sábado, 2 de noviembre de 2024

LECTURAS Y COMENTARIO DOMINGO XXXI CICLO B (SAN MARTIN DE PORRES) - 3 NOVIEMBRE

 

SAN MARTIN DE PORRES, RELIGIOSO

COMENTARIO

 

Celebramos la fiesta de San Martín de Porres (1579-1639) nacido en Lima, Perú, hijo de un noble caballero español, Juan de Porres; y de una mujer libre, de raza negra, panameña, pero de origen africano: Ana Vázquez. Su infancia estuvo marcada por las tribulaciones de no haber sido reconocido por su padre, y de haber sido mulato en una época profundamente racista. De joven, Martín aprendió los oficios de boticario y de barbero, lo que denota su temprana pasión por la medicina y su vocación por sanar a la gente.

En 1594, el destacado dominico Fray Juan de Lorenzana lo invita a ingresar a la orden de Santo Domingo, que recién había abierto su primer monasterio en el Perú. San Martín ingresa en calidad de “donado”, ocupándose de trabajos de servidumbre por ser negro y no reconocido. Además de ello el sacerdocio estaba prohibido para alguien de su condición. Por su caridad y su humildad, San Martín de Porres fue finalmente admitido como hermano en 1603, y a partir de entonces fue creciendo su fama de curador de enfermos.

En aquel tiempo, convivían en Lima varios santos: Santo Toribio de Mogrovejo, que era el arzobispo de la ciudad, San Francisco Solano que era fraile franciscano, Santa Rosa de Lima que era terciaria dominica, San Juan Macías que era fraile dominico y él mismo, San Martín de Porres. ¡Cinco santos viviendo simultáneamente en la misma ciudad!

Cuando la ciudad de Lima fue asolada por la peste, se dice que él solo salvó de la muerte a sesenta de sus hermanos. Además, curaba siempre a todos los desvalidos que acudían a buscarlo. Más adelante, San Martín de Porres fundó el Asilo y Escuela de Santa Cruz, para la instrucción de niños desvalidos provenientes de familias negras, indígenas y de gente rústica, además de recoger a los vagos y malvivientes para ayudarlos a salir de su situación.

La caridad de San Martín de Porres se proyectaba también hacia los animales heridos y hambrientos, a los que atendía con igual celo religioso. La fama de santidad de San Martín de Porres hizo que fuera solicitado por personas de todos los estratos sociales, y él nunca se negó a ayudar al prójimo, sin importar quién fuera. Igualmente, se le atribuyen varios milagros en vida.

El día 3 de noviembre de 1639 muere pobremente como había vivido toda su vida. Tenía sesenta años de edad y su fiesta es precisamente hoy, tres de noviembre.

El 29 de octubre de 1837 es solemnemente beatificado por el Papa Gregorio XVI. En junio de 1926, el Papa Pío XI concede reiniciar la causa de canonización. Aunque sólo era beato, aprueba que su fiesta se celebre en algunas diócesis de América, África y Asia. El día 10 de enero de 1945, el Venerable Papa Pío XII lo declara patrono de todas las obras de justicia social en Perú. El día 6 de mayo de 1962, el Beato Papa Juan XXIII lo canonizó solemnemente en Roma. En julio de 1966, el Papa Pablo VI, lo declaraba patrono de los barberos y peluqueros italianos.

Es el santo patrono de la Paz Universal, así como de los animales domésticos. Iconográficamente se le representa con una escoba, símbolo de su humildad ejemplar.

San Martín de Porres nos enseña que Dios no hace distinciones por el color de la piel.

Pbro. Roland Vicente Castro Juárez

 

ANTÍFONA DE ENTRADA Mt 25, 34.36.40

Vengan ustedes, benditos de mi Padre, dice el Señor. Estaba enfermo y me visitaron. En verdad les digo que cada vez que lo hicieron con uno de estos mis hermanos más pequeños, conmi- go lo hicieron.

 

ORACIÓN COLECTA

Oh, Dios, que has conducido a san Martín de Porres a la gloria celeste por el camino de la humildad, concédenos seguir ahora sus admirables ejemplos para que merezcamos ser elevados con él a los cielos. Por nuestro Señor Jesucristo.

