TU ERES PEDRO Y TE DARÉ LAS LLAVES DEL REINO DE LOS CIELOS
COMENTARIO
La
región en que tiene lugar la escena se encuentra al noreste de Galilea de los
paganos. Mateo no solamente muestra interés por el tema cristológico, que sin
lugar a dudas es el central, sino también por la Iglesia. Nos habla de ello en
términos explícitos y quiere llamar nuestra atención
sobre su pertenencia a Cristo ("mi Iglesia") y sobre su perenne
estabilidad. La Iglesia es una casa construida sobre roca, aunque se apoya en
la fragilidad de los hombres. Por tanto, una estabilidad atormentada, inquieta.
El destino de la Iglesia es como el de Cristo: un camino en la contradicción. Y
no se trata solamente de enemigos externos; dentro de la Iglesia habrá siempre
pecadores; por eso la Iglesia tiene necesidad de "atar y desatar";
continúa el pecado; por eso debe continuar el perdón. Dentro del motivo
cristológico y del motivo eclesial es como se han de entender las palabras
dirigidas por Jesús a Pedro. Son palabras afines a otros dos textos célebres:
Lc 22, 31ss. y Jn 21, 15-17. Por lo demás, el evangelio entero de Mt. muestra
interés por Pedro. No importa aquí saber si se trata o no de una inserción
redaccional del evangelista. El hecho es que estos vv. están aquí y que su
presencia confiere un significado particular a este texto.
La función de Pedro se define con tres metáforas: la piedra, las llaves,
atar y desatar. Para comprender la primera expresión podemos recurrir a otro
texto de Mt (7, 24-27): Pedro es la roca que mantiene firme a la Iglesia. En
otras palabras, es el punto alrededor del cual se constituye la unidad de la
comunidad. La segunda metáfora es todavía más clara: dar las llaves significa
confiar una autoridad verdadera y plena. Finalmente, la tercera metáfora (atar
y desatar) tiene el sentido de permitir y prohibir, de separar y perdonar. En
conclusión, el texto atribuye a Pedro títulos y prerrogativas que a lo largo de
la Biblia se atribuyen al Mesías. Es como decir que la autoridad de Pedro es
vicaria; él es imagen de otro, de Cristo, que es el verdadero Señor de la
Iglesia. Más precisamente porque es imagen de Cristo, la autoridad de Pedro es
plena e indiscutible.
No obstante, hay todavía otro punto que hemos de observar con particular
atención; no es ciertamente casual la presencia en el mismo fragmento de dos
aspectos aparentemente en contraste: la fe de Pedro y su incomprensión del
misterio de Jesús: la autoridad confiada a Pedro y el reproche que le hace
Jesús. El tema es de fondo, hasta el punto de que recorre todo el fragmento
bajo la forma de contraste entre debilidad y gracia. También los otros dos
textos citados (Lc 22 y Jn 21) evidencian el mismo contraste; por una parte, la
debilidad de Pedro; por otra, su carácter de punto de referencia. Luego, los
evangelistas subrayan intencionadamente este contraste para acentuar que, por
gracia, en virtud de una elección divina y no por dones naturales, es Pedro la
roca sobre la cual funda Cristo la Iglesia.
R.P Roland Vicente Castro Juárez
ANTIFONA DE ENTRADA Sal 85, 1-3
Inclina tu oído,
Señor, escúchame. Salva a tu siervo que confía en ti. Piedad de mí, Señor, que
a ti te estoy llamando todo el día.
ORACION
COLECTA
Oh, Dios, que unes los corazones de tus fieles en un mismo deseo,
concede a tu pueblo amar lo que prescribes y esperar lo que prometes, para que,
en medio de las vicisitudes del mundo, nuestros ánimos se afirmen allí donde
están los gozos verdaderos. Por nuestro Señor Jesucristo.
PRIMERA LECTURA
Lectura del libro de Isaías 22, 19-23
Así dice el Señor a Sebná, mayordomo
de palacio: «Te echaré de tu puesto, te destituiré de tu cargo. Aquel día,
llamaré a mi siervo, a Eliaquím, hijo de Jilquías: le vestiré tu túnica, le
ceñiré tu banda, le daré tus poderes; será padre para los habitantes de
Jerusalén, para el pueblo de Judá. Colgaré de su hombro la llave del palacio de
David: lo que él abra nadie lo cerrará, lo que él cierre nadie lo abrirá. Lo fijaré como un clavo en
sitio firme, dará un trono glorioso a la casa paterna».
