LA SANTISIMA TRINIDAD
COMENTARIO
El misterio de la Santísima Trinidad
consiste en que Dios es uno solo y en Él hay tres Personas: Padre, Hijo y
Espíritu Santo. El misterio de la Santísima Trinidad nos ha sido revelado por
la Persona, palabras y acciones de Jesucristo. Después de haber hablado por los
Profetas, Dios envió a su Hijo, Jesucristo, quien nos dio la Buena Nueva de la
salvación. Este es el mensaje del Nuevo Testamento. La Trinidad es el misterio
más profundo.
Jesús nos ha revelado los
secretos del Reino de los Cielos. Lo supremo de sus enseñanzas es el secreto de
Dios mismo. Nos ha hablado de la vida de Dios. Nos enseñó que Dios, siendo uno
solo, hay en El tres Personas iguales. Nos dijo sus nombres: Padre, Hijo y
Espíritu Santo.
Jesucristo se presentó a
Sí mismo como el eterno y divino Hijo de Dios. Afirmó que es el Hijo, el
Unigénito del Padre, igual al Padre. Jesús nos reveló más plenamente al Padre.
Siempre hablaba de su Padre llamándole por este nombre. Nos enseñó a amar a
nuestro Padre celestial porque nos ama. Él quiere ayudarnos en todas las
necesidades de alma y cuerpo. Quiere llevar a sus hijos a su hogar del Cielo.
Jesús reveló la tercera Persona divina, el Espíritu Santo. El Padre y el Hijo,
después de la Resurrección, lo enviaron a la Iglesia. Jesús había prometido
enviar la tercera Persona, Dios igual que El mismo y el Padre.
Jesús, habló a sus
discípulos acerca del verdadero Dios y los llamó a ser hijos de Dios por el don
del Espíritu. Honramos a la Santísima Trinidad siempre que tomamos conciencia
de que Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo están presentes en nuestra alma. Le
honramos asimismo cuando tratamos de entender con la ayuda de la fe que por el
Bautismo estamos llamados a íntima unión de amor con las tres divinas Personas.
El entendimiento humano no es capaz de comprender la esencia divina y no
puede penetrar en el misterio de la vida íntima de Dios, sólo puede conocer lo
que Dios revela y asumirlo con la fe; se puede aplicar aquí la frase de San
Agustín: "Si lo comprendes, no es Dios".
Nos dirá San Juan Pablo II "Conocer el misterio de la Santísima
Trinidad, nos involucra y compromete para adquirir ciertas actitudes en las
relaciones humanas: "la perfectísima unidad de las tres Personas divinas,
es el vértice trascendente que ilumina toda forma de auténtica relación y
comunión entre nosotros, seres humanos" No se trata de que queramos
entender el Misterio de la Santísima Trinidad, esto es imposible. Jesús nos
reveló ese Misterio para mostrarnos el modelo de lo que deben ser las
relaciones humanas de los cristianos. La Iglesia universal nos invita a
"glorificar a la Santísima Trinidad". No hay mejor forma de hacerlo
que revisando las relaciones con nuestros hermanos, para mejorarlas y así vivir
la unidad querida por Jesús "que todos sean uno”.
R.P. Roland Vicente Castro Juárez
ANTIFONA DE ENTRADA
Bendito sea Dios
Padre y el Hijo unigénito de Dios y el Espíritu Santo, porque ha tenido
misericordia de nosotros.
ORACION
COLECTA
Dios Padre, que al enviar al mundo la Palabra de la verdad y el
Espíritu de la santificación, revelaste a los hombres tu admirable misterio,
concédenos, al profesar la fe verdadera, reconocer la gloria de la eterna
Trinidad y adorar la Unidad en su poder y grandeza. Por nuestro Señor
Jesucristo.