 

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro de Isaías 58, 6-11

Así dice el Señor: «El ayuno que yo quiero es este: abre las prisiones injustas, desata los lazos del yugo, deja libres a los oprimidos, rompe todos los yugos; parte tu pan con el hambriento, hospeda a los pobres sin techo, viste al que ves desnudo, y no dejes de socorrer a tus semejantes. Entonces surgirá tu luz como la aurora, y tus heridas sanarán rápidamente; te abrirá camino la justicia, detrás de ti irá la gloria del Señor. Entonces clamarás al Señor, y te responderá; gritarás, y te dirá: "Aquí estoy". Cuando destierres de ti la opresión, el gesto amenazador y la calumnia, cuando partas tu pan con el hambriento y sacies el estómago del indigente, brillará tu luz en las tinieblas, tu oscuridad se volverá mediodía. El Señor te guiará siempre, te saciará en el desierto, dará vigor a tus huesos, serás como un huerto bien regado, como un manantial cuyas aguas nunca se agotan».

 

SALMO RESPONSORIAL (Sal 1, 1-4.6)

 

Su gozo es la ley del Señor.

 

Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los impíos, ni entra por la senda de los pecadores, ni se asienta en la reunión de los cínicos; sino que su gozo es la ley del Señor, y medita su ley día y noche. R.

 

Será como un árbol plantado al borde de la acequia: da fruto de su sazón y no se marchitan sus hojas; y cuanto emprende tiene buen fin. R.

 

No así los impíos, no así; serán paja que arrebata el viento. Por- que el Señor protege el camino de los justos, pero el camino de los impíos acaba mal. R.

 

SEGUNDA LECTURA

Lectura de la primera carta del apóstol San Pablo a los Corintios 12, 31-13, 13

Hermanos: Ambicionen los carismas mejores. Y aún les voy a mostrar un camino más excelente. Ya podría yo hablar las lenguas de los hombres y de los ángeles; si no tengo amor, no soy más que un metal que resuena o unos platillos que aturden. Ya podría tener el don de profecía y conocer todos los secretos y todo el saber, podría tener fe como para mover montañas; si Podría repartir en to que tengo y aun dejarme quemar vivo; si no tengo amor, de nada me sirve. El amor es paciente, afable; no tiene envidia; no presume ni se engríe; no es mal educado ni egoísta; no se irrita, no toma en cuenta el mal. No se alegra de la injusticia, sino que goza en la verdad

Disculpa sin límites, cree sin límites, espera sin límites, aguanta sin límites. El amor no pasa nunca.

¿El don de profecía?, se acabará. ¿El don de lenguas?, enmudecerá. ¿El saber?, se acabará. Porque limitado es nuestro saber y limitada es nuestra profecía; pero, cuando venga lo perfecto, lo limitado se acabará.

Cuando yo era niño, hablaba como un niño, sentía como un niño, razonaba como un niño. Cuando me hice un hombre, acabé con las cosas de niño. Ahora vemos confusamente en un espejo; entonces veremos cara a cara. Mi conocer es por ahora limitado; entonces podré conocer como Dios me conoce. En una palabra: quedan la fe, la esperanza, el amor: estas tres. La más grande es el amor.

 

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO

Aleluya. Bendito seas, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has revelado los secretos del Reino a la gente sencilla. Aleluya.

 

EVANGELIO

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 11, 25-30

En aquel tiempo, exclamó Jesús: «Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque tiste do gracias cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a la gente sencilla. Si, Padre, así te ha parecido mejor. Todo me lo ha entregado mi Padre y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. Vengan a mí todos los que están cansados y agobiados, y yo los aliviaré. Carguen con mi yugo y aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontrarán descanso. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».

 

ORACION DE LOS FIELES

Ensalcemos al Señor Jesús, que con gran variedad de gracias enriquece a la Iglesia de santos, e invoquémoslo con confianza, diciendo: Señor, daños tu Espíritu Santo.

 

1. Te pedimos por nuestra Iglesia dispersa en cada rincón del mundo, para que halle al estilo de nuestro santo peruano San Martin de Porres, una vida austera llena de humildad y servicio a los más necesitados.

 

2.- Concede a tus fieles tu sabiduría eterna, escondida a los sabios y entendidos, para que con el bienaventurado Martín den gracias a tu santo nombre con sencillez y sea gloria suya tu alabanza.

 

3.- Tú que hiciste a san Martín dócil a tu Palabra, concédenos guardar con fidelidad tus mandamientos para que con la fuerza del Espíritu Santo permanezcamos en ti y tú en nosotros.

 

4.- Tú que, trabajando con tus manos, elevaste la dignidad del trabajo y lo hiciste obra evangelizadora, concédenos que por tu gracia aumente el número de los hermanos cooperadores para preparación del Evangelio de la paz.

 

5.- Tú que con la caridad de san Martín aliviaste las necesidades de los pobres, enséñanos a socorrer con nuestros bienes a los necesitados y a descubrirte en los que sufren.

 

6.- Haz, Señor, que los que tienen en su mano los destinos de los pueblos no cuiden sólo del bienestar de su nación, sino que respeten y piensen también en los demás pueblos, evitando toda discriminación.