SALMO
RESPONSORIAL (Sal)
Tu misericordia es
eterna, Señor.
Te doy gracias, Señor, de
todo corazón; delante de los ángeles tocaré para ti, me postraré hacia tu
santuario, daré gracias a tu
nombre. R.
Por tu misericordia y tu
lealtad, porque tu promesa supera a tu fama; cuando te invoqué, me escuchaste,
aumentaste el valor en mi alma. R.
El Señor es sublime, se
fija en el humilde, y de lejos conoce al soberbio. Señor, tu misericordia es
eterna, no abandones la obra
de tus manos. R
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos
11, 33-36
¡Qué abismo de generosidad, de
sabiduría y de conocimiento el de Dios! ¡Qué impenetrables sus decisiones y qué
incomprensibles sus caminos! ¿Quién conoció la mente del Señor? ¿Quién fue su
consejero? ¿Quién le ha dado algo antes, para que Él se lo devuelva? Él es el
origen, guía y meta del universo. A Él la gloria por siempre. Amén.
ACLAMACION ANTES DEL EVANGELIO Mt 16, 18
Aleluya. Tú eres Pedro, y sobre esta piedra
edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Aleluya.
EVANGELIO
Lectura del santo
Evangelio según san Mateo 16, 13-20
En aquel tiempo, al llegar a la región de
Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que
es el Hijo del hombre?». Ellos contestaron: «Unos dicen que Juan Bautista,
otros, Elías, y otros, Jeremías o uno de los profetas».
Él les preguntó: «Y ustedes, ¿quién dicen que
soy yo?». Simón Pedro tomó la palabra y dijo: «Tú eres el Mesías, el Hijo de
Dios vivo». Jesús le respondió: «¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás! porque eso
no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el
cielo. Ahora te digo yo: tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi
Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del Reino
de los Cielos: lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y lo que
desates en la tierra, quedará desatado en el cielo». Y les mandó a los
discípulos que no dijesen a nadie que Él era el Mesías.
PLEGARIA
UNIVERSAL
Hermanos, la
misericordia de Dios es eterna; por eso supliquémosle con confianza diciendo: R.
Padre, escúchanos.
1.- Para que la Iglesia viva en constante
acción de gracias a Dios por sus múltiples dones. Oremos al Señor. R.
2.- Para que el Papa y nuestro obispo ejerzan
su ministerio con los mismos sentimientos de Cristo. Oremos al Señor. R.
3.- Para que la fe de los cristianos se
traduzca en obras en favor de los más pobres y necesitados. Oremos al Señor. R.
4.- Para que los que viven encarcelados sean
tratados con respeto y conforme a su dignidad de personas. Oremos al Señor. R.
5.- Para que los que son perseguidos por
defender la verdad, los exiliados y los inmigrantes puedan disfrutar de la
libertad y la justicia. Oremos al
Señor. R.
6.- Para que al proclamar que Jesús es el
Hijo de Dios, nos comprometamos a vivir como Él vivió. Oremos al Señor. R.
Padre, escucha las
súplicas de tus hijos y danos tu salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor. R.
ORACION SOBRE LAS OFRENDAS
Señor, que adquiriste para ti un pueblo de adopción con el sacrificio
de una vez para siempre, concédenos propicio los dones de la unidad y de la paz
en tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTIFONA DE COMUNION Jn 6, 54
El que come mi carne y
bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día, dice el
Señor.
ORACION DESPUES DE LA COMUNION
Te pedimos, Señor, que realices plenamente en nosotros el auxilio de
tu misericordia, y haz que seamos tales y actuemos de tal modo que en todo
podamos agradarte. Por Jesucristo, nuestro Señor.
PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA DÍA
Lunes 28:1Ts 1, 1-5.8b; Sal 149; Mt 23, 13-22
Martes 29: 1Ts 2, 1-8; Sal 138; Mc 6, 17-29.
Miércoles 30: Eclo 3, 17-24; al 15; Flp 3, 8-14; Mt6 13,
31-35.
Jueves 31: 1Ts 3, 7-13; Sal 89; Mt 24, 42-51.
Viernes 01: 1Ts 4, 1-8; al 96; Mt 25, 1-13.
Sábado 02: 1Ts 4, 9-11; Sal 97; Mt 25, 14-30.
