viernes, 24 de febrero de 2012

COMENTARIO DOMINICAL DEL 26 DE FEBRERO DEL 2012


ES POSIBLE CONVERTIRSE

1° LECTURA: Gn. 9, 8-15: El pacto de Dios con Noé salvado del diluvio.
SALMO:    Sal 24: Tus sendas, Señor, son misericordia y lealtad para los que guardan tu alianza.
2° LECTURA: Pe. 3, 18-22: Actualmente les salva el bautismo.
EVANGELIO:   Mc. 1, 12-15: Se dejaba tentar por Satanás y los ángeles le servían.

Marcos cuenta de forma muy concreta la tentación presentándonos cuatro personajes (el Espíritu, Jesús, Satanás, los ángeles) y tres acciones: el Espíritu empuja a Jesús al desierto,  Satanás lo tienta, los ángeles le sirven en medio de los animales salvajes que han vuelto a amansarse. Entre  el Espíritu y los ángeles, Satanás, se ve casi acorralado: el Espíritu no impulsa más que hacia una victoria que convierte a la tierra en lo que era al comienzo: un paraíso en el que todo es armonía y bondad: “Habitará el lobo con el cordero, la pantera se tumbará con el cabrito, el ovillo y el león pacerán juntos: un muchacho pequeño los pastorea”.
Pero la idea de la tentación recobra su fuerza desde la primera    predicación de Jesús: “¡Conviértanse!”. La vida del hombre sobre la tierra será siempre un combate en contra de la tentación, esfuerzo continuo por convertirse. Jesús ha venido a librarnos de este combate; pedir que lo hiciera no sería una buena oración. Ha venido “para que vivamos” y esto supone luchas continuas contra el orgullo, contra las preocupaciones paganas y contra la sexualidad anárquica. Estas luchas sólo se acabarán cuando exhalemos el último suspiro. ¡No habría gustado tanto que las cosas fueran diferentes!. Una hermosa conversión aplastante que hiciera de nosotros seres maravillosamente transformados, avanzando desde entonces con la cabeza bien alta por un camino de amor fraternal y de obediencia a Dios. Si soñamos con eso, no nos  convertiremos  nunca  la  conversión, en  sentido evangélico es más modesta más realista y continua. Tiene ciertamente, ante todo el aspecto de una franca transformación. Al salir de una predicación, de una meditación, de un retiro, cuando nos ha golpeado una enfermedad, la muerte de una persona querida, cuando nos ha entusiasmado un amor, descubrimos que vivíamos mal y nos decidimos realmente a cambiar. Será posible señalar la fecha de ese  viraje, de ese cambio de dirección. La vida de algunos convertidos simbolizan por la enormidad del cambio, lo que nos ocurre a nosotros en un nivel más pequeño: finalmente, se le dice sí a Dios. Pero lo que viene a continuación es desalentador. En los verdaderos convertidos el camino sigue en pie, ellos van subiendo cada vez más. Nosotros sin embargo caemos de nuevo en la mediocridad e incluso en el mal. Nuestra conversión no era en el fondo más que una pequeña fiebre de santidad. ¿Dónde está  el fallo?. ¿Es que somos incurablemente gente mediocre y cobarde?. Somos más bien personas que escuchan mal el evangelio, sobre todo cuando el texto es corto, como el de hoy, y corre el peligro de quedar mutilado. Jesús dice: “Conviértanse.. y crean en la buena nueva”. Tomar solamente la mitad es estropearlo todo; seguiremos viviendo soñando con la conversión y nada más. Quizás fuera necesario cambiar una palabra para marcar con energía la relación  necesaria entre las dos ideas: “Conviértanse CREYENDO en la buena nueva”.
RP. Roland Vicente Castro Juárez

viernes, 17 de febrero de 2012

COMENTARIO DOMINICAL DEL 19 DE FEBRERO DEL 2012


LO VISIBLE Y LO INVISIBLE

1° LECTURA:   Isaías 43, 18-19. 21-2. 24b-25: Por mi cuenta borrara tus crímenes.
SALMO: Sal 40: Sáname, Señor porque he pecado contra ti.
2° LECTURA: Cor. 1, 18-22: Jesús no fue primero “sí” y luego “no” en él todo se ha convertido en un “si”.
EVANGELIO: Mc 2, 1-12: El Hijo del hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados.