PRIMERA LECTURA
Lectura del Libro del Éxodo 34, 4b-6.8-9
En aquellos días, Moisés subió de madrugada
al monte Sinaí, como le había mandado el Señor, llevando en sus manos las dos
tablas de piedra. El Señor bajo en la nube y se quedó con el allí, y Moisés invoco
el nombre del Señor. El Señor paso delante de él y exclamo: “Señor, Señor, Dios
compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en clemencia y lealtad”.
Moisés, al momento se inclinó a tierra y se postro. Y le dijo: “Si he obtenido
tu favor, que mi Señor vaya con nosotros, aunque este sea un pueblo testarudo,
perdona nuestras culpas y pecados y tómanos como tu herencia.
SALMO
RESPONSORIAL (Dn 3)
A ti gloria y
alabanza por los siglos.
Bendito eres, Señor, Dios
de nuestros padres, bendito tu nombre santo y glorioso. R.
Bendito eres en el templo
de tu santa gloria. R.
Bendito eres sobre el
trono de tu Reino. R.
Bendito eres tú, que
sentado sobre querubines sondeas los abismos. R.
Bendito eres en la bóveda
del cielo. R.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a
los corintios 13, 11-13
Hermanos: Estén alegres, busquen la
perfección, anímense, tengan un mismo sentir y vivan en paz. Y el Dios del amor
y de la paz estará con ustedes. Salúdense mutuamente con el beso santo. Les
saludan todos los hermanos en la fe. La gracia del Señor Jesucristo, el amor de
Dios y la comunión del Espíritu Santo permanezcan siempre con ustedes.
ACLAMACION ANTES DEL EVANGELIO Ap 1, 8
Aleluya. Gloria al
Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo, al Dios que es, que era y que viene. Aleluya.
EVANGELIO
Lectura del santo
evangelio según san Juan 3, 16-18
Tanto amo Dios al mundo que entrego a su Hijo
único para que no perezca ninguno de los que creen en El, sino que tengan vida
eterna. Porque Dios no mando a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para
que el mundo se salve por medio de él. El que cree en El no será condenado; por
el contrario, en el no cree ya está condenado, porque no ha creído en el nombre
del Hijo único de Dios.
PLEGARIA
UNIVERSAL
Oremos a Dios
Padre, Hijo y Espíritu Santo, al Dios cercano y fiel y pidámosle que escuche
nuestras oraciones, nos de la fuerza de su gracia y nos salve. Digamos juntos:
R.- Escúchanos,
Señor.
1.- Para que el Espíritu Santo asista con la
sabiduría al Papa y a los Obispos y ponga su morada en todos los cristianos. Oremos. R.
2.- Para que el pueblo de Dios sepa oír su
voz y recocer su presencia en la historia y en su vida cotidiana. Oremos. R.
3.-
Para que la Iglesia, pueblo elegido de Dios, sea signo de su amor
misericordioso. Oremos. R.
4.- Para que la Santísima Trinidad colme de
paz y de gozo a quienes consagran toda su vida a la oración y a la
contemplación. Oremos. R.
5.- Para que la comunión de vida y amor de la
Trinidad se prolongue en la vida de los que celebramos en la Eucaristía la
Pascua del Señor. Oremos. R.
Señor Dios, Uno y
Trino, tu que eres compasivo y misericordiosos, apiádate de tus hijos que te
suplican con fe, da a los hombres un corazón nuevo y ayúdanos con tu gracia
para ir a ti. Por Jesucristo nuestro Señor.
ORACION SOBRE LAS OFRENDAS
Por la invocación de tu nombre, santifica, Señor y Dios nuestro, estos
dones de nuestra docilidad y transfórmanos, por ellos, en ofrenda permanente.
Por Jesucristo nuestro Señor.
ANTIFONA DE COMUNION Ga 4, 6
Como son hijos, Dios envío
a sus corazones el Espíritu de su Hijo, que clama: “Abba, Padre”.