Domingo 03: Jr
20, 7-9; Sal 62; Rm 12, 1-2; Mt 16, 21-27.
COMENTARIOS AL
EVANGELIO
Mt 16, 13-20
Paralelos:
Mc 8, 27-30 Lc 9, 18-21
1.- La región en que tiene lugar la escena se
encuentra al noreste de Galilea de los paganos. Sin ser totalmente una tierra
extranjera, la región participa mucho de esta condición. Si a esto se añade el
contexto precedente que habla de la prevención contra la enseñanza
específicamente religiosa judía, tendremos que concluir que Mateo está
presentando y escribiendo en clave y perspectiva de una nueva realidad
religiosa.
Esta nueva realidad va a recibir en este
texto el nombre de Iglesia de Jesús (v.18). Es la primera vez que el término
Iglesia aparece en el evangelio de Mateo para designar la comunidad de
discípulos de Jesús, es decir, la comunidad de creyentes en él.
El término griego empleado es el mismo que la
traducción griega del A.T., llamada de los Setenta, emplea para traducir
pueblo, asamblea, congregación.
En el texto de hace dos domingos escuchábamos
de labios de los discípulos el reconocimiento de Jesús como Hijo de Dios (Mt
14. 33). Es el mismo reconocimiento que escuchamos hoy de labios de Simón. Este
reconocimiento distingue al discípulo de la gente.
"¿Quién dice la gente... quién decís
vosotros que soy yo?" Mateo sigue operando con la división claramente
introducida a partir del capítulo de las parábolas.
PEDRO/PIEDRA: El reconocimiento de Simón adquiere la
condición de fundamento o cimiento sólido. A esta condición debe Simón su
sobrenombre de Pedro. Algo del juego de palabras del texto griego puede
percibirse también en castellano: Pedro-piedra.
Sobre este cimiento, consistente en el
reconocimiento de la identidad divina de Jesús por el hijo de Jonás, se levanta
la comunidad o pueblo creyente. Por tratarse de un cimiento sólido, el edificio
construido sobre él ofrece totales garantías. Esto es lo que quiere expresar la
imagen recogida en la frase "el poder del infierno no la derrotará".
El edificio es inexpugnable a la destrucción y a la muerte. Esta misma idea de
la consistencia de un edificio construido sobre cimientos sólidos la ha
expresado Jesús con otra imagen diferente en /Mt/07/25: "Vinieron las
lluvias, se desbordaron los ríos y los vientos soplaron violentamente contra la
casa; pero no cayó, porque estaba construida sobre un verdadero cimiento de
piedra".
INFIERNO/HADES: A decir verdad, el término
"infierno" no es la traducción más adecuada del término
"hades" empleado en el texto griego. En la mitología clásica el hades
es la mansión de los muertos, el lugar de la muerte, equivalente al
"sheol" de los judíos.
A propósito del v. 19 hay que hacer notar que
en él no se identifican Iglesia y Reino de Dios. Recuérdese que la expresión
Reino de los cielos es la formulación judía de la expresión Reino de Dios. A su
vez, Reino de Dios no se equipará tampoco con el cielo del más allá. Lo mismo
que en el v. 18 se habla de la Iglesia como de un edificio, el v. 19 concibe
también el Reino de Dios como un edificio. Ambos edificios son diferentes, pero
están comunicados entre sí. El cauce de comunicación es el reconocimiento de la
identidad divina de Jesús por el hijo de Jonás. Probablemente es así como hay
que interpretar la imagen de las llaves. Ese reconocimiento confiere el poder
de perdonar, del que Pedro es garantía en su condición de cimiento del
edificio.
Comentario. El discípulo que Mateo va poco a
poco diseñando tiene su núcleo en la respuesta a una pregunta sobre Jesús.
"¿Quién decís que soy yo?". La pregunta es la misma ayer y hoy. La
respuesta a ella dará la medida del discípulo.
La superioridad de Pedro en la respuesta a
esta pregunta no estriba en la respuesta en sí. La respuesta en efecto, es la
misma que la dada por los demás discípulos hace dos domingos (ver Mt 14.
22-23). La superioridad de Pedro reside más bien en conferir garantía de
solidez a lo que los demás descubren. Por ello mismo el modelo de Iglesia que
el texto de hoy sugiere, leído el texto en el contexto global del evangelio de
Mt, es tal vez el inverso al habitualmente practicado.
