¿ERES TÚ MI HERMANO?
COMENTARIO
Jesús dirige la palabra a los discípulos y
al pueblo para denunciar la conducta de escribas y fariseos y prevenirlos de su
mala influencia. San Mateo, inmediatamente después del presente relato, recoge
la acusación que pronuncia Jesús directamente contra los escribas y fariseos
(vv. 13-36).
Los escribas y fariseos no se sentaron en
la cátedra de Moisés por iniciativa propia sino llevados de su ambición. Pues ellos
eran aceptados por Israel como maestros legítimos de la Ley, encargados de
estudiarla y explicarla al pueblo. Por eso Jesús reconoce su magisterio y
ordena al pueblo que cumpla con lo que ellos dicen. Claro, no todo lo que ellos
dicen, ya que muchas cosas las dicen por su cuenta y no tienen que ver nada con
la letra y el espíritu de la Ley de Dios. Los escribas y fariseos habían creado
una avalancha legislativa en torno a la Ley para regularla hasta los más
mínimos detalles. Esto constituía una carga insoportable que ni ellos mismos
cumplían. Jesús denuncia la hipocresía de estos "maestros" que no
ayudan en absoluto a llevar la carga que imponen a los demás indebidamente, y
contrapone a esa carga innecesaria el "yugo suave y la carga ligera"
del Evangelio (11. 30).
La vanidad y el orgullo desmedido, el afán
de aumentar su prestigio ante el pueblo, era el motivo de una serie de
prácticas exteriores de estos escribas y fariseos. Acostumbraban a llevar sobre
la frente y en el brazo izquierdo unos pergaminos enrollados y guardados en
unas bolsas de cuero sujeto por medio de unas cintas y en los que estaban
escritas palabras del Éxodo (13. 1-10.11-16) y del Deuteronomio (6. 4-9; 11.
13-12). Colgaban del bord e de su manto
unas orlas que debían recordarles todos los preceptos de la Ley (cfr. Nm 13.
39). Se hacían llamar "rabí", es decir, "maestro mío"; un
título que llegó a conferirse solemnemente. También se hacían llamar
"padre" y "preceptores".
Jesús critica todo ese interés en
encumbrarse sobre los demás, pues uno es nuestro Padre y, todos, nuestros
hermanos. La crítica de Jesús a letrados y fariseos alcanza literalmente a
cualquier nivel social de nuestros días, cuyo deseo de prestigio y poder,
presenta siempre los mismos síntomas. Doctor, Señor
alcalde, Señor presidente, mi general... títulos y filacterias que siempre
estarán en la vanidad de todo ser humano...
R.P. Roland Vicente Castro
Juárez
ANTIFONA DE ENTRADA Sal 37, 22-23
No me abandones,
Señor; Dios mío, no te quede lejos; ven aprisa a socorrerme, Señor mío, mi
salvación.
ORACION
COLECTA
Dios de poder y misericordia, de quien procede el que tus fieles te
sirvan digna y meritoriamente, concédenos avanzar sin obstáculos hacia los
bienes que nos prometes. Por nuestro Señor Jesucristo.
PRIMERA LECTURA
Lectura de la profecía de Malaquías 1, 14b—2, 2b.8-10.
«Yo soy el Gran Rey, y mi nombre es respetado
en las naciones -dice el Señor todopoderoso. Y ahora, a ustedes, sacerdotes, se
dirige esta advertencia. Si no obedecen y no se proponen dar gloria a mi
nombre-dice el Señor todopoderoso-, les enviaré mi maldición. Ustedes se han
apartado del camino, han hecho tropezar a muchos en la ley, han invalidado mi
alianza con Leví -dice el Señor todopoderoso-. Pues yo los haré despreciables y
viles ante el pueblo, por no haber guardado mis caminos, y porque se fijan en
las personas al aplicar la ley, ¿No tenemos todos un solo Padre?.
¿No nos creó el mismo Señor?. ¿Por qué pues, el hombre despoja a su prójimo,
profanando la alianza de nuestros padres?”.
SALMO
RESPONSORIAL (Sal 130)
Guarda mi alma en
la paz, junto a ti, Señor.
Señor, Mi corazón no es
ambicioso, ni mis ojos altaneros; no pretendo grandezas que superen mi
capacidad. R.
Sino me acallo y modero
mis deseos, como un niño en brazos de su madre; como un niño saciado así está
mi alma dentro de mí. R.