ORACION DESPUES DE LA COMUNION
Señor y Dios nuestro, que la recepción de este sacramento y la
profesión de fe en la santa y eterna Trinidad y en su Unidad indivisible, nos
aprovechen para la salvación del alma y del cuerpo. Por Jesucristo nuestro
Señor.
PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA DÍA
Lunes 05: Tb 1,
3: 2, 1b-8; Sal 111; Mc 12, 1-12
Martes 06: Tb 2, 9-14; Sal 111; Mc 12, 13-17
Miércoles 07: Tb 3, 1-11ª.16-17ª; Sal 24; Mc 12 18, 27.
Jueves 08: Tb 6, 10-11; 7, 1.9-17; Sal 127; Mc 12,
28b-34.
Viernes 09: Tb 11, 5-17; Sal 145; Mc 12, 35-37.
Sábado 10: Tb 12, 1.5-15.20; Sal: Tb 13, 2-8; Mc 12,
38-44.
Domingo 11: Dt 8,
2-3.14b-16a; Sal 147; 1Co 10, 16-17; Jn 6, 51-58.
COMENTARIOS AL EVANGELIO
Jn 3. 16-18
1. LEY/SV: LA LEY ACUSA
DESDE FUERA. EL HIJO SALVA DESDE DENTRO. Dialogo Jesús-Nicodemo, centrado en la
necesidad de nacer de nuevo y de arriba. Por el desarrollo del diálogo se
entrevé que el arriba tiene la altura de la cruz, en la que se pondrá de
manifiesto el espíritu que Jesús transmite. Por eso en este mismo diálogo el
nacer de arriba es sinónimo de nacer del espíritu.
Nicodemo, maestro de Israel, representa la
concepción religiosa que empezaba a ser la preponderante en tiempos de Jesús.
Según esta concepción, Dios se ha revelado de una vez por todas en la Ley y
sólo en la Ley. La relación del hombre con Dios pasa necesariamente por la Ley.
El hombre sólo puede encontrar a Dios en los mandamientos de Dios. La
revelación de Dios es, pues Ley y sólo Ley.
Frente al modo de concebir la relación Dios-hombre
propuesta por Nicodemo, Jesús propone otra muy distinta. Dios no se revela al
mundo(=a los hombres) a través de la Ley, sino a través de su Hijo. Por
consiguiente, no se revela como legislador que dicta lo que hay que hacer, sino
como Padre. El Hijo, en consecuencia, no es alguien que enjuicia desde fuera
(esto es propio de la Ley), sino alguien que comparte desde dentro y por eso
salva. Padre e Hijo no son ni el superyo ni representan un tipo de misericordia
paternalista. Lo que cada uno seamos, nuestro enjuiciamiento, esto es obra
exclusiva nuestra, de la postura que adoptemos ante el Hijo. Queda, pues, excluido
todo enjuiciamiento externo y en base al cumplimiento de la Ley.
DABAR 1981/35
Creer en el Hijo significa aceptarlo como Salvador
y dador de vida eterna. Quien así lo hace, participa ya ahora en la vida eterna
que él ofrece a todos los hombres. Él vino a ofrecer a todos la vida eterna; la
sentencia de condena se la da el que rechaza la vida y la salvación que el Hijo
ofrece: éste permanece en la muerte y, por tanto, él mismo se condena.
J. ROCA - MISA DOMINICAL 1981/12
3. FE/RELIGION D/IMAGENES-FALSAS ATEISMO/IDOLATRIA:
ESTA ES LA DISYUNTIVA AUTENTICA: NO LA DE FE-ATEISMO.
Con anterioridad a las palabras de hoy Jesús ha
invitado a Nicodemo a un renacer o nacer de nuevo. Tal vez sea ésta la
invitación que deba presidir este comentario. ¡Tengamos el valor y la humildad
de cambiar nuestros conceptos y nuestras imágenes de Dios! Son, en efecto,
muchos los conceptos que sobre Dios circulan, como son también muchas las
mediaciones que de Él se hacen. Unos y otras deberán medirse y confrontarse con
este texto, que nos habla de un Dios que ama y no juzga, de un Dios que ama a
todos y de un Dios cuya única mediación fidedigna es Jesús.