A. BENITO - DABAR 1990 43
2. FE/DON
¿Quién es éste a quien obedecen el viento y
el mar? ¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre? Jesús pregunta qué
opinión tienen los hombres de él. El interrogante que Jesús abre en esta
ocasión sigue abierto para todos los hombres de todos los tiempos. ¿Y vosotros,
quién decís que soy yo? La respuesta solamente puede darse desde dos puntos de
vista.
El punto de vista de los hombres, la
apreciación humana sobre este personaje de la Historia, y el punto de vista de
Dios, el de la revelación y el conocimiento sobrenatural. Pedro personifica la
confesión cristiana de la fe; el Mesías, el Hijo de Dios.
Pero esta confesión cristiana "no
procede de la carne ni de la sangre", es decir, no es posible llegar a
través de la lógica y de la razón humana, Se hace posible únicamente gracias a
la revelación del Padre. Sí, la fe viene de fuera. El hombre, por muy
inteligente que sea, es radicalmente incapaz de acceder a lo que es dominio misterioso
de Dios.
"Mi Padre te lo ha revelado." Mi
Padre: esa relación fundamental de Jesús con ese otro a quien llama Padre, esa
unión esencial con el Padre: "mi Padre y Yo somos uno", y al mismo
tiempo esa distinción. Nos deja entrever el abismo infinito de su persona.
3.- El relato se encuentra centrado en torno
al doble intercambio de títulos entre Jesús y Pedro. Este aplica al primero el
título de Mesías; aquél responde atribuyendo al segundo el título de Piedra y
confiriéndole los poderes mesiánicos de las llaves. Pedro rehúsa aplicar a Xto
el título de Siervo paciente, Xto replica atribuyéndole el título Piedra de
escándalo.
MAERTENS-FRISQUE - NUEVA GUIA DE LA ASAMBLEA
CRISTIANA V - MAROVA MADRID 1969.Pág. 300
4.-
Contexto. Desde 15, 21, Mateo ha dotado a la dialéctica Jesús-viejo
Pueblo de una delimitación geográfica. Desde entonces demuestra interés por
situar a Jesús en territorio no típicamente judío. De esta manera Mateo recalca
la existencia de un nuevo Pueblo de dimensiones universales y que no deberá
reproducir la doctrina de fariseos y saduceos (cfr. Mateo 16, 12). En los
versículos del cap. 16 inmediatamente anteriores al Evangelio de hoy, Mateo
centra su atención en la principal línea dirigente del viejo Pueblo.
Texto. El autor ya no estructura el texto
partiendo de Jesús solo, para después ir dando entrada a unos y otros. El texto
de hoy está estructurado desde el comienzo a partir de Jesús y sus discípulos
conjuntamente. Se trata de una novedad importante en la técnica de composición
de Mateo.
En consonancia con esta novedad, la forma
literaria es coloquial desde el comienzo. La conversación gira en torno a la
persona de Jesús (¿quién es Jesús?). El tema es también una novedad en lo que
llevamos de evangelio.
La conversación adquiere su momento
culminante en el diálogo entre Pedro y Jesús. En lo que llevamos de obra es la
segunda vez que Pedro aparece como personaje activo. La primera fue hace dos
domingos (Mt. 14, 22-33). En aquella ocasión la actuación de Pedro fue
negativa. Mateo lo resaltaba no haciéndole partícipe del reconocimiento que el
resto de discípulos hizo de Jesús (cfr. Mt. 14, 32-33). Es en esta segunda
actuación cuando Pedro hace el reconocimiento que entonces no hizo. Este
reconocimiento le vale la felicitación de Jesús y el reconocimiento a la
recíproca por parte de Jesús: Tú has dicho de mí que soy el Mesías; yo digo de
ti que eres la Piedra.
Sentido del texto. La novedad en la técnica
de composición pone de relieve al nuevo Pueblo de Dios al margen del viejo. A
partir de ahora, el autor quiere dedicar su atención a esbozar un modelo
positivo de Pueblo de Dios. Hasta ahora ha desarrollado más bien un modelo
negativo: el del viejo Pueblo. Y lo ha hecho con una finalidad
didáctico-preventiva: el nuevo Pueblo no deberá reproducir ese modelo, pero
tiene el peligro de hacerlo. Con el texto de hoy Mateo comienza su tarea de
esbozar un modelo positivo de Pueblo. El Pueblo de Dios debe nutrirse de la
búsqueda y del encuentro con Jesús; del hallazgo fascinado y fascinador de su persona.