Espere Israel en el Señor
ahora y por siempre. R.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la primera carta del apóstol San Pablo a
los Tesalonicenses 2, 7b-9.13.
Hermanos: Cuando estuvimos entre
ustedes los tratamos con la misma ternura con la que una madre acaricia a sus
hijos. Les teníamos tanto cariño que deseábamos entregarles no solo el
Evangelio de Dios, sino nuestras propias vidas, y ¡a tal punto llegaba nuestro
amor por ustedes! Recuerden, hermanos, nuestros esfuerzos y fatigas; trabajando
día y noche para no ser una carga para nadie, proclamamos entre ustedes el
Evangelio de Dios. Esa es la razón por la que no cesamos de dar gracias a Dios,
porque al recibir la Palabra de Dios, que les predicamos, la acogieron no como
palabra de hombre, sino, como lo que es en realidad, como Palabra de Dios, que
sigue actuando en ustedes los creyentes.
ACLAMACION ANTES DEL EVANGELIO Mt 23,
9b.10b.
Aleluya. Uno solo es su Padre, el del cielo
y uno solo es su consejero, Cristo. Aleluya.
EVANGELIO
Lectura del santo
evangelio según San Mateo 23, 1-12
En aquel tiempo, Jesús habló a la gente y a sus
discípulos, diciendo: «En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y
los fariseos. Hagan y cumplan lo que les digan; pero no hagan lo que ellos
hacen, porque ellos no hacen lo que dicen. Ellos hacen fardos pesados e
insoportables y se los cargan a la gente en los hombros, pero ellos no están
dispuestos ni siquiera a moverlos con un dedo. Todo lo que hacen es para que
los vea la gente: alargan las filacterias y ensanchan las franjas del manto; les
gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las
sinagogas; que les hagan reverencia por la calle y que la gente los llame
maestros. Ustedes, en cambio, no se dejen llamar "maestro", porque
uno solo es su Maestro, y todos ustedes son hermanos. En la tierra a nadie
llamen "padre", porque uno solo es el Padre de ustedes, el del cielo.
No se dejen llamar "consejeros", porque uno solo es su Consejero,
Cristo. El primero entre ustedes sea servidor de los demás. El que se engrandece
será humillado, y el que se humilla será engrandecido.
PLEGARIA
UNIVERSAL
Solo Dios es
nuestro Padre, y solo El puede darnos cuanto le pedimos con fe. Por esto,
digamos juntos: R.- Padre, escúchanos.
1.- Para que caminemos en la presencia del
señor amándonos como hermanos. Oremos.
R.
2.-
Para que los sacerdotes vivan con fe y alegría la vocación recibida de
Dios y reflejen en su vida las actitudes de Jesús. Oremos. R.
3.- Para que, viviendo en fraternidad,
promovamos la civilización del amor y que la justicia y la paz sean una
realidad en el mundo. Oremos. R.
4.-
Para que los cristianos seamos generosos en compartir lo que tenemos y
sabemos. Oremos. R.
5.- Para que nuestra entrega a Jesucristo, y
a su Evangelio sea incondicional. Oremos.
R.
Escucha, Padre, la
oración de tus hijos; enséñanos a vivir5 con humildad, y guarda nuestras vidas
en tu paz. Por Jesucristo nuestro Señor.
ORACION SOBRE LAS OFRENDAS
Que este sacrificio, Señor, sea para ti, una ofrenda pura y para nosotros,
una efusión santa de tu misericordia. Por Jesucristo nuestro Señor.
ANTIFONA DE COMUNION Sal 15, 11
Me enseñaras el sendero de
la vida, me saciaras de gozo en tu presencia, Señor.
ORACION DESPUES DE LA COMUNION
Te pedimos, Señor, que aumente
en nosotros la acción de tu poder, para que, alimentados con estos sacramentos
del cielo, nos preparemos, por tu gracia, a recibir tus promesas. Por
Jesucristo nuestro Señor.
PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA
DÍA
Lunes 06: Rm 11, 29-36; al
68; Lc 14, 12-14.
Martes 07: Rm 12, 5-16a; Sal
130; Lc 14, 15-24.
Miércoles 08: Rm 13, 8-10; Sal
111; Lc 14, 25-33
Jueves 09: Ez 47, 1-2. 8-9.
12 (o bien: 1Co 3, 9c.11.16-17); Sal 45; Jn 2, 13-22.