No nos engañemos. Los puntos de vista de Nicodemo
no son exclusivos de un pasado judío. Representan, más bien, tendencias y
hábitos de ayer y de hoy. Y es que el Dios que imaginamos los humanos, todos
porque todos somos religiosos, tiene muy poco que ver con el Dios real, el
manifestado por el Hijo de Dios.
Termino con una propuesta tal vez exagerada: dejemos
de creer tanto en Dios y pidamos a Jesús que nos enseñe a creer en Dios.
Tal vez por aquí es por donde tenga que empezar hoy
el testimonio cristiano.
A. BENITO - DABAR 1990/32
4.- Hoy tenemos más conciencia que en otras épocas
de que la disyuntiva más que entre "ateísmo" (=no creer en Dios) o
religión (=creer en Dios), está entre "fe en el Dios de Jesús" e
"idolatría" (=creer en otros dioses). Porque hemos llegado a la
conclusión de que nadie deja de tener sus dioses, ante los cuales sacrifica su
vida y la de los demás, cuya prioridad convierte en ley suprema. Dioses del
negocio, del poder, del placer, del deporte, o también dioses en el campo
religioso, pero que en todo caso están lejos del Dios que revela Jesús. Quizá
tengamos que tener conciencia clara de que nuestra mayor tentación no es el
ateísmo sino la idolatría. Por eso nuestra reflexión inicial parece que tendría
que ser: ¿A qué Dios adoramos? ¿En qué Dios creemos?
DABAR 1990/32
5. /Jn/03/18 VE/PRESENTE: LA PERSPECTIVA DE Jn ES LA DE UNA
ESCATOLOGÍA QUE SE REALIZA EN EL PRESENTE. A-D/CONDENACION LA
CONDENACIÓN ES LA OTRA CARA DEL AMOR. CONDENACION/ICD LA
ICD ES UNA AUTOCONDENA.
"El que cree en él, no será condenado; el que
no cree, ya está condenado": La perspectiva juánica es la de una escatología
que se realiza en el presente. Con referencia a la fe en el Hijo, los hombres
están en las tinieblas de la condena u obtienen la vida eterna. Es un juicio
atípico, no se trata de premiar al justo y castigar al culpable. El dato es que
Dios ama: pero la aceptación de este amor es libre. La condena es la otra cara
del amor. La culpa no es de Dios, sino del que no cree en el Hijo. La
incredulidad es una autocondena.
J. NASPLEDA - MISA DOMINICAL 1987/12
6.- El v. más importante de todo el cuarto evangelio.
La afirmación clara y terminante del amor de Dios como la causa verdadera,
última y determinante de la presencia de su Hijo en el mundo.
-La intención más clara y determinante de Dios es
que el mundo se salve.
-Jesús vino como salvador. Pero quien no lo acepta
como el Hijo de Dios, se condena a sí mismo al rechazar la salvación que le ha
sido ofrecida.
Criterio según el cual se llevará a efecto el
juicio: la fe. El que cree no es juzgado. El que no cree ya está juzgado. Por
no haber creído en Jesús como la prueba máxima del amor de Dios.
7.- Nicodemo, que sólo aparece en este evangelio,
es presentado como un doctor de la Ley, miembro fariseo del sanedrín. Es el
prototipo del judío piadoso preocupado por la cuestión de la salvación, en
definitiva por el problema central de todo hombre: el sentido.
