viernes, 25 de octubre de 2013

LECTURAS Y COMENTARIO DOMINGO XXX TIEMPO ORDINARIO CICLO C - 27 OCTUBRE 2013

“¡TEN PIEDAD!”.
  


PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del Eclesiástico 35,12-14.16-18
El Señor es un Dios justo, que no puede ser parcial; no es parcial contra el pobre, escucha las súplicas del oprimido; no desoye los gritos del huérfano o de la viuda cuando repite su queja; sus penas consiguen su favor, y su grito alcanza las nubes; los gritos del pobre atraviesan las nubes y hasta alcanzar a Dios no descansan; no ceja hasta que Dios le atiende, y el juez justo le hace justicia.

SALMO RESPONSORIAL (Sal 32)

Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha

Bendigo al Señor en todo momento,
su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloría en el Señor:
que los humildes lo escuchen y se alegren. R.

El Señor se enfrenta con los malhechores,
para borrar de la tierra su memoria. 
Cuando uno grita, el Señor lo escucha
y lo libra de sus angustias. R.

El Señor está cerca de los atribulados,
salva a los abatidos.
El Señor redime a sus siervos,
no será castigado quien se acoge a él . R
.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 4,6-8.16-18
Estoy a punto de ser sacrificado, y el momento de mi partida es inminente. He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe. Ahora me aguarda la corona merecida, con la que el Señor, juez justo, me premiará en aquel día; y no sólo a mí, sino a todos los que tienen amor a su venida.
La primera vez que me defendí, todos me abandonaron, y nadie me asistió. Que Dios los perdone. Pero el Señor me ayudó y me dio fuerzas para anunciar íntegro el mensaje, de modo que lo oyeran todos los gentiles. Él me libró de la boca del león. El Señor seguirá librándome de todo mal, me salvará y me llevará a su reino del cielo. A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén.

EVANGELIO
Lectura del santo evangelio según san Lucas 18,9-14
En aquel tiempo, a algunos que, teniéndose por justos, se sentían seguros de sí mismos y despreciaban a los demás, dijo Jesús esta parábola: «Dos hombres subieron al templo a orar. Uno era fariseo; el otro, un publicano. El fariseo, erguido, oraba así en su interior: "¡Oh Dios!, te doy gracias, porque no soy como los demás: ladrones, injustos, adúlteros; ni como ese publicano. Ayuno dos veces por semana y pago el diezmo de todo lo que tengo." El publicano, en cambio, se quedó atrás y no se atrevía ni a levantar los ojos al cielo; sólo se golpeaba el pecho, diciendo: "¡Oh Dios!, ten compasión de este pecador." Les digo que éste bajó a su casa justificado, y aquél no. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.».

CREDO NICENOCONSTANTINOPOLITANO

Creo en un solo DIOS, PADRE todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, JESUCRISTO, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz. Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres y por nuestra salvación, bajó del cielo; y por obra del Espíritu Santo se encarnó de  María,  la  Virgen,  y  se  hizo  hombre.
Y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.
Creo en el ESPÍRITU SANTO, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo, recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo la iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.

PLEGARIA UNIVERSAL
Escucha Dios de bondad nuestras plegarias:

1.-  Por todos los cristianos para que valoremos la gracia del bautismo por el cual hemos sido constituidos hijos de Dios. Roguemos al Señor.

2.- Por los trabajos pastorales que se realizan en las diferentes parroquias,  para que el Señor los confirme con su gracia. Roguemos al Señor.
3.- Por los que viven en la miseria, para que Dios un día los favorezca con su gracia y la caridad cristiana los ayude. Roguemos al Señor.

4.- Por nuestros hermanos difuntos, para que encuentren el perdón de sus pecados y alcancen la gloria de la bienaventuranza eterna. Roguemos al Señor

Padre bueno atiende nuestra suplicas según tu voluntad. Por Jesucristo nuestro Señor.