Viernes 10: Rm 15, 14-21; Sal
97; Lc 16, 1-8.
Sábado 11: Rm 16, 3-9.
16.22-27; Sal 144; Lc 16, 9-15.
Domingo 12: Sb 6, 12-16; Sal
62; 1Ts 4, 13-17; Mt 25, 1-13.
COMENTARIOS AL EVANGELIO
Mt 23. 1-12
Par: Mc 12, 38-40 Lc 20, 45-47
5.- J/FARISEOS
Hace notar un comentarista que "este
capítulo vio la luz en una Iglesia todavía en discusión cerrada con los jefes
del Judaísmo"; en una Iglesia de judeo-cristianos que pensaban todavía
poder seguir la enseñanza de los escribas y la de los catequetas cristianos...
Mateo, y este capítulo en particular, nos trae el eco de una discusión a punto
de terminar en una ruptura definitiva entre el cristianismo naciente y el
Judaísmo. Mateo, sin embargo, sigue concediendo que los fariseos y los escribas
están sentados en la cátedra de Moisés y que su enseñanza hace autoridad (v.
23); lo que se les reprocha no es su doctrina, sino su hipocresía. La
puntualización es justa, por más que parezca ligeramente optimista. Cuando
Mateo pone la mano por última vez en su obra, la ruptura definitiva parece
consumada.
El tono del evangelista, el contenido de las
reflexiones que propone, provienen de la actitud de los fariseos para con los
cristianos. Atribuyendo esta dureza a Jesús, poniendo en sus labios condenas
que son una réplica a ataques desconocidos en su época y conocidos sólo en
tiempos del evangelista, el autor crea un anacronismo, consecuencia de la
libertad de que dan pruebas los evangelistas al transcribir el mensaje de
Jesús. Pero el procedimiento, por infiel que sea a la historia, tiene un sentido:
pone en claro la enseñanza de Jesús en lo relativo a ciertos comportamientos
religiosos. Ilustrados en una determinada época por miembros del partido
fariseo, tales procedimientos podrían serlo, en otra época -la nuestra- por
otras gentes, por nosotros mismos quizá.
El anacronismo de Mateo es seguro.
(Minoritarios y marginales en la sociedad palestina de aquel momento (el de
Jesús), los fariseos, que no tomarán parte en el complot de los sumos
sacerdotes contra Jesús, apenas son los oponentes habituales de este último
como lo serán, después del 70, de las Iglesias judeo-cristianas, debido a la
ortodoxia rabínica desde entonces en curso de instauración).
El conjunto de los evangelios no comparte la
severidad del Jesús mateano para con los fariseos. Lucas es sin duda más fiel a
la historia cuando presenta a Jesús recibido para comer en casa de Simón el
Fariseo, con más cortesía tal vez que verdadera amistad (7, 36-50); recibido,
asimismo, en casa de otro fariseo anónimo (11, 31) y todavía en casa de otro
más (14,1); o también cuando recuerda a estos fariseos interesados en la
enseñanza de Jesús (5, 17; 17, 20) y previniéndole de las maquinaciones de
Herodes contra El (13, 21). Lo cual no evita las mofas de algunos con respecto
al Maestro (16, 14), ni el enfado que suscita en ellos el comportamiento de
Jesús (19, 39), ni la oposición que organiza aprisa contra EL un buen número de
entre ellos (5, 21.30.33; 6, 2).
Jesús debió de fustigar sus interpretaciones
de la Ley. Llenas de generosidad, de piedad profunda, estas interpretaciones se
volvían torpemente rigoristas, inhumanas, más atentas a la letra que al sentido
profundo, hasta el punto de conceder más importancia a la tradición de los
comentaristas que al contenido obvio de la palabra de Dios. Además, Jesús debió
de condenar la pretensión que en ellos hacía nacer la certeza de ser los únicos
capaces de introducir en el conocimiento y en la práctica de la Ley. Hablan, a
juzgar por el cuarto evangelista, de "ese populacho que no conoce la
Ley" (7, 49).
A su vez, tras Jesús y siguiendo su propia
ruta, Mateo levanta un acta de acusación contra los fariseos, basada en hechos
contemporáneos, pero que desarrolla el fondo de las críticas que ya Jesús había
formulado.