El fragmento que leemos es la parte final del
diálogo iniciado entre Jesús y Nicodemo. Algunos afirman que se trata de
palabras del evangelista que ha introducido como explicación de lo que dice
antes Jesús. Pero quizá sencillamente haya que tener presente lo que otros han
puesto de manifiesto: el Jesús del cuarto evangelio habla como el autor de la
primera carta de Juan, es decir, se hace muy difícil (o imposible, y
seguramente no hay ninguna necesidad de hacerlo...) separar las palabras de
Jesús de las del evangelista.
El mundo es objeto del amor de Dios. La voluntad de
Dios es de salvación universal (no para unos cuantos) y no de condenación (¡y
hay quienes todavía no se han enterado!). Su amor por el mundo es tan grande
que "entregó a su Hijo único". En esta expresión se esconde
evidentemente una alusión a la cruz: de hecho el amor inmenso de Dios se ha
visto de una manera palpable en la donación hasta el final, hasta el extremo,
de Jesús. Por otro lado, también es clara la alusión al hijo único de Abrahan,
Isaac.
Queda abierta la posibilidad de condenación, a
pesar de la voluntad única de salvación de Dios. Uno puede rechazar el amor de
Dios, o cerrarse a él. Habría que recordar que en la obra juánica creer y amar
son sinónimos. Cuidado, pues, en no identificar rápidamente a "los que
creen" y "los que no creen"...
J. M. GRANÉ - MISA DOMINICAL 1993/08
8.- La respuesta fundamental del cristiano en el
nuevo milenio será afirmar el amor de Dios que sobrepasa toda esperanza y toda
comprensión humanas. No se puede concebir nada mayor que el hecho de que Dios
es un exceso de amor, Deus semper major. Dios ha entregado a su único Hijo al
abismo de la muerte y del pecado por nosotros. Esto es «más grande de lo que
puede ser pensado»[San Anselmo, Proslogion, II]. Éste tiene que ser el mensaje
que los cristianos lleven al próximo siglo.
PROPUESTA DE CANTOS PARA LA MISA DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD
01.- EL DIOS
UNO Y TRINO (Bernardo Velados - Juan Jauregui)
EL
DIOS UNO Y TRINO, MISTERIO DE AMOR,
HABITA
EN LOS CIELOS Y EN MI CORAZÓN (2).
1.
Dios escondido en el misterio,
como
la luz que apaga las estrellas;
Dios
que te ocultas a los sabios
y
a los pequeños te revelas.
2.
No es soledad, es compañía,
es
un hogar tu vida eterna,
es
el amor que se desborda
de
un mar inmenso sin riberas.
3.
Padre de todos, siempre joven,
al
Hijo amado eterno engendras,
y
el Santo Espíritu procede
como
el Amor que a los dos sella.
4.
Padre, en tu gracia y tu ternura,
la
paz, el gozo y la belleza,
danos
ser hijos en el Hijo
y
hermanos todos en tu Iglesia.
5.
Al Padre, al Hijo y al Espíritu,
acorde
melodía eterna,
honor
y gloria por los siglos
canten
los cielos y la tierra.
02.- ALABEMOS
AL SEÑOR. ( J. Madurga)
ALABEMOS
AL SEÑOR
PORQUE
SU AMOR NO TIENE FIN,
ALABEMOS
AL SEÑOR
DEL
UNO AL OTRO CONFÍN.
1.
Grande es Dios
en
la creación del universo
Grande
en las estrellas y el sol
del
firmamento.
2.
Bueno es Dios
en
la redención de lo creado
Bueno
Cristo muerto en la cruz
Y
resucitado.
3.
Santo es Dios
santificador
de lo creado,
Santo
es Espíritu de Dios
Que
nos ha dado.
03.- CON AMOR
TE PRESENTO, SEÑOR (C. Erdozain)
1.
Con amor te presento, Señor,
lo
mejor de mi vida,
te
presento, Señor, mi amistad.
Con
amor te presento, Señor,
para
ser mi manjar.
La
viña, el racimo, el trigal,
el
pan de mi hogar
te
presento con amor.
2.