COMENTARIO

El fariseo y el publicano saben orar; comienza por “Dios mío”. Se ponen en presencia de Dios. Es preciso que la presencia de Dios, evocada intensamente, llene enseguida el espacio en donde vamos a orar: el lugar de nuestra oración, nuestro pensamiento y nuestro corazón, todos los minutos de nuestra cita con Dios. Sino aunque quizás quisiéramos orar, nos habríamos quedado con nosotros mismos.
Así, pues, esos dos hombres han comenzado bien. Entonces ¿por qué la oración del fariseo se viene abajo, mientras que la del publicano se levanta victoriosamente hacia Dios? “Les aseguro”. Dice Jesús, este bajó a su casa a bien con Dios,  y aquel no”.
El fariseo había invocado a Dios, pero lo oculta enseguida con su enorme YO. Yo hago estoy esto y no soy como éste ni como aquel. ¿Acaso puede estar Dios ni un segundo con ese hombre lleno de sí mismo?.
El publicano impresiona a Dios con su humilde súplica: “¡Ten piedad!”. Este “ten piedad” es una oración densa y exacta, en línea muy recta con lo que Jesús nos reveló. Dios nos mira con misericordia, con una piedad amorosa, con una comprensión que hace gemir su corazón cuando ve que también  Él nuestro gime: “Un corazón quebrantado, Señor, tú no lo desprecias”. (Salmo penitencial). Esta misericordia de Dios no es general, sino que ella espera nuestra llamada y él entonces se apiada.
En esta presencia de Dios que supo mantener dentro de su pequeñez, el publicano puede introducir un “yo” pero en el  último lugar de su plegaria. Y junto a ella se cuela otra palabra: “pecador”. ¡Ten compasión de mí, pecador!.
La oración cristiana es una cita de amor y por tanto un tú y un yo, pero hay que procurar sobre todo que el TU siga siendo grande e inmenso y que nuestro yo sea pequeño, modesto, lúcido: “Yo pecador”.
Utilicemos a fondo esta parábola para desarraigar en nosotros la convicción farisaica tan difícil de arrancar: creer que basta con hacer cosas buenas para ser un hombre bueno y agradar a Dios: “Yo hago esto y aquello”. La primera cristiana María, era de otra opinión: “Hágase en mí según tu palabra”. ¡Qué cambio tan radical!.
En ése el cambio de esta parábola: empieza con un hombre que hace mucho, que está seguro de sí y que se cree justo: termina con otro  hombre seguro de Dios y que se hace justo porque supo decir: “Ten piedad de mí, Señor”.

PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA DÍA

Lunes 28: Señor de los Milagros (F) Nm 21, 4b-29; Sal 83; Flp 2, 5-12; Jn 3, 11-16.
Martes 29: Santos Simón y Judas, apóstales (f) Ef 2, 19-22; Sal 18; Lc 6, 12-19.
Miércoles 30: Rm 8, 26-30; Sal 12; Lc 12, 22-30.
Jueves 31: Rm 8, 31b-39; Sal 108; Lc 13, 31-35.
Viernes 01: Solemnidad de todos los santos (precepto). Ap 7, 2-4.9-14; Sal 23; 1Jn 3, 1-3; Mt 5, 1-12ª.
Sábado 02:   Conmemoración de todos los fieles difuntos. Jb 19, 1.23-27ª; Sal 24; Flp 3, 20-21; Mc 15, 33-39; 16, 1-6.
Domingo 03: San Martin de Porres, religioso (S) Is, 58, 6-11; Sal 1; 1Co 12, 31—13, 13;Mt 11, 25-30.



jueves, 17 de octubre de 2013

LECTURAS Y COMENTARIO DOMINGO XXIX, CICLOC C -20 DE OCTUBRE 2013

“DIOS HARÁ JUSTICIA A LOS QUE LE INVOCAN”
  

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro del Éxodo 17,8-13

En aquellos días, Amalec vino y atacó a los israelitas en Rafidín. Moisés dijo a Josué: «Escoge unos cuantos hombres, haz una salida y ataca a Amalec. Mañana yo estaré en pie en la cima del monte, con el bastón maravilloso de Dios en la mano.».
Hizo Josué lo que le decía Moisés, y atacó a Amalec; mientras Moisés, Aarón y Jur subían a la cima del monte. Mientras Moisés tenía en alto la mano, vencía Israel; mientras la tenía baja, vencía Amalec. Y, como le pesaban las manos, sus compañeros cogieron una piedra y se la pusieron debajo, para que se sentase; mientras Aarón y Jur le sostenían los brazos, uno a cada lado. Así sostuvo en alto las manos hasta la puesta del sol. Josué derrotó a Amalec y a su tropa, a filo de espada.

SALMO RESPONSORIAL (Sal 120)

El auxilio me viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra

Levanto mis ojos a los montes:
¿de dónde me vendrá el auxilio?.
El auxilio me viene del Señor, 
que hizo el cielo y la tierra. R.