Mateo les reprocha su "decir y no
hacer" (v. 3); el obligar a los demás dispensándose a sí mismos (v. 4);
actuar para "hacerse notar" (v. 5). Critica en ellos el gusto por los
primeros puestos y por los títulos -"Se crecen"-; la falsedad de su
enseñanza (v. 13); el espíritu de lucro y ostentación (v. 14); la ignorancia de
los verdaderos caminos que llevan a Dios (v. 15); la hipocresía de una
casuística formalista que desprecia el sentido auténtico de las cosas (vv.
16-22) e ignora lo esencial (v. 23): "la justicia, la misericordia, la
lealtad". Mateo les reprocha también el dar importancia a lo exterior en
detrimento de lo interior (v. 25 s); al aparecer, en detrimento de la realidad
(v. 27 s). Los fariseos condenan a los antepasados pero hacen mayor mal que
ellos (vv. 29-32). Persiguen, en fin, a los cristianos (v. 33 s), llevando así
hasta el colmo un comportamiento que le valdrá a "esta generación"
(v. 36) diversas pruebas a través de las que se experimentará el juicio de Dios
(vv. 35-39). (...). ¿Qué dicen, pues, a la Iglesia de hoy, a nosotros mismos,
las palabras de fuego lanzadas por Mateo contra "escribas y
fariseos"? Son una advertencia dirigida a todos los que ejercen una
responsabilidad en la Iglesia. El peligro de "decir y no hacer", de
abrumar a los demás con pesos con los que no cargan, la tendencia a obrar para
ser vistos, admirados, felicitados, cumplimentados; la incompetencia, el
formalismo, etc., son tentaciones permanentes, tanto más sutiles y peligrosas
cuanto mayor es la confianza que la comunidad les concede.
Pero es fácil señalar que las desviaciones
criticadas por Mateo no son en la Iglesia objeto de ningún monopolio. Todos los
discípulos de Jesús, por el solo hecho de su profesión de fe, ocupan en el
mundo un puesto que los expone a las mismas tentaciones. También ellos pueden "decir
y no hacer", juzgar con orgullosa y falsa severidad, encontrar en su fe el
motivo de una ingenua vangloria, contentarse con un formalismo fácil, etc. Todo
creyente puede ser esos fariseos. Se mantiene en pie que las acusaciones de
Mateo atañen sobre todo a aquellos que, por sus responsabilidades, destacan en
el seno de la comunidad.
LOUIS MONLOUBOU - LEER Y PREDICAR EL
EVANGELIO DE MATEO - EDIT. SAL TERRAE SANTANDER 1981.Pág 272
2.- -Texto. Tras cinco domingos consecutivos
de confrontación con las dos principales corrientes religiosas judías, Mateo
nos presenta hoy a Jesús atacando frontalmente a la más arraigada y popular de
esas corrientes, la farisea. Para ello ha convocado al auditorio más amplio
posible: a la muchedumbre y a los discípulos. Quiere resaltar así la
importancia del ataque.
Este comienza con la constatación de una
situación: la ocupación de la cátedra-de-Moisés por letrados y fariseos. La
cátedra de Moisés no es ninguna expresión figurada, sino el nombre del mueble
desde donde se explicaba la escritura en la sinagoga. La cátedra de Moisés es
el lugar autorizado y autoritativo de información y de formación. El ataque es
muy simple: desfase entre enseñanza y actuación. Haced lo que os digan, pero no
hagáis lo que ellos hacen.
Tres situaciones ponen de manifiesto ese
desfase: no hacer lo que se dice; imponer cargas sin ayudar a llevarlas; actuar
para la galería. Esta tercera situación es, a su vez, explicada con unos
ejemplos, cuatro en concreto: uso ostentoso de filacterias y flecos; presencia
en lugares preferentes; afán de notoriedad; "titulitis".
Las filacterias eran trozo de piel o
pergamino con textos de la Escritura, que se colocaban en la frente y en los
brazos durante la oración. En la actualidad son una especie de chales de los
que cuelgan unas tiras con textos escritos. Los flecos o franjas del manto se
remontan a Núm. 15, 38-41 e iban cosidos con hilo violeta. Su finalidad era la
de servir de recordatorio de los mandamientos del Señor.
El cuarto de los ejemplos, al que he denominado
"titulitis", da pie a Mateo para desarrollar por contraposición el
talante que debe reinar en el interior de la comunidad cristiana: fraternidad,
servicio a los demás y sencillez.