Con mis manos abiertas a Ti,
contemplando
tu lámpara,
te
presento, Señor, mi esperanza.
Hacia
Ti se dirige mi barca,
hacia
el cielo se va.
Es
largo el camino, el remar,
ruta
pascual,
Dios
me guía al caminar.
3.
Con mi ofrenda también yo te doy
lo
mejor de mis lágrimas.
Te
presento, Señor, mi dolor.
Te
presento, Señor, mi oración,
ofertorio
de amor.
El
grano enterrado ya es flor,
la
espiga oblación,
la
semilla redención.
04.- ACEPTA,
SEÑOR, EL VINO Y EL PAN (Joaquín Madurga)
ACEPTA
SEÑOR EL VINO Y EL PAN
CON
ELLOS TRAEMOS TU OFRENDA A TU ALTAR
1.
Sobre tu altar Señor va nuestra ofrenda
el
abrazo sincero al hermano
perdonándonos
nuestras ofensas.
2.Sobre
el Altar, Señor, va nuestra ofrenda:
trabajar
por un mundo más justo de igualdad
y
concordia fraterna.
3.
Sobre el Altar, Señor, va nuestra ofrenda:
convertir
nuestra vida pasada
al
mensaje de tu Buena Nueva.
05.- TE
PRESENTAMOS EL VINO Y EL PAN (J.A. Espinosa)
TE
PRESENTAMOS EL VINO Y EL PAN,
BENDITO
SEAS POR SIEMPRE, SEÑOR. / (2)
Bendito
seas, Señor,
por
este pan que nos diste,
fruto
de la tierra
y
del trabajo de los hombres.
Bendito
seas, Señor,
el
vino Tú nos lo diste,
fruto
de la tierra
y
del trabajo de los hombres.
06.- ACERQUÉMONOS
TODOS AL ALTAR (Fco. Palazon)
ACERQUÉMONOS
TODOS AL ALTAR
QUE
ES LA MESA FRATERNA DEL AMOR,
PUES
SIEMPRE QUE COMEMOS DE ESTE PAN
RECORDAMOS
LA PASCUA DEL SEÑOR.
1.
Los hebreos, en medio del desierto, comieron el maná,
nosotros,
peregrinos de la vida, comemos este pan;
Los
primeros cristianos ofrecieron su cuerpo como trigo;
nosotros,
acosados por la muerte, bebemos este vino.
2.
Como Cristo hecho pan de cada día, se ofrece en el altar
nosotros
entregados al hermano comemos de este pan;
Como
el cuerpo de Cristo es uno solo por todos ofrecidos
nosotros
olvidando divisiones bebemos este vino.
3.
Como ciegos en busca de la aurora, dolientes tras la paz
buscando
tierra nueva y cielos nuevos, comamos este pan.
Acerquémonos
todos los cansados, porque El es nuestro alivio
y
siempre que el desierto nos agobie, bebamos este vino.
07.- SEÑOR
DIOS NUESTRO (SALMO 8) (Fco. Palazon)
SEÑOR
DIOS NUESTRO,
¡QUE
ADMIRABLE ES TU NOMBRE
EN
TODA LA TIERRA!
¡EN
TODA LA TIERRA!
1.Cuando
contemplo el cielo,
obra
de tus dedos,
la
luna y las estrellas
que
has creado.
¿Qué
es el hombre
para
que te acuerdes de él,
el
ser humano
para
darle poder? (Bis)
2.Lo
hiciste poco inferior a los ángeles,
lo
coronaste de gloria y dignidad,
le
diste el mando
sobre
las obras de tus manos,
todo
lo sometiste bajo sus pies.
3.Rebaños
de ovejas y toros,
y
hasta las bestias del campo,
las
aves del cielo,
los
peces del mar,
todo
lo sometiste bajo sus pies.