Búsqueda sosegada, contemplativa, hecha de
silencios activos, de aperturas disponibles, de docilidad dolorosa, de pasión
indeficiente. El encuentro tendrá lugar. Imprevistamente, imprevisiblemente,
cuando a lo mejor el esfuerzo de la carne y de la sangre menos lo podía
imaginar. ¡Tú eres el Hijo de Dios! En el momento tal vez en que veamos
horrorizados cómo, pese a todos nuestros esfuerzos, no sólo no nos hemos
aproximado al fin, sino que incluso parezca que nos hemos alejado de él, tal
vez en ese mismo instante experimentaremos la fuerza del Padre. ¡Tú eres el
Hijo de Dios! El Pueblo de Dios debe nutrirse de este encuentro, debe vivirse
desde él, pero no debe decirlo, no debe alardearlo (v. 20). Esto está bien para
el proselitismo, pero el Hijo de Dios no es vendible como un producto (cfr. Mt.
23, 15).
Este Pueblo así nutrido es la Iglesia de
Jesús. Y esta Iglesia tiene en Pedro su fuerza, su autoridad. La autoridad de
confesar quién es Jesús, y en cuanto tal confesor es refrendado por el mismo
Dios. Ciertamente Mateo nos presenta un Pedro incuestionable (cfr. exégesis de
hace dos domingos a propósito de Mt. 14, 22-33), pero ciertamente presenta un
Pedro imprescindible.
DABAR 1981, 46
5.- Saliendo de Betsaida (Mc 8, 22) y
remontando el valle del Jordán, Jesús se retira con los "doce" a la
región de Cesárea de Felipe, al pie del monte Hermón. El Maestro quiere
disponer de tiempo y de un lugar tranquilo para iniciar a sus discípulos en el
misterio de su persona. Para introducir el tema, Jesús comienza preguntando qué
han oído ellos sobre su persona y su misión, de la gente.
Y cada uno de los discípulos dice lo que ha
oído al respecto. Según sus respuestas, hay que pensar que la gente se había
formado un concepto ciertamente elevado de Jesús: pero no había reconocido en
su persona al Mesías prometido, al parecer porque no veía nadie que su
comportamiento se ajustase a los prejuicios mesiánicos populares.
Jesús no hace ningún comentario y no valora
la encuesta sobre la opinión de la gente; pues lo que realmente le importa en
estos momentos es conocer hasta dónde le han comprendido sus discípulos y qué
piensan éstos de él.
Todos han respondido a la primera pregunta
según lo que han oído a la gente; pero a la segunda responde únicamente Pedro
según lo que ha sido revelado por el Padre. Nadie puede penetrar en el misterio
de la persona de Jesús sin la ayuda del Padre (cf. 25ss). Algunos comentarios
ponen en duda que la confesión de Pedro sobre la divinidad de Jesús fuera ya
tan explícita en esta ocasión.
Adviértase que Mateo sigue ordinariamente el
esquema del evangelio según Marcos, y que éste en el lugar paralelo no menciona
las palabras "Hijo de Dios vivo". Tampoco las menciona Lucas (9, 20;
cfr. Mc 8, 29). Es muy posible que Mateo anticipe aquí lo que sólo sería un
hecho después de la experiencia pascual de la resurrección: la fe en la
divinidad de Jesús y el reconocimiento de que él es el Señor.
Que el conocimiento que Pedro tenía de Jesús
no superara con mucho a la opinión de la gente en aquella ocasión, parece
probable si tenemos en cuenta su comportamiento en la escena inmediata (vv.
21-23). Pedro confesaría entonces que Jesús era el Mesías; pero la idea que
tenía del Mesías estaba sin duda viciada con todos los prejuicios de sus
paisanos galileos.
La solemne bienaventuranza que pronuncia
Jesús en favor de Pedro enlaza con la confesión de éste de que Jesús es
"el Hijo de Dios vivo". Estas palabras de Jesús y la promesa del
primado que hace seguidamente, se encuentran, por otra parte, sólo en el texto
de Mateo. Por esta razón parece que deben situarse igualmente en un momento
posterior a la Resurrección. En general, Mateo se interesa más por una
ordenación temática que cronológica.