No permitirá que resbale tu pie,
tu guardián no duerme;
no duerme ni reposa
el guardián de Israel. R.

El Señor te guarda a su sombra,
está a tu derecha;
de día el sol no te hará daño,
ni la luna de noche. R.

El Señor te guarda de todo mal,
él guarda tu alma;
el Señor guarda tus entradas y salidas,
ahora y por siempre. R.

SEGUNDA LECTURA

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 3,14–4,2

Permanece en lo que has aprendido y se te ha confiado, sabiendo de quién lo aprendiste y que desde niño conoces la sagrada Escritura; ella puede darte la sabiduría que, por la fe en Cristo Jesús, conduce a la salvación. Toda Escritura inspirada por Dios es también útil para enseñar, para reprender, para corregir, para educar en la virtud; así el hombre de Dios estará perfectamente equipado para toda obra buena. Ante Dios y ante Cristo Jesús, que ha de juzgar a vivos y muertos, te conjuro por su venida en majestad: proclama la palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, reprocha, exhorta, con toda paciencia y deseo de instruir.

EVANGELIO

Lectura del santo evangelio según san Lucas 18,1-8

En aquel tiempo, Jesús, para explicar a sus discípulos cómo tenían que orar siempre sin desanimarse, les propuso esta parábola: «Había un juez en una ciudad que ni temía a Dios ni le importaban los hombres. En la misma ciudad había una viuda que solía ir a decirle: "Hazme justicia frente a mi adversario.". Por algún tiempo se negó, pero después se dijo: "Aunque ni temo a Dios ni me importan los hombres, como esta viuda me está fastidiando, le haré justicia, no vaya a acabar pegándome en la cara."»
Y el Señor añadió: «Fíjense en lo que dice el juez injusto; pues Dios, ¿no hará justicia a sus elegidos que le gritan día y noche?; ¿o les dará largas.? Les digo que les hará justicia sin tardar. Pero, cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará esta fe en la tierra?».

CREDO NICENOCONSTANTINOPOLITANO

Creo en un solo DIOS, PADRE todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, JESUCRISTO, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz. Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres y por nuestra salvación, bajó del cielo; y por obra del Espíritu Santo se encarnó de  María,  la  Virgen,  y  se  hizo  hombre.
Y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.
Creo en el ESPÍRITU SANTO, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo, recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo la iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.

PLEGARIA UNIVERSAL

Queridos hermanos, Dios Padre en su infinita misericordia, desea que todos los hombres se salven. Por eso hoy, domingo Mundial de las Misiones, invocamos al Señor para que renueve en la iglesia el espíritu misionero y suscite más vocaciones para llevar la Palabra de Vida a los que no la conocen.
Digámosle con fe: Padre de todos, escúchanos.

1.-  Por la Iglesia universal, para que en este año de la fe renueve su compromiso misionero y continúe anunciando el evangelio y acogiendo a todos los hijos de Dios dispersos por el mundo. Padre de todos, escúchanos.


2.- Por el Papa Francisco, los obispos y  los demás pastores, para que su ministerio, testimonio de vida y ardor misionero sea en beneficio de la salvación de todos los hombres y pueblos, especialmente los más alejados. Padre de todos, escúchanos.


3.-  Por los que tienen responsabilidades de gobierno en los pueblos del mundo, para que busquen el bien común de todos, especialmente de  los más necesitados. Padre de todos, escúchanos.

4.- Por los misioneros, para que encuentren en la palabra y en la eucaristía el ánimo y fortaleza para seguir evangelizando a los pueblos que necesitan escuchar  de Dios. Padre de todos, escúchanos.

5.- Por nuestra comunidad diocesana y parroquial, para que siguiendo a Cristo como discípulos misioneros seamos testigos de su amor y con un corazón generoso cooperemos con las iglesias más necesitadas.  Padre de todos, escúchanos.

Dios Padre todopoderoso que nuestra oración y vida sean alabanza para tu gloria y que todos los pueblos contemplen el rostro de tu Hijo Nuestro Señor Jesucristo. El que vive y reina por los siglos de los siglos.

