"El
intérprete de la Sagrada Escritura, para conocer lo que Dios quiso
comunicarnos, debe estudiar con atención lo que los autores querían decir, y lo
que Dios quería dar a conocer con dichas palabras" (D.V. 12).
7.1.
El problema.
Cuando
abrimos la Biblia, nos solemos encontrar con correspondencia que existen entre
los dos testamentos: el Antiguo en el Nuevo. vgr Rom. 5,14s Gn. 3,17s; 1Pe. con
Gn. 7,7. ¿Cuál es la razón fundamental de esta correspondencias?...La Biblia
cuyo autor es Dios el cual abraza todo el curso de la historia y de la
revelación y los libros que va inspirando son
capítulos de su grande Libro, en los que va manifestando gradualmente su
verdad. Los escritores sagrados son sólo eslabones aislados de esta obra y
depositan una percepción particular y parcial de la verdad divina.[1]
Dichos
esto, se sigue, que no basta descubrir el sentido que el autor humano ha dado a
sus palabras, es necesario llegar hasta el sentido "pleno" que Dios
ha depositado en las palabras del escritor.
En el
A.T. se deben distinguir dos grados de profundidad dentro del sentido
literario: aquél en el que la crítica de se detiene y aquél que llega hasta la
teología, franqueando los límites de la crítica. El sentido "pleno".
Este sentido es la interpretación de los textos del A.T. hecha a la luz de
Cristo.
Existe
además otro sentido relacionado no con los textos sino con las realidades
(personas, sucesos, cosas). Es el llamado sentido típico.
Teniendo
en cuenta que el sentido pleno es solo una visión más profunda del sentido
literal primario, se pueden describir así:
"PRIMARIO"
SENTIDO
TÍPICO
7.2.
Los sentidos escriturísticos.
7.2.1. El sentido literal.
El sentido literal es aquel que
radica en las palabras. Puede ser literal primero y segundo o
"pleno".
a) Sentido
literal primero.
Es el sentido expresado
inmediatamente por las palabras del autor sagrado. Este
sentido primero de las palabras puede ser expresado o bien por un estilo propio
mediante una frase llana sencilla, que debe interpretarse tal como suena; o
bien en un estilo "impropio", mediante una figura literaria vgr.
metáfora, hipérbole, parábola, alegoría, símbolo, enigma, etc...
b) Sentido literal segundo o pleno.
Es
el acrecentamiento de significado objetivo que reciben las palabras del Antiguo
Testamentos cuando son tomadas en el Nuevo Testamentos a la luz de la
realización aportada por Cristo.
Este
sentido pleno que descubre el texto del N.T. : vemos que se encuentra implícita, pero realmente en el
texto del A.T.; fue desconocido por el autor humano, aún en sus instituciones
oscuras; pero, fue depositado allí por Dios, en la objetividad de la palabra
que él quiso escoger. Por lo tanto, "el
sentido pleno es propiamente escriturístico" (vgr. Mt. 1,22 e Is.
7,14; Mt. 8,17e Is. 53,4 Hch 2,17-21 y Jl. 3,1-5).
7.2.2. Sentido típico.
Es aquél que radica en
realidades: personas, acontecimientos, o cosas. "Es el sentido que reciben
realidades ( ya sean personas acontecimientos
o cosas) el A.T. cuando son tomadas en el N.T. a la luz de la revelación
aportada por Cristo".
El texto posee ciertas palabras
"claves" que sirven de fundamento para que el acontecimiento antiguo se relacione con el
nuevo acontecimiento. Ejemplo:
-
Adán, tipo del Cristo futuro
(Rm. 5,14).
-
Los acontecimientos del Éxodo,
sucedieron de manera típica, es decir, para nuestra instrucción (1Cor.
10,6.11).
-
El arca de Noé, tipo del
bautismo (1Pe. 3,20).
-
El Maná, tipo de la Eucaristía
(Jn. 6,32s).
-
La serpiente en alto, tipo de
Cristo en la cruz (Jn. 3,14).
Todo
sentido típico es fundamentalmente cristológico, pues es Cristo quien da el
perfeccionamiento y el cumplimiento decisivo a los acontecimientos de la
antigua alianza.