08.- DONDE
HAY CARIDAD Y AMOR (J. Madurga)
DONDE
HAY CARIDAD Y AMOR,
ALLÍ,
ESTÁ EL SEÑOR. / (2)
Una
sala y una mesa, una copa, vino y pan,
los
hermanos compartiendo en amor y en unidad.
Nos
reúne la presencia y el recuerdo del Señor,
celebramos
su memoria y la entrega de su amor.
Invitados
a la mesa del banquete del Señor,
recordamos
su mandato de vivir en el amor.
Comulgamos
en el Cuerpo y en la Sangre que Él nos da,
y
también en el hermano, si lo amamos de verdad.
Este
pan que da la vida y este cáliz de salud
nos
reúne a los hermanos, en el nombre de Jesús.
Anunciamos
su memoria, celebramos su pasión,
el
misterio de su muerte y de su resurrección.
09.- EL SEÑOR
ES MI FUERZA (J.A. Espinosa)
EL
SEÑOR ES MI FUERZA, MI ROCA Y SALVACIÓN.
1.
Tú me guías por sendas de justicia
me
enseñas la verdad
Tú
me das el valor para la lucha
sin
miedo avanzaré.
2.
Iluminas las sombras de mi vida
al
mundo das la luz
aunque
pase por valles de tiniebla
yo
nunca temeré.
3.
Yo confío el destino de mi vida
al
Dios de mi salud
a
los pobres enseñas el camino
su
escudo eres Tú.
4.
El Señor es la fuerza de su pueblo
su
gran libertador
Tú
le haces vivir en confianza
seguro
en tu poder.
010.- JUNTO A
TI MARÍA (Kairoi)
Junto
a ti María.
como
un niño quiero estar,
tómame
en tus brazos
guíame
en mi caminar.
Quiero
que me eduques,
que
me enseñes a rezar,
hazme
transparente,
lléname
de paz.
MADRE,
MADRE
MADRE,
MADRE,
(BIS)
Gracias
Madre mía
por
llevarnos a Jesús,
haznos
más humildes
tan
sencillos como Tú.
Gracias
Madre mía
por
abrir tu corazón,
porque
nos congregas
y
nos das tu amor.
011.- ACOMPÁÑAME
MARÍA
ACOMPÁÑAME
MARÍA, EN MI LARGO CAMINAR,
ACOMPÁÑAME
MAMITA CUANDO YA NO PUEDA MÁS.
Tu
hijo es mi vida, la razón de mí existir,
caminando
contigo tengo fuerzas de seguir.
Eres
cuanto respiro, la razón de mí vivir,
no
me dejes Madre mía no podría resistir. -
Eres
música en mi alma, el sello en mi corazón,
te
refugio en mis sentidos, amor de mi amor.
Mi
corazón ya no está triste, mi alma sedienta está,
Madre
mía cuanto te amo, dime como amarle más.
012.- MARÍA,
LA MADRE BUENA (Kairoi)
Tantas
cosas en la vida
nos
ofrecen plenitud,
y
no son más que mentiras
que
desgastan la inquietud.
Tú
has llenado mi existencia
al
quererme de verdad,
yo
quisiera Madre buena amarte más.
En
silencio escuchabas
la
palabra de Jesús,
y
la hacías pan de vida
meditando
en tu interior.
La
semilla que ha caído
ya
germina y está en flor,
con
el corazón en fiesta cantaré.
AVE
MARÍA, AVE MARÍA,
AVE
MARÍA, AVE MARÍA.
Desde
que yo era muy niño
has
estado junto a mí,
y
guiado de tu mano
aprendí
a decir sí.
Al
calor de la esperanza
nunca
se enfrió mi Fe,
y
en la noche más oscura fuiste luz.
No
me dejes Madre mía
ven
conmigo al caminar,
quiero
compartir mi vida
y
crear fraternidad.
Muchas
cosas en nosotros
son
el fruto de tu amor,
la
plegaria más sencilla cantaré.