D/ROCA: Jesús conoce la misión que va a
encomendarle a Simón; por eso le da también el nombre apropiado. Se llamará
Pedro, es decir, "roca". En el A.T se llama "roca" a Yavé,
también a Abrahán (Is 51, 1ss). Yavé es roca por su fidelidad, porque no le
falla al creyente que funda en él su vida. Abrahán y Pedro sólo pueden ser roca
por su fe y por su confianza en Dios.
Jesús elige a Pedro como fundamento de su
iglesia. Jesús quiere construir algo nuevo desde el fundamento; su iglesia no
es un apaño del viejo Israel. Y esta iglesia que Jesús edifica es suya, no de
Pedro y de sus sucesores.
Las "puertas del infierno" o
"poder del infierno" son, para los judíos, el poder de la muerte, que
retiene sin vida a los difuntos. Es el poder de la destrucción. Jesús promete
que su iglesia sobrevivirá, no obstante, las fuerzas de la destrucción y de la
muerte. Poseer "las llaves" en sentido bíblico significa tener
autoridad suprema en la casa, en este caso, dentro de la Iglesia. "Atar y
desatar" se refiere a la potestad de interpretar auténticamente una ley o
una doctrina; pero, sobre todo, a la de expulsar y admitir en la comunidad
eclesial. Todo ese poder debe ejercerse con un espíritu de servicio, sin
olvidar que la iglesia es de Cristo, y que el fundamento de cualquier
fundamento es, en definitiva, el Señor.
EUCARISTÍA 1987, 41
6.- Lo que la gente opina de Jesús
Y yo, ¿qué es lo que digo de Jesús? La
pregunta sobre Cristo es la más actual, la más importante. Los contemporáneos
de Jesús no llegaban a abarcar totalmente su misterio y habitualmente se
equivocaban sobre su profunda identidad.
Para llegar a ese descubrimiento de toda la
hondura de su ser-región inaccesible a nuestras investigaciones humanas. Se
precisa una lenta, frecuente y perseverante relación. Una persona enamorada no
descubre en un solo día todas las cualidades de la persona amable.
¿Cuánto tiempo paso cada día con Cristo?
"Nadie puede decir Jesús es Señor sino
en el Espíritu Santo".
7.FE/DON
¿Quién es éste a quien obedecen el viento y
el mar? ¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre? Jesús pregunta qué
opinión tienen los hombres de él. El interrogante que Jesús abre en esta
ocasión sigue abierto para todos los hombres de todos los tiempos. ¿Y vosotros,
quién decís que soy yo? La respuesta solamente puede darse desde dos puntos de
vista.
El punto de vista de los hombres, la apreciación
humana sobre este personaje de la Historia, y el punto de vista de Dios, el de
la revelación y el conocimiento sobrenatural. Pedro personifica la confesión
cristiana de la fe; el Mesías, el Hijo de Dios.
Pero esta confesión cristiana "no procede
de la carne ni de la sangre", es decir, no es posible llegar a través de
la lógica y de la razón humana, Se hace posible únicamente gracias a la
revelación del Padre. Sí, la fe viene de fuera. El hombre, por muy inteligente
que sea, es radicalmente incapaz de acceder a lo que es dominio misterioso de
Dios.
"Mi Padre te lo ha revelado." Mi
Padre: esa relación fundamental de Jesús con ese otro a quien llama Padre, esa
unión esencial con el Padre: "mi Padre y Yo somos uno", y al mismo
tiempo esa distinción. Nos deja entrever el abismo infinito de su persona.
PROPUESTA DE CANTOS DOMINGO XXI CICLO A
TEMA: TU ERES PEDRO Y TE DARE LA LLAVE
DEL REINO DE LOS CIELOS
01.- JUNTOS COMO HERMANOS
JUNTOS COMO
HERMANOS,
MIEMBROS DE UNA
IGLESIA,
VAMOS CAMINANDO
AL ENCUENTRO DEL
SEÑOR.
Un largo
caminar,
por el desierto
bajo el sol,
no podemos
avanzar
sin la ayuda del
Señor.
Unidos al rezar,
unidos en una
canción,
viviremos
nuestra fe
con la ayuda del
Señor.
La Iglesia en
marcha está,
a un mundo nuevo
vamos ya,
donde reinará el
amor,
donde reinará la
paz.
02.- A LA MESA DEL SEÑOR (Alberto Taule)
1. A la mesa del
Señor,
miembros vivos
de la Iglesia;
no dejamos de
cantar,
al Pastor que
nos sustenta.
2. Nos reúne en
torno a Él,
vencedor,
resucitado;
y nos habla al
corazón,
conduciendo
nuestros pasos.