7.3.
Armonía entre los sentidos pleno y típico
Entre
los sentidos pleno y típico existe, una relación estrecha. Los hechos o tipos
que son el objeto del sentido típico, son conocidos solo a través de las
palabras, que son objeto el sentido pleno. Abrahám que va a inmolar a su Hijo
es tipo del Sacrificio del Calvario, en la medida como es presentado este hecho
en el escrito (Gn. 22,2.12 y Jn., 16; cfr. Rom. 8,32).[2]
Pero
también un tipo bíblico puede corresponder a una existencia literaria y no a
una histórica vgr. Melquisedec, es un tipo de sacerdote celestial (Hb. 7,3) no
porque no tuvo padres, sino porque la Escritura no afirmó que los tuviera. El
factor esencial es el sentido típico, porque es un sentido escriturístico, debe
buscarse y hallarse en las palabras de la Escritura.
7.4.
Alcance del sentido "segundo"
7.4.1. ¿Puede haber sentidos segundos dentro del mismo A.T.?
Ciertamente
algunas fórmulas antiguas pudieron ser tomadas en un sentido más pleno después
vgr. el éxodo tipo de regreso de la cautividad. Pero usos progresos son poca
cosa en comparación del salto decisivo y recomienzo radical aportado por
Cristo. Por esa razón, más vales reservar los sentidos plenos y típicos al
perfeccionamiento traído por Cristo.
7.4.2. Y ¿Dentro del N.T.?
La
misma respuesta. Pues, aún, cuando la luz del Espíritu Santo hizo profundizar
en el misterio de Cristo, sin embargo sólo es la toma de conciencia el gran don
que Dios nos hizo en su Hijo. Qué más se puede esperar que acreciente
substancialmente este don...
7.4.3. Sentidos típico y pleno en los límites del "texto
sagrado".
Por lo
tanto, hablando con formalidad de términos, se es más fiel al objeto formal preciso de
"inspiración escriturístico" si se mantienen los sentidos plenos y
típicos en los límites del "TEXTO SAGRADO", que se vuelve el mismo a tomar y comentar.
7.5.
Sentido consecuente y acomodaticio.
Los
sentidos escriturísticos propios son el literal y el típico, pero a través de
los siglos, los textos de la S.E. han sido utilizados o aplicados más allá de
las fronteras de estos sentidos escriturísticos. Veamos algunos de ellos:
7.5.1. Sentido
consecuente.
Es el
sentido en que la teología especulativa toma ciertos textos de la Biblia para
descubrir en ellos o deducir de allí algunas de sus conclusiones vgr. Mc. 2,6ss
y Jn. 2,24-25 servirá para tratar de la ciencia infusa de Cristo. De Lc. 1,28,
un mariólogo deducirá la plenitud de gracia de la Virgen María o el privilegio
de su Inmaculada Concepción.
7.5.2. Sentido
acomodaticio.
La
Liturgia y la Predicación toman también en numerosas ocasiones los textos
bíblicos en sus sentidos escriturísticos o consecuentes.
Sin
embargo en muchos casos emplean pasajes de la Biblia dándoles un "sentido
acomodaticio" es decir aplicándolos a personalidades, circunstancias que
no caen bajo el sentido literal pretendido por los autores sagrados vgr. La
Liturgia toma textos sapienciales y los "acomoda" a la Virgen María:
Prov. 8,22-31; Ct. 8,5; Eclo. 24,1-22 confesores: Eclo. 45,1-5. La lectura
espiritual de la Biblia, nos invita a hacer nuestras plegarias de la Salmos.[3]
Preguntas para el diálogo.
1. ¿
Cuál es el privilegio de la Biblia?.
2. ¿ Cómo
pueden ser los sentidos escriturísticos?.
3. ¿ En
que radica el sentido literal?.
4. ¿ En
que radica el sentido típico?.
5. ¿
Cómo puede ser el sentido literal?.
6. ¿
Descubre el sentido pleno en Mt. 1,22; Is. 7,14?.
7. Lee
en 1Pe. 3,20 el ejemplo del antitipo.