-Comentario. En la dinámica que Mateo ha
imprimido a su evangelio el texto de hoy se veía venir. Pero una vez más
debemos guardarnos de ver en él una finalidad exclusivamente de reproducción de
un conflicto de Jesús con sus contemporáneos religiosos. Los conflictos de
Jesús están reproducidos primordialmente por su valor de ejemplaridad para el
futuro. Las situaciones y casos denunciados son situaciones y casos de hoy,
dentro de los ambientes religiosos, y en particular, los ambientes doctos, pues
a éstos es a los que el texto ataca.
También hoy, por ejemplo, existe un gusto especial,
aunque inconfesado, en ser llamado "doctor". De labios de sabios
doctores eclesiásticos universitarios he escuchado personalmente el siguiente
consejo: "lo importante es entrar". ¡Alguno de estos sabios es en la
actualidad...! Es muy fácil ser como los letrados y fariseos contemporáneos de
Jesús. Lo es hasta tal punto que casi resulta inevitable. De ahí la dificultad
de llevar a la práctica el talante cristiano propugnado en la última parte del
texto.
Cada uno de los términos de la trilogía
cristiana propuesta aclara y depura el sentido del anterior. La fraternidad
sólo es tal en la medida en que sea servicio y entrega; el servicio a su vez,
sólo es auténtico en la medida en que se haga con espontánea sencillez. En la
coyuntura actual el magisterio verbal no tiene nada que decir si no parte de la
fraternidad del maestro a través de un arrimar el hombro con sencillez.
El texto de hoy remite inevitablemente a
/Mt/11/25-30. En contraste con los maestros, encontramos en él el tipo de
maestro y de guía que es Jesús. "Venid a mí todos los que estáis cansados
y agobiados. Cargad con mi yugo y aprended de mí, que soy sencillo y humilde.
Mi yugo es llevadero y mi carga ligera". A diferencia de los expertos,
Jesús es un guía que camina por delante con el yugo que impone. El experto
instrumentaliza el saber desde un estar situado; Jesús adopta una posición
vital, integradora de teoría y práctica.
A. BENITO - DABAR 1990/54
3.- El discípulo de Jesús -porque es
consciente de su debilidad y de la única y total soberanía de Dios y de su
enviado JC- ha de evitar las grandes tentaciones que el Maestro denuncia en los
fariseos: decir y no hacer; ser maestros insoportables de los demás, con
ostentación; buscar el ser servidos en lugar de servir.
MISA DOMINICAL 1990/06
4.- Este pasaje sirve de preámbulo a las
maldiciones de los escribas y de los fariseos (Mt 23, 12-32). Jesús presenta a
sus adversarios ya desde el primer versículo: ocupan indebidamente la cátedra
de Moisés, ya que la ley preveía que la enseñanza y la interpretación de la
Palabra de Dios sería reservada solo a los sacerdotes (Dt 17, 8-12); 31, 9-10;
Miq 3, 11: Mal 2, 7-10). Al usurpar esa función, los escribas han introducido
un profundo y grave cambio en la religión, han sustituido la fe en la Palabra por
un método intelectualista y la obediencia al designio de Dios por el
juridicismo y la casuística. Al maldecir a los escribas, Cristo rechaza una
religión tan humana.
Mateo es el único de los evangelistas que
recoge las palabras reproducidas en los vv. 8-10. Unido al texto anterior por
la palabra clave "Rabbi", este pasaje está redactado conforme al
ritmo ternario en el que se hace sucesivamente mención del "Maestro",
del "Padre" y del "Doctor" (o, mejor, del "Director").
No son tanto esos títulos lo que Cristo condena como la religión de exégesis y
de profesores que representan y afirma que no hay que acudir a profesores para
conocer a Dios.
Los dos primeros versículos no son originales
en este sitio (cf. Mt 20, 26). En este pasaje Cristo apunta a la hipocresía de
los escribas y de los jefes de la sinagoga. Esta actitud consiste esencialmente
en engañar a otro por medio de gestos religiosos o de prerrogativas sacrales
indebidas. El hipócrita, en este caso, se atribuye honores que le hacen pasar
por un representante de Dios (versículos 6-7), parece tributar un culto a Dios,
pero no trata más que de darse importancia a sí mismo (v. 5) y las prácticas
más religiosas son también despojadas de su significación ante el deseo
exagerado de hacerse notar (cf. Mt 6, 2, 5, 16). Finalmente, el hipócrita pone
su ciencia teológica al servicio de su egoísmo aprovechando su erudición
casuística para escoger entre los preceptos los que le convienen y cargando a
otro de mandamientos de los que se dispensa a sí mismo (v. 4; cf. Mt 23,
24-25).