3. Nos sentamos
a comer,
este cuerpo
maltratado;
nos llenamos de
su amor,
y de amor a los
hermanos.
03.- EN LA FIESTA DEL DOMINGO (Erdozaín)
EN LA FIESTA DEL
DOMINGO,
EL SEÑOR NOS
ESPERA;
REUNIDOS EN SU
MESA,
ESCUCHAMOS SU
VOZ.
SU PALABRA ES
ALIMENTO,
ES LA BUENA
NOTICIA;
COMO PRENDA DE
VIDA,
ÉL SE DA EN
COMUNIÓN.
1. Un altar, un
manjar,
una Iglesia, una
Iglesia;
una ofrenda,
sacrificio pascual,
con nosotros
está, revestido de pan.
2. El Señor,
buen Pastor,
Él nos guía, Él
nos guía;
nos perdona, nos
orienta su voz,
el Señor, buen
Pastor, Él se da en comunión.
04.- JUNTOS CANTANDO LA ALEGRIA (Cesáreo
Garabaín)
JUNTOS CANTANDO
LA ALEGRÍA
DE VERNOS UNIDOS
EN LA FE Y EL AMOR.
JUNTOS SINTIENDO
EN NUESTRAS VIDAS
LA ALEGRE
PRESENCIA DEL SEÑOR.
Somos la Iglesia
peregrina que Él fundó,
somos un pueblo
que camina sin cesar,
entre cansancios
y esperanzas, hacia Dios,
nuestro amigo,
Jesús, nos llevará.
Hay una fe que
nos alumbra con su luz,
una esperanza
que empapó nuestro esperar,
aunque la noche
nos envuelva en su inquietud,
nuestro amigo,
Jesús, nos guiará.
Es el Señor, nos
acompaña al caminar,
con su ternura a
nuestro lado siempre va,
si los peligros
nos acechan por doquier,
nuestro amigo,
Jesús, nos salvará.
05.- JUNTO AL VINO Y EL PAN (Toño Casado)
JUNTO AL VINO Y
AL PAN,
YO TE TRAIGO MI
VOZ,
VIDA EN UNA
CANCIÓN,
PARA TI SERÁN.
TRAIGO RISA Y
DOLOR,
TRAIGO EL MUNDO
SIN LUZ,
DE LOS HOMBRES
LA SED,
PARA QUE LA
CALMES TÚ.
El agua de la
risa de los niños,
el viento de las
madres al cantar.
Hoy para Ti
serán, Oh Señor.
El fuego de la fuerza
de los hombres,
la tierra de su
débil corazón.
Hoy para Ti
serán, Oh Señor.
06.- TE PRESENTAMOS EL VINO Y EL PAN
(J.A. Espinoza)
TE PRESENTAMOS
EL VINO Y EL PAN,
BENDITO SEAS POR
SIEMPRE SEÑOR.
Bendito seas,
Señor,
por este pan que
nos diste,
fruto de la
tierra
y del trabajo de
los hombres.
Bendito seas,
Señor,
el vino Tú nos
lo diste,
fruto de la
tierra
y del trabajo de
los hombres.
07.- SEÑOR A QUIEN IREMOS (Alejandro
Mejías)
SEÑOR A QUIEN
IREMOS
TÚ TIENES
PALABRAS DE VIDA
NOSOTROS HEMOS
CREÍDO
QUE TÚ ERES EL
HIJO DE DIOS.
Soy el pan que
os da la vida eterna,
el que viene a
mí no tendrá hambre,
el que viene a
mí no tendrá sed
así ha hablado
Jesús.
El que viene al
banquete de mi cuerpo,
en mí vive y yo
vivo en él;
brotará en él la
vida eterna,
y yo lo
resucitaré.
08.- CREO EN JESUS (Carmelo Erdozaín)
CREO EN JESÚS,
CREO EN JESÚS,
ÉL ES MI AMIGO,
ES MI ALEGRÍA,
ÉL ES MI AMOR.
CREO EN JESÚS,
CREO EN JESÚS,
ÉL ES MI
SALVADOR.
1. Él llamó a mi
puerta
me invitó a
compartir su heredad
seguiré a su lado
llevaré su
mensaje de paz.
2. Ayudó al
enfermo
y le trajo la
felicidad
defendió al
humilde
combatió la
mentira y el mal.