 

Señor, Dios nuestro, que has querido conducir al bienaventurado Martín por el camino de la humildad a la gloria del cielo; concédenos la gracia de seguir sus ejemplos para que merezcamos ser coronados con él en la gloria. Por nuestro Señor Jesucristo.

 

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Recibe, Señor, los dones de tu pueblo y concede a quienes celebramos las maravillas del inmenso amor de tu Hijo, reafirmarnos, a ejemplo de san Martín de Porres, en el amor a ti y prójimo. Por Jesucristo, nuestro Señor.

 

ANTÍFONA DE COMUNIÓN Jn 15,

Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por s amigos.

 

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Alimentados con estos sagrados misterios, concédenos, Señor, seguir los ejemplos de san Martín de Porres, que te dio culto con devoción constante y enriqueció a tu pueblo con un amor sin medida. Por Jesucristo, nuestro Señor.

 

PALABRA DE DIOS Y SANTORAL DE CADA DÍA

Lunes 04: Flp 2, 1-4; Sal 130; Lc 14, 12-14

Martes 05: Flp 2, 5-11; Sal 21; Lc 14, 15-24

Miércoles 06: Flp 2, 12-18; Sal 26; Lc 14, 25-33

Jueves 07: Flp 3, 3-8ª; Sal 104; Lc 15, 1-10

Viernes 08: Flp 3, 17—4, 1; Sal 121; Lc 16, 1-8

Sábado 09: Ez 47, 1-2.8-9.12; (o bien 1Co 3, 9c.11.1617); Jn 2, 13-22

Domingo 10: 1R 17, 10-16; Sal 145; Hb 9, 24-28; Mc 12, 38-44

 

LAS 10 CUALIDADES ADMIRABLES DE SAN MARTÍN DE PORRES

 

Una figura icónica en la historia de la Iglesia Católica y un ejemplo perdurable de virtud y caridad

San Martín de Porres es una figura icónica en la historia de la Iglesia Católica y un ejemplo perdurable de virtud y caridad. Nacido en Lima, Perú, en 1579, este humilde hombre se convirtió en el primer santo mulato de América y dejó un legado que trasciende fronteras y épocas. En este artículo, exploraremos las diez cualidades que hicieron de San Martín de Porres un modelo a seguir para todos nosotros.

 

Devoción inquebrantable: San Martín tenía una fe profunda y un amor inquebrantable por Dios. Pasaba horas en oración y adoración, buscando una conexión más profunda con lo divino.

Humildad: A pesar de sus dones y virtudes, San Martín de Porres nunca se consideró superior a nadie. Siempre se vio a sí mismo como un humilde siervo de Dios y un servidor de los menos afortunados.

Caridad sin límites: La caridad fue el pilar central de la vida de San Martín. Atendía a los pobres, los enfermos y los marginados, sin importar las circunstancias ni el momento del día.

Compasión: San Martín tenía un corazón compasivo que le permitía conectarse profundamente con el sufrimiento de los demás. No solo les brindaba ayuda material, sino que también les ofrecía consuelo y esperanza.

Servicio desinteresado: Siempre dispuesto a servir a los demás, San Martín de Porres trabajó incansablemente en el hospital de Lima, cuidando a los enfermos y heridos, incluso aquellos con enfermedades contagiosas.

Tolerancia y respeto: A pesar de las barreras raciales y sociales de su época, San Martín de Porres trató a todas las personas con respeto y dignidad, sin importar su origen étnico o posición social.

Sencillez: A lo largo de su vida, San Martín vivió una vida simple y sin lujos. No buscaba la riqueza ni el reconocimiento, sino la felicidad en el servicio a los demás.

Paciencia: San Martín enfrentó numerosos desafíos y dificultades en su vida, pero siempre mantuvo la paciencia y la serenidad, confiando en la voluntad de Dios.

Alegría y optimismo: A pesar de las adversidades, San Martín irradiaba alegría y optimismo. Su sonrisa y su actitud positiva inspiraban a quienes lo rodeaban.

Amor por la naturaleza y los animales: San Martín de Porres tenía un profundo amor por la creación de Dios, incluyendo a los animales. Se dice que podía comunicarse con ellos y sanarlos.

San Martín de Porres es un ejemplo de virtud, humildad y servicio desinteresado que continúa inspirando a personas de todo el mundo. Su vida y sus cualidades son un recordatorio de la importancia de la caridad y la compasión en nuestras vidas, y nos instan a seguir su ejemplo en nuestra búsqueda de la santidad y el amor por nuestros semejantes.