El colmo es que los escribas hipócritas
usurpan el lugar de Dios atribuyéndose un poder que no merecen (vv. 8-10; cf.
Mt 15, 3-14). En lugar de conducir el corazón de cada cual al encuentro
personal con Dios, en el plano íntimo de la decisión y de la libertad, hacen
que toda la atención recaiga sobre los argumentos, las conclusiones y los
reglamentos demasiado humanos para que puedan ser signos de Dios.
La hipocresía denunciada por Jesús continúa
siendo una tentación a todo lo largo de la historia de la Iglesia.
Tentación sutil que se encuentra en los
sacerdotes con relación a los laicos, pero sobre todo en los bautizados con
relación a los demás hombres. El Evangelio de este día puede ayudarnos a
superarla.
I/RD: Lo importante es que la Iglesia no se tome nunca como la realidad
definitiva. La Iglesia es el anuncio de un Reino futuro, pero no es todavía
este Reino. Por tanto, no puede situarse en el centro de su predicación porque
a donde el mundo debe tender no es hacia ella, sino hacia el Reino. Con esta
condición, la Iglesia no cargará a sus fieles con pesos insoportables, sino que
estará en tensión hacia un futuro que hay que realizar. La Iglesia debe huir de
toda vanidad, y sus responsables evitarán recurrir a los medios con que los
hombres intentan espontáneamente llegar al poder: intrigas diplomáticas,
influencias políticas, títulos honoríficos, etc.
La Iglesia debe saber en todo momento que
está hecha para servir. Una Iglesia que olvida su propio pecado se hace
automáticamente dura de corazón, imbuida de su propia justicia, anunciadora de
infelicidad y de catástrofe; ya no merece ni la misericordia de Dios ni la
confianza de los hombres y pueden aplicársele al pie de la letra las
maldiciones dirigidas contra los escribas orgullosos. La Iglesia sabe, por el
contrario, que la frontera del bien y del mal pasa por el corazón de cada uno
de sus miembros, que su fe es crepuscular y que, de todas maneras, el perdón de
Dios es lo único que mantiene su existencia.
MAERTENS-FRISQUE
NUEVA GUIA DE LA ASAMBLEA CRISTIANA III - MAROVA MADRID 1969.Pág. 90s.
PROPUESTA DE CANTOS DOMINGO XXXI CICLO A
- (05 NOVIEMBRE 2023)
TEMA: “NO HACEN LO QUE DICEN”
01.- CAMINARE (Juan Antonio Espinoza)
CAMINARÉ EN PRESENCIA DEL SEÑOR,
CAMINARÉ EN PRESENCIA DEL SEÑOR.
1.- Amo al Señor porque escucha mi voz suplicante,
Porque inclina su oído hacia mí,
El día que lo invoco.
2.- Me envolvían en redes de la muerte,
Caí en tristeza y en angustia,
Invoqué el Nombre del Señor:
¡Señor, Salva Mi Vida!
3.- El Señor es benigno y justo,
nuestro Dios es compasivo,
el Señor guarda a los sencillos,
estando yo sin fuerzas me salvó.
4.- Alma mía, recobra tu calma,
que el Señor fue bueno contigo,
arrancó mi alma de la muerte,
mis ojos de las lágrimas,
mis pies de la caída.
02.- QUIEN PUEDE ENTRAR EN TU TEMPLO (Francisco Palazón)
¿QUIÉN PUEDE ENTRAR EN TU TEMPLO,
Y HABITAR EN TU CASA, SEÑOR? (BIS)
1. Quien procede honradamente
y practica la justicia,
¡Ese entrará en tu casa, Señor!
quien tiene intenciones leales
y no calumnia con su lengua.
¡Ese entrará en tu casa, Señor!
2. El que no hace mal a su prójimo
ni difama al vecino,
¡Ese entrará en tu casa, Señor!
quien no presta dinero a usura
ni acepta soborno contra el inocente.
¡Ese entrará en tu casa, Señor!