COMENTARIO

La parábola encaja muy bien en la situación de aquellos tiempos en los que la viuda realmente era el prototipo de una existencia en soledad y desamparo, y en los que abundaba la siniestra figura del juez venal. En Ex 22, 22-24 se dice que Dios escucha el clamor de las viudas y sale en su defensa contra los que abusan de ellas; los profetas denunciaron frecuentemente la corrupción de la justicia (Am 5,7.10-12).
Esa viuda de la parábola no tiene en principio posibilidad alguna de ser escuchada por el juez injusto, pero insiste hasta que el juez cede, aunque no sea más que para desembarazarse de ella. Es importante hacer notar que lo que pide esta viuda es justicia.
También la oración de los elegidos de Dios es una oración para pedir a gritos, día y noche, justicia. Si un juez inicuo no puede resistir la demanda insistente de una viuda desamparada, con mayor razón Dios, que es bueno, escuchará a los elegidos que le piden justicia.
Ahora bien, no se puede pedir insistentemente justicia a Dios si no se lucha igualmente con insistencia para establecer entre los hombres la justicia.
Una vida de oración sólo es posible cuando hay fe. Con su pregunta abierta, Jesús nos amonesta para que mantengamos la fe hasta el último día.
Entonces, en el día del Señor, comprenderemos que Dios no es un sordomudo ante los gritos de los justos que le piden justicia, comprenderemos que si ahora calla es tan sólo porque nos escucha y espera darnos al fin la respuesta definitiva.
Discutir sobre nuestras oraciones no escuchadas es por otra parte tan inútil como quedarse en teorías, pues se trata de algo vivido. Se puede y se debe discutir, pero sobre experiencias de oración.
Mientras tanto, la lucha que los hombres fieles mantienen sin descanso por una mayor justicia en el mundo es en cierto sentido una respuesta de Dios.

PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA DÍA

Lunes 21: Rm 4, 20-25; Sal: Lc 1, 69-75; Lc 12, 13-21.
Martes 22: Rm 5, 12.15b.17-19.20b-21; Sal 39, Lc 12, 35-38.
Miércoles 23: Rm 6, 12-18; Sal 123;  Lc 12, 39-48.
Jueves 24: Rm 6, 1923; Sal 1; Lc 12, 49-53.
Viernes 25:  Rm 7, 18-25ª; Sal 118; Lc 12, 54-59.
Sábado 26:   Rm 8, 1-11; Sal 23; Lc 1, 1-9.
Domingo 28: Eclo 35, 12-14.16-18; Sal 33; 2Tm 4, 6-8.16-18; Lc 18, 9-14.


viernes, 11 de octubre de 2013

LECTURAS Y COMENTARIO DOMINGO XXVIII T.O. CICLO C - 13 OCTUBRE 2013

EL SAMARITANO AGRADECIDOPRIMERA LECTURA


PRIMERA LECTURA

Lectura del segundo libro de los Reyes 5,14-17

En aquellos días, Naamán de Siria bajó al Jordán y se bañó siete veces, como había ordenado el profeta Elíseo, y su carne quedó limpia de la lepra, como la de un niño. Volvió con su comitiva y se presentó al profeta, diciendo: «Ahora reconozco que no hay Dios en toda la tierra más que el de Israel. Acepta un regalo de tu servidor.».
Eliseo contestó: «¡Vive Dios, a quien sirvo! No aceptaré nada.» Y aunque le insistía, lo rehusó.
Naamán dijo: «Entonces, que a tu servidor le dejen llevar tierra, la carga de un par de mulas; porque en adelante tu servidor no ofrecerá holocaustos ni sacrificios a otros dioses fuera del Señor.».

SALMO RESPONSORIAL (Sal 97)

El Señor revela a las naciones su salvación

Canten al Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas:
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. R.

El Señor da a conocer su victoria,
revela a las naciones su justicia:
se acordó de su misericordia y su fidelidad
en favor de la casa de Israel. R.

Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios.
Aclama al Señor, tierra entera, gritad, vitoread, tocad. R.

SEGUNDA LECTURA

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 2,8-13

Haz memoria de Jesucristo, resucitado de entre los muertos, nacido del linaje de David. Éste ha sido mi Evangelio, por el que sufro hasta llevar cadenas, como un malhechor; pero la palabra de Dios no está encadenada: Por eso lo aguanto todo por los elegidos, para que ellos también alcancen la salvación, lograda por Cristo Jesús, con la gloria eterna. Es doctrina segura: Si morimos con él, viviremos con él. Si perseveramos, reinaremos con él. Si lo negamos, también él nos negará. Si somos infieles, él permanece fiel, porque no puede negarse a sí mismo.