Después de recorrer durante algunas semanas las tierras de Galilea, Jesús regresa a Cafarnaún y se hospeda en la casa de Pedro (1,29). Todos acuden a ver lo que pasa y a escuchar lo que dice. Pero la situación de Jesús ha cambiado sensiblemente: En la concurrencia se han mezclado unos emisarios de Jerusalén, que vienen a inspeccionar lo que ocurre. Son escribas, pertenecientes al grupo más activo del partido de los fariseos. Con su aparición en escena comenzará un conflicto, que habrá de terminar en Jerusalén con la muerte del Maestro.
Pero la fe del pueblo y la confianza en el poder curativo de Jesús sigue creciendo. Buena prueba de ella es la pintoresca narración que nos ofrece Marcos en este evangelio. Unos hombres llevando consigo en andas a un pobre paralítico, tratan de acercarse a Jesús. Al encontrar la puerta cerrada por la multitud que se agolpa ante ella, estos hombres suben a la terraza, por la escalera exterior, y abren un boquete para descender la camilla y posarla ante los pies de Jesús. El Maestro valora la fe de estos hombres y del enfermo, a quien le dice que le son perdonados sus pecados. Seguramente, el enfermo tiene un cierto sentido de culpabilidad, al pensar que Dios le ha castigado por sus pecados. Jesús le tranquiliza.
Aunque las palabras de Jesús podían entenderse como la declaración de que Dios mismo perdona los pecados, los escribas, que no pierden palabra ni detalle, entienden que Jesús se arroga una competencia que, según las Escrituras, pertenece exclusivamente a Dios. Sólo Dios puede perdonar los pecados, piensan estos escribas, y acusan en su interior de blasfemo a Jesús.
Jesús se da cuenta de lo que murmuran y piensan en sus adentros. Y se dispone a dar una señal no sólo para mostrar que Dios perdona los pecados, sino también que él, el Hijo del Hombre, tiene poder para perdonar pecados sobre la tierra. El perdón de los pecados no es un hecho constatable por la experiencia objetiva, y así es más fácil decir "tus pecados te son perdonados", pues eso no se puede comprobar, que decir "levántate y anda". Pero ambas palabras son igualmente difíciles de pronunciar con verdad y autoridad.
Los escribas debían haber admitido que el que es capaz de decir a un paralítico que se levante y conseguirlo efectivamente, es capaz también de perdonar los pecados, aunque este hecho no pudieran comprobarlo en sí mismo.
Jesús no se contenta con perdonar los pecados, sino que, para que veamos que el perdón es real, cura también las enfermedades del cuerpo. Por otra parte, Jesús muestra que ha venido a salvar integralmente al hombre, en alma y cuerpo.
Pbro. Roland Vicente Castro Juárez 
rolancaju@gmail.com

sábado, 11 de febrero de 2012

COMENTARIO DOMINICAL DEL 12 DE FEBRERO DEL 2012


ENCONTRARSE CON JESÚS

1° LECTURA:  Lev. 13, 1-2. 44-46: El leproso tendrá su morada fuera del campamento.
SALMO:   Sal 31: Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación.
2° LECTURA: Cor. 10, 31-11.1: Sigan mi ejemplo, como yo sigo en el de Cristo.
EVANGELIO: Mc. 1, 40-45: La lepra se le quitó y quedó limpio.

 “Se le acercó un leproso…. Acudían a él de todas partes”. El evangelio describe muchos encuentros con Jesús, pero ¡qué diferencia! Muchos acudieron pronto a él, pero superficialmente. Unos fueron verdaderamente atrapados por él (¡muy pocos!), otros permanecieron indiferentes, la mayor parte se volvieron hostiles. ¿De qué depende eso que pasa entre  Jesús y un hombre?. Lo vemos en este episodio: todo depende de la fe-confianza. La confianza del leproso es extraordinaria: “Si quieres, puedes”. ENCONTRARSE CON JESÚSEs la fe de la cananea, del centurión, del padre del epiléptico. Jesús se siente siempre conmovido por esta fe. Pero nunca el diálogo fue tan breve y tan intenso. Dos palabras para revelar la fe del leproso, una palabra para señalar el efecto de esta fe: si quieres, puedes. Quiero.
Aquí se encuentran a la vez la terrible situación de un hombre y la gran fuerza del amor. La lepra era una enfermedad espantosa, porque excluía de la comunión con el pueblo, o sea, segregaba a un hombre de sus relaciones con el pueblo de Dios. "¡Impuro