos monjes del monasterio del Sinaí e hicieron prisionero a un tal
Teódulo. Lo vendieron como esclavo a un cristiano, el cual, a su vez lo vendió
al obispo de Elusa, quien lo inscribe en su clero. Su padre, lo fue a buscar y
lo encontró en Elusa. El P. Abel, con la ayuda de unos códices inéditos ha
demostrado que el lugar de la venta de Teódulo fue en el propio Subeita. No
obstante, algunos textos ponen Suka en vez de Subeita. Cfr. BAGATTI,B., Antichi Villaggi... o.c. pág. 198.
[23] "Partendo dalla città
di Elusa entrammo nel deserto a venti niglia. Lì c'è il forte in cui se trova
l'ospizio di S.Giorgio; en esso la gente di passaggio e gli eremiti trovano un
refugio o offerte in danaro". cfr. BAGATTI, B., Antichi... o.c. pág. 203.
[24] "Il tesoro stabile è
la conoscenza di Dio; desìderala e te la darà". cfr. BAGATTI, B., Antichi... o.c. pág. 207.