EVANGELIO

Lectura del santo evangelio según san Lucas 17,11-19

Yendo Jesús camino de Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea. Cuando iba a entrar en un pueblo, vinieron a su encuentro diez leprosos, que se pararon a lo lejos y a gritos le decían: «Jesús, maestro, ten compasión de nosotros.»
Al verlos, les dijo: «Vayan a presentarse a los sacerdotes.» .
Y, mientras iban de camino, quedaron limpios. Uno de ellos, viendo que estaba curado, se volvió alabando a Dios a grandes gritos y se echó por tierra a los pies de Jesús, dándole gracias. Éste era un samaritano.
Jesús tomó la palabra y dijo: «¿No han quedado limpios los diez?; los otros nueve, ¿dónde están? ¿No ha vuelto más que este extranjero para dar gloria a Dios?» .
Y le dijo: «Levántate, vete; tu fe te ha salvado.».

CREDO NICENOCONSTANTINOPOLITANO

Creo en un solo DIOS, PADRE todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, JESUCRISTO, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz. Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres y por nuestra salvación, bajó del cielo; y por obra del Espíritu Santo se encarnó de  María,  la  Virgen,  y  se  hizo  hombre.
Y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.
Creo en el ESPÍRITU SANTO, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo, recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo la iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.

PLEGARIA UNIVERSAL
Llenos de confianza en el Señor oremos, hermanos por todos los hombres y por todas sus necesidades:

1.- Por la Iglesia, para que se muestre desprendida y así pueda decir a todos donde está la verdadera riqueza. Roguemos al Señor.

2.- Por los responsables de la economía, para que no olviden la promoción de las personas olvidadas. Roguemos al Señor.

3.- Por los padres de familia, para que no descuiden las necesidades espirituales de sus hijos. Roguemos al Señor.

4.- Pro nosotros mismos, para que no caigamos en la tentación de la codicia, sepamos valorar los bienes terrenos con criterios evangélicos y aspiremos los bienes de arriba. Roguemos al Señor

5.- Por los frutos de esta Eucaristía, para que lleguen también a nuestros hermanos difuntos y puedan ellos gozar un día de la gloria eterna. Roguemos al Señor.

Dios nuestro fuente y origen de la vida temporal y eterna, escucha las oraciones de tu Iglesia y haz que no  busquemos únicamente la salud del cuerpo; que los que nos hemos reunido este domingo te alabemos por el don de la fe, y que toda la iglesia sea testigo de la salvación que tu obras continuamente en Cristo, tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.

COMENTARIO

Su comienzo viene a recordarnos que seguimos en perspectiva de camino o, lo que es lo mismo, que Lucas sigue ofreciéndonos actitudes características de un caminar en cristiano.
Hoy lo hace a través de un relato exclusivo de este autor. Diez leprosos solicitan de Jesús compasión.  Lo hacen a distancia, debido a su condición de enfermos contagiosos e inhabilitados para la convivencia social. Lo que sigue a continuación tiene la marca del tercer evangelista.
Jesús envía a los leprosos a la instancia sanitaria para que ésta certifique su curación y permita a los curados su incorporación a la convivencia social. Obsérvese que Jesús no les dice que estan curados, sino que se presenten a los sacerdotes. Los leprosos se fían de Jesús.  Lucas presenta, pues, el milagro como fruto de la confianza y de la disponibilidad de los leprosos. Confianza en la palabra de Jesús, aun en contra de la evidencia externa.
El relato, sin embargo no finaliza aquí.En realidad todo lo anterior es sólo preparación y está subordinado a lo que sigue. Lo verdaderamente importante y significativo en el relato de hoy son los próximos vv. 15-18. Uno de los curados reconoce públicamente el favor de Dios y retorna a Jesús para darle gracias
Llegado a este punto del relato, Lucas interrumpe la narración para puntualizar la procedencia del curado. "Este era un samaritano". Esta puntualización constituye el dato central del relato. En contexto judío  decir samaritano era decir proscrito, excluido de la casa de Israel, es decir, del Pueblo de Dios. Tras la puntualización Lucas rehace el hilo narrativo con tres preguntas de Jesús. Las tres poseen una carga de extrañeza y de desencanto. Pero en el contexto del relato sirven para realzar el significativo gesto de un proscrito según los hombres. Pero ¿por qué sólo el extranjero, el samaritano, vuelve a dar gracias? Porque al parecer, a los otros sólo les preocupa una cosa; hacer lo que la ley prescribe en caso de curación de la lepra, algo que es bastante minucioso si leemos al Levíticos.
Más liberado, el samaritano, sigue el impulso que le mueve a regresar. Podría suceder que sumergidos en las cosas que hay que hacer, no tuviéramos tiempo ni corazón para dar gracias a Dios. El título tradicional del relato habla de curación de diez leprosos. Cabría preguntarse si no habría que titularlo más bien "el samaritano agradecido".
La figura del samaritano agradecido resalta, con todos sus perfiles, sobre la inexplicable ausencia de los otros nueve. ¿Es que acaso estos otros nueve se consideraban con derecho a la curación por ser miembros del Pueblo de Dios?.  Lo que Lucas deja en claro es que sólo uno, y éste un proscrito, experimentó su curación como un don y no como un derecho. Esta es su fe y esta es su salvación, como declara Jesús en la frase conclusiva.

PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA DÍA

Lunes 14:  Rm 1, 1-7; Sal 97; Lc 11, 29-32.
Martes 15: Santa Teresa de Jesús, virgen y doctora de la Iglesia (MO) Rm 1, 16-25; Sal 18; Lc 11, 37-41.
Miércoles16: Rm 2, 1-11; Sal 61; Lc 11, 42-46.
Jueves 17: San Ignacio de Antioquia, Obispo y  mártir (MO)  Rm 3, 21-30ª; Sal 129; Lc 11, 47-54.
Viernes 18:   San Lucas, Evangelista (F)  2Tm 4, 9-17ª; Sal 144; Lc 10, 1-9.
Sábado 19:   Rm 4, 13.16-18; Sal 104; Lc 12, 8-12.
Domingo 20: Ex 17, 8-13; Sal 120; 2Tm 3, 14-4,2; Lc 18, 1-8.


sábado, 5 de octubre de 2013

LECTURAS Y COMENTARIO DEL DOMINGO XXVII T.O. CICLO C - 06 OCTUBRE 2013

“SI TUVIERAN FE”


PRIMERA LECTURA

Lectura de la profecía de Habacuc 1,2-3;2,2-4

¿Hasta cuándo clamaré, Señor, sin que me escuches? ¿Te gritaré: «Violencia», sin que me salves? ¿Por qué me haces ver desgracias, me muestras trabajos, violencias y catástrofes, surgen luchas, se alzan contiendas?.
El Señor me respondió así: «Escribe la visión, grábala en tablillas, de modo que se lea de corrido. La visión espera su momento, se acerca su término y no fallará; si tarda, espera, porque ha de llegar sin retrasarse. El injusto tiene el alma hinchada, pero el justo vivirá por su fe.».

SALMO RESPONSORIAL (Sal 94)

Escucharemos tu voz, Señor

Vengan, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos. R.

Entren, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios, 
y nosotros su pueblo, el rebaño que él guía. R.

Ojalá escuchen hoy su voz:
«No endurezcan el corazón como en Meribá, 
como el día de Masa en el desierto; 
cuando vuestros padres me pusieron a prueba 
y me tentaron, aunque habían visto mis obras.» R.

SEGUNDA LECTURA

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 1,6-8.13-14

Reaviva el don de Dios, que recibiste cuando te impuse las manos; porque Dios no nos ha dado un espíritu cobarde, sino un espíritu de energía, amor y buen juicio. No te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor y de mí, su prisionero. Toma parte en los duros trabajos del Evangelio, según la fuerza de Dios. Ten delante la visión que yo te di con mis palabras sensatas y vive con fe y amor en Cristo Jesús. Guarda este precioso depósito con la ayuda del Espíritu Santo que habita en nosotros.

EVANGELIO

Lectura del santo evangelio según san Lucas 17,5-10

En aquel tiempo, los apóstoles le pidieron al Señor: «Auméntanos la fe.».
El Señor contestó: «Si tuvieran fe como un granito de mostaza, dirían a esa árbol: "Arráncate de raíz y plántate en el mar." Y les obedecería. Supongan que un criado suyo trabaja como labrador o como pastor; cuando vuelve del campo, ¿quién de ustedes le dice: "En seguida, ven y ponte a la mesa"?. ¿No le dirian: "Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo, y después comerás y beberás tú"?. ¿Tienen que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado?. Lo mismo ustedes: Cuando han hecho todo lo mandado, digan: "Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer."».