3. Día y noche,
creo en Jesús
Él está a mi
lado, creo en Jesús
sigo sus
palabras, creo en Jesús
doy por Él la
vida, creo en Jesús
es mi Salvador.
4. Enseñó a
Zaqueo
a partir su
hacienda y su pan
alabó a la viuda
porque dio
cuanto pudo ella dar.
5. Aleluya, creo
en Jesús
Él es el Mesías,
creo en Jesús
Él es mi
esperanza, creo en Jesús
vive para
siempre, creo en Jesús
es mi Salvador.
09.- ERES TÚ, JESÚS (T. Rubí)
ERES TU JESÚS,
ERES TÚ.
ERES TÚ EN UN
TROZO DE PAN,
Y EN UN POCO DE
VINO.
1.- Que alegría
encontrarte Jesús En Tu vino y Tu pan
Oh Señor que
consuelo saber, que me amas.
Eres Tú la
palabra de Dios, la eterna palabra de Dios
Y has querido
venir a morar, en mi pecho.
2.- Eres Tu oh
principio y Fin Manantial de la vida.
Eres Tu Luz de
Luz Dios de Dios, Verdadero.
Eres Tu oh
milagro de amor, Oh eterno milagro de amor.
Eres Tu mi Señor
y mi Dios, Mi Alimento.
10.- ENVIADOS (Antonio Alcalde)
LO QUE HEMOS
VISTO Y OÍDO,
LO VIVIDO ANTE
EL ALTAR,
A TODOS NUESTROS
HERMANOS
LO TENEMOS QUE
LLEVAR.
LO QUE HEMOS
VISTO Y OÍDO,
LO VIVIDO ANTE
EL ALTAR.
Es Cristo quien
no envía:
testigos de la
verdad,
profetas y
misioneros,
constructores de
la paz.
Peregrinos sin
fronteras
de una patria
universal,
esperamos la
venida
del Señor que
volverá.
Caminamos por el
mundo
con la fuerza
que él nos da,
el señor
glorificado,
la noche
iluminará.
11.- CAMINANDO JUNTOS (E. de Zayas)
1.- Caminando
juntos vamos a salir
y nos despedimos
con un breve adiós.
ADIÓS QUIERE
DECIR: «VAYA USTED CON DIOS».
MI CORAZÓN SE
ALEGRA: CONTIGO VOY, SEÑOR.
2- Vamos siempre
a oscuras si nos falta el sol;
vamos siempre
solos si nos falta Dios.
3.- Dios es buen
amigo para caminar;
si Él viene
conmigo, qué seguro andar.
4.- No camino
solo porque voy con Dios;
y saludo a todos
con un gran Adiós.
12.- HIMNO A SANTA ROSA DE LIMA
GLORIA A TI ROSA
BENDITA
DEL PERU
RADIANTE ESTRELLA
FLOR DE LOS
CIELOS MAS BELLA
QUE LA FLOR DE JERICO
(bis)
Hollando con fe
profunda
los placeres de
este suelo,
desde joven en
el cielo
tu corazón se
fijó (bis)
Al suyo con lazo
fuerte
Júntale su dulce
esposo
y de su amor
generoso
suavemente le
inflamo (bis)
Virgen te
aclaman los cielos;
virgen pura, el
nuevo mundo;
ángel de Dios
sin segundo,
el Perú te crio
(bis)
En vano, límpido
espejo,
Satanás quiso
empañarte
nunca pudo
derribarte,
porque en Dios
tu alma se fió (bis)
13.- SI VIENES UN POBRE Y TE TIENDE LA
MANO
(Di Mario y P. Tombolato)
Si viene un
pobre y te tiende la mano,
piensa que hay
alguien más pobre que tú,
ponte a su lado,
dale la mano, amigo mío
porque hay un
Dios.
Y si en tu mesa
el pan escasea,
piensa que
alguno no tiene ni pan,
ponte a su lado,
dale la mano, amigo mío
porque hay un Dios.
ASÍ ES LA VIDA,
AMIGO, CRÉEME,
QUE LO
IMPORTANTE ES VIVIR
PARA EL AMOR.
(BIS)
Y aunque ese
pobre que ves en la esquina
esté muy triste
te hace compañía,
ponte a su lado,
dale la mano, amigo mío
porque hay un
Dios.
Si viene un
pobre y te tiende la mano
piensa que acaso
pudiera ser Dios.
Ponte a su lado,
dale la mano, amigo mío
porque hay un
Dios.