Más información: www.dominicos.org/quienes-somos/grandes-figuras/santos/san-martin-de-porres

 


 

San Martín de Porres

Lima siglo XVI - 1579 Nacimiento

Nace el 9 de noviembre, hijo de un caballero español Juan de Porres y de Ana Velázquez, mujer negra de origen panameño.

1591 Martín cirujano-barbero

Inicia su aprendizaje de boticario en casa de Mateo Pastor.

1603 Profesión religiosa

Tras ingresar en 1594, y tras algunas dificultades profesa como hermano cooperador en el convento de Ntra. Sra. del Rosario.

fray Martín místico

1619 Experiencias místicas

Comienza a perseguirle la fama de experiencias sobrenaturales.

1639 Muerte

Muere el 3 de noviembre tras caer enfermo un mes antes, en la más absoluta pobreza.

milagro canonización

1956 Último milagro

Tercer milagro para la canonización del beato Martín de Porres. La curación del niño Antonio Cabrera Pérez-Camacho, en la isla canaria de Tenerife.

canonización San Martín de porres

1962 Canonización

Juan XXIII le canoniza en Roma el 6 de mayo de 1962.

San Martín de Porres es el santo de la humildad. Popularmente conocido como Fray Escoba, este dominico originario de Lima, Perú, fue el primer mestizo canonizado por la Iglesia.

Por medio de su sencillez y servicio logró superar las diferencias y unir a las tres culturas que convivían en su época, a pesar de los conflictos que dificultaban la coexistencia en la sociedad limeña del siglo XVII.

¿Cómo fue la vida de Martín de Porres?

Martín de Porres nació en Lima el 9 de diciembre de 1579. Fue hijo de Juan de Porres, caballero español de la Orden de Calatrava, y Ana Velázquez, negra libre panameña. A los doce años empezó a aprender los oficios de peluquero, asistente de dentista y medicina natural.

A todos amaba y curaba sin tener en cuenta su procedencia

Más tarde, llegó a ser cirujano. La casa de Martín se llenó de mendigos y personas que no tenían la capacidad económica, pues eran atendidos gratuitamente y con mucho esmero por el famoso barbero y cirujano de Lima.

Martín decide entrar al convento de Nuestra Señora del Rosario en Lima.  Sin embargo, debido a su condición de mulato, ingresa a la comunidad como “donado”. En el convento se le confió el oficio de la limpieza; su escoba fue, con la cruz, la gran compañera de su vida. De ahí que fuera popularmente conocido como Fray Escoba.

El 2 de junio de 1603, hizo su profesión religiosa y fue hermano cooperador. Martín se destacaba por el cuidado que brindaba a los enfermos. A todos amaba y curaba sin distingo de su procedencia étnica (indígenas, españoles y negros). Por sus cuidados pasaban todos los sectores de la sociedad limeña. Fue un verdadero ejemplo de unidad en una sociedad fracturada por diversos conflictos.

Martín de Porres falleció en 1639 y sus restos se encuentran en la Basílica de Santo Domingo en Lima. Fue canonizado en 1962 por Juan XXIII.

¿Qué caracterizó a San Martín de Porres?

Martín vivió en el apogeo de la reforma de la Provincia de San Juan Bautista y, más aún, fue un referente muy importante en dicha reforma, llegando a convertirse para sus hermanos en referente del buen religioso. Y aún lo sigue siendo para nosotros.

A diferencia de la gran mayoría de santos dominicos, alcanzó la santidad sin destacar como predicador, teólogo, misionero, mártir o artista. Destaco como religioso afrontando la desventaja de ser pobre, mulato y bastardo. Algo solo externo porque en su interior era una persona inteligente, trabajadora y muy caritativa.

¿Qué nos dice hoy la vida de fray escoba?

Martín nos hace recordar el inmenso poder de la humildad y el servicio. En un mundo saturado por tantas palabras e imágenes, el santo de Lima es un constante recordatorio de la validez del ejemplo y de la grandeza de los pequeños actos cotidianos que pueden cambiar el entorno inmediato e, incluso, el curso de la historia.

San Martín de Porres es patrono de...

La Justicia Social y de la Paz. Su patronazgo se extiende también a los pobres, los peluqueros, el gremio de la limpieza pública, los farmacéuticos y enfermeros y también es patrón de Cáritas y de los hermanos cooperadores dominicos.

 

¿Cuándo se celebra su fiesta?

Martín es querido e invocado por todos, ricos y pobres, enfermos, por hombres de ciencia y por ignorantes. Su imagen o su estampa acompaña en los viajes, está en las casas y también en los hospitales, en los libros de rezo y en los de estudio. Todo porque fue humilde, obediente, y, como dijera Juan XXIII, “Es Martín de la Caridad”. La fiesta de San Martín de Porres se celebra el 3 de noviembre.