3. Sólo entrarán en tu Casa,
los que viven con amor. (Bis)
03.- INVOCO AL DIOS ALTISIMO (Luis Elizalde)
INVOCO AL DIOS ALTÍSIMO,
AL DIOS QUE HACE TANTO POR MÍ,
AL DIOS QUE HACE TANTO POR MÍ.
1.- Su brazo poderoso
me salva en el peligro;
su mano me acaricia,
me invita a descansar.
2.- Sus pies marcan la senda
por donde yo camino;
su báculo sostiene
mis pasos al andar.
3.- Su Reino es paz y gozo,
en Él somos racimo,
-Iglesia peregrina-,
y honesta libertad.
4.- Sus ojos iluminan
de noche en el abismo;
su boca alienta siempre
cuando la luz se va.
04.- GUSTAD Y VED (Francisco Palazón)
GUSTAD Y VED QUÉ BUENO ES EL SEÑOR,
DICHOSO EL QUE SE ACOGE A ÉL;
GUSTAD Y VED QUÉ BUENO ES EL SEÑOR,
DICHOSO EL QUE SE ACOGE A ÉL.
1. La Palabra del Señor es sincera
y todas sus acciones son leales;
Él ama la justicia y el derecho
y de su amor está llena la tierra.
2. El Señor es fiel a sus palabras,
bondadoso en todas sus acciones;
cerca está de aquellos que lo invocan
y lo invocan de todo corazón.
05.- BENDITO SEAS SEÑOR (Francisco Palazón)
BENDITO SEAS, SEÑOR,
POR ESTE PAN Y ESTE VINO
QUE GENEROSO NOS DISTE
PARA CAMINAR CONTIGO,
Y SERÁN PARA NOSOTROS
ALIMENTO EN EL CAMINO.
1. Te ofrecemos el trabajo,
las penas y la alegría,
el pan que nos alimenta
y el afán de cada día.
2. Te ofrecemos nuestro barro
que oscurece nuestras vidas
y el vino que no empleamos
para curar las heridas.
06.- ACEPTA SEÑOR EL VINO Y EL PAN (J. Madurga)
ACEPTA SEÑOR EL VINO Y EL PAN
CON ELLOS TRAEMOS TU OFRENDA A TU ALTAR
1.- Sobre tu altar Señor va nuestra ofrenda
el abrazo sincero al hermano
perdonándonos nuestras ofensas.
2.- Sobre el Altar, Señor, va nuestra ofrenda:
trabajar por un mundo más justo de igualdad
y concordia fraterna.
3.- Sobre el Altar, Señor, va nuestra ofrenda:
convertir nuestra vida pasada
al mensaje de tu Buena Nueva
07.- JESUS ESTOY AQUI
Jesús, estoy aquí.
Jesús, ¿qué esperas de mí?
mis manos están vacías
¿qué puedo ofrecerte?
Solo sé que quiero
ser diferente.
Jesús, estoy aquí.
Jesús, ¿qué esperas de mí?
mis ojos temen al mirarte,
quisiera poder enfrentarte.
AMAR COMO TÚ AMAS,
SENTIR COMO TÚ SIENTES,
MIRAR A TRAVÉS DE TUS OJOS
JESÚS...
Contigo mi camino es difícil,
me exiges abrir un nuevo horizonte
en la soledad de mi noche. Jesús...
No, no puedo abandonarte,
Jesús, en mí penetraste,
me habitaste, triunfaste,
y hoy vives en mí.
AMAR COMO TÚ AMAS...
08.- DEFENSOR DE LA VERDAD –
CRISTO FUE SINCERO (Carmelo Erdozaín)
SOL
RE mi
CRISTO FUE SINCERO
RE SOL
CRISTO FUE LEAL
RE mi
SUPO SER VALIENTE
MI6 RE mi
DIJO LA VERDAD.
mi
1. ¡Ay de vosotros hipócritas!
RE mi
que vivís de la mentira;
SOL
todas las obras que hacéis
son engaño y falsedad;
RE RE6 mi
que compráis y manejáis
SI6 SI7 mi
la verdad.
2. ¡Ay de vosotros hipócritas!
que os fijáis en pequeñeces,
pero olvidáis lo importante:
la justicia y la honradez,
os calláis sin proclamar
la verdad.
3. ¡Ay de vosotros hipócritas!
que adornáis vuestros vestidos;
pero por dentro estáis llenos
de basura y suciedad;
renovad vuestro interior
de verdad.