CREDO NICENOCONSTANTINOPOLITANO

Creo en un solo DIOS, PADRE todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, JESUCRISTO, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz. Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres y por nuestra salvación, bajó del cielo; y por obra del Espíritu Santo se encarnó de  María,  la  Virgen,  y  se  hizo  hombre.
Y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.
Creo en el ESPÍRITU SANTO, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo, recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo la iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.

PLEGARIA UNIVERSAL

Elevemos, hermanos, nuestra plegaria al Señor con aquella confianza filial que el Espíritu Santo suscita en nuestros corazones:

1.- Por la Iglesia, a la que Cristo ha encomendado la tarea de orar por todos, haciendo suyas las necesidades del mundo entero. Roguemos al Señor.

2.- Por el Papa Francisco, para que continúe con valentía promoviendo la paz y la unidad en el mundo. Roguemos al Señor.

3.- Por los religiosos y religiosas, dedicados principalmente a la vida contemplativa. Roguemos al Señor.

4.- Por  nuestro país, para que aportando lo mejor de nosotros mismos, seamos capaces de construir una Nación donde vivamos con  mayor justicia y paz. Roguemos al Señor.

5.- Por nosotros mismos, para que descubramos la necesidad de la oración y aprendamos a orar, como los discípulos, a la escucha del Maestro. Roguemos al Señor.

Señor, Dios todopoderoso, dispuesto siempre a escuchar las oraciones de los que tiene fe como un grano de mostaza, danos un corazón humilde, de tal forma que, después de haber contribuido con nuestro esfuerzo al crecimiento de tu reino, nos reconozcamos siervos inútiles y proclamemos humildad las maravillas de tu amor. Por Jesucristo nuestro Señor.

COMENTARIO

En el c.17 Lucas reúne una serie de dichos de Jesús sobre la vida de la comunidad. En primer lugar, los discípulos piden un "aumento de fe".
Es llamativo y hasta consolador el que duden los discípulos, ya que, según Lucas, esto no les aparta del círculo íntimo de Jesús, ni tampoco, por ser discípulos, se ven preservados o dispensados de la lucha por la fe. Sobre el fondo de la incredulidad general, los discípulos también son conquistados por las tinieblas: no tienen la fe viva que descubriría en todo la presencia del Señor. En parecida situación se encuentra muchas veces el creyente de nuestros días.
La mostaza es la más pequeña de las semillas; pero luego llega a ser un gran arbusto (Mt 13,23; Mc 04,31). Se trata aquí de la primera opción, del primer paso para acercarse al reino. El traslado de las montañas es un tema del AT

(Is 49,11; 40,4) y describe la eliminación de todos los obstáculos que se oponen al Reino de Dios, aunque aquí convenga interpretarlo mejor como una hipérbole que ilustra no tanto el poder de la fe cuanto el poder de Dios, que se hace ostensible y real en la debilidad confiada de los discípulos. Maravilla del que confía en Dios.
El contexto, en el que el siervo es verdaderamente útil, se aplica bien a los discípulos.  No es que Jesús busque una falsa humildad de sus amigos haciéndoles ver que en el reino nadie tiene que considerarse indispensable, sino que, por la gracia de Jesús, porque él quiere que sea así, el creyente entra a formar parte del reino.
No hay otros méritos que los de Cristo. La tarea del cristiano es ser consecuente con la fe en Jesús que le capacita para el reino. La fe y el orgullo caminan por senderos distintos (1 lectura).

PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA DÍA

Lunes 07: Nuestra Señora de la Virgen del Rosario (MO) Jon1, 1—2,1-11; Sal: Jon 2, 2-5.8; Lc 10, 25-37.
Martes 08: Jon 3, 1-10;  Sal  129;  Lc  10, 38-42.
Miércoles 09: Jon   4,  1-11;  Sal 85;  Lc  11, 1-4.
Jueves 10: Ml 3, 13-20ª; Sal 1;  Lc 11, 5-13.
Viernes 11:  Jl 1, 13-15; 2, 1-2; Sal 9; Lc 11, 15-26.
Sábado 12: Jl 4,  12-21;  Sal  96;  Lc  11,  27-28..
Domingo 13:  2R 5, 14-17; Sal 97; 2Tm 2, 8-13; Lc 17, 11-19.