4. ¡Ay de vosotros hipócritas!
que vivis de privilegios,
pisoteáis al hermano
para escalar un puesto
y nunca le defendéis
de verdad.
5. ¡Ay de vosotros hipócritas!
que jugáis con cartas falsas,
y saludáis con sonrisas
de dudosa diplomacia;
pero nunca en vuestros labios
hay verdad.
09.- ACERQUEMONOS TODOS AL ALTAR (F. Palazón)
ACERQUÉMONOS TODOS AL ALTAR
QUE ES LA MESA FRATERNA DEL AMOR,
PUES SIEMPRE QUE COMEMOS DE ESTE PAN
RECORDAMOS LA PASCUA DEL SEÑOR.
1. Los hebreos, en medio del desierto, comieron el
maná,
nosotros, peregrinos de la vida, comemos este pan;
Los primeros cristianos ofrecieron su cuerpo como
trigo;
nosotros, acosados por la muerte, bebemos este
vino.
2. Como Cristo hecho pan de cada día, se ofrece en
el altar
nosotros entregados al hermano comemos de este pan;
Como el cuerpo de Cristo es uno solo por todos
ofrecidos
nosotros olvidando divisiones bebemos este vino.
3. Como ciegos en busca de la aurora, dolientes
tras la paz
buscando tierra nueva y cielos nuevos, comamos este
pan.
Acerquémonos todos los cansados, porque El es
nuestro alivio
y siempre que el desierto nos agobie, bebamos este
vino.
10.- FARISEOS (Carmelo Erdozaín)
Fariseos, Fariseos, fariseos y farsante
¿Qué habéis hecho del amor?
Fariseos, Guías ciegos vuestro rito no es sincero,
no lo hacéis de corazón.
Fariseos,
fariseos de inmundicia estáis llenos,
no tenéis
sinceridad;
os preocupan
vuestros gestos
y olvidáis la
fraternidad. Esto es lo fundamental.
AMARÁS AL SEÑOR,
TU DIOS CON TODO TU AMOR,
ÉL ES TU
LIBERTADOR.
AMARÁS AL
PRÓJIMO TAMBIÉN
COMO YO LO AME.
AMARÁS TU VIDA POR EL.
Se sentaron, se sentaron,
los escribas se sentaron en la catedra de Moisés.
Observad, acatad respetad lo que ellos dicen
y no hagáis lo que ellos hacen.
Porque dicen,
porque dicen,
porque dicen y
no hacen
y ni un dedo
quieren mover.
Lejos estáis de
Yahvé.
Amarás al Señor,
tu Dios con todo tu amor,
Él es tu
libertador.
Crean leyes,
servidumbres,
ponen cargas muy
pesadas que ellos no quieren mover;
se disputan los
primeros puestos,
buscan fama y
poder
figurando en los
banquetes menosprecian a Yahvé.
Sed servidores
del bien,
sed consecuentes
con la fe;
purificaos
primero por dentro
y escuchad lo
que dice Yahvé.
11.- YO PENSABA (Cesareo Garabaín)
Yo pensaba que el hombre era grande por su poder,
grande por su saber, grande por su valor;
yo pensaba que el hombre era grande y me equivoqué,
pues grande sólo es Dios.
SUBE HASTA EL CIELO Y LO VERÁS,
QUE PEQUEÑITO EL MUNDO ES,
SUBE HASTA EL CIELO Y LO VERÁS ….
COMO UN JUGUETE DE CRISTAL
QUE CON CARIÑO HAY QUE CUIDAR:
SUBE HASTA EL CIELO Y LO VERÁS…..
Muchas veces el hombre
buscaba ser como Dios,
quería ser como Dios,
soñaba ser como Dios.
Muchas veces el hombre
soñaba y se despertó,
pues grande sólo es Dios.
12.- SI ME FALTA EL AMOR
1. Aunque yo dominara las lenguas arcanas
y el lenguaje del cielo supiera expresar,
solamente sería una hueca campana
si me falta el amor.
SI ME FALTA EL AMOR
NO ME SIRVE DE NADA
SI ME FALTA EL AMOR
NADA SOY (BIS TODO)
2. Aunque todos mis bienes dejase a los pobres
y mi cuerpo en el fuego quisiera inmolar,
todo aquello sería una inútil hazaña
si me falta el amor.
3. Aunque yo desvelase los grandes misterios
y mi fe las montañas pudiera mover,
no tendría valor, no me sirve de nada
si me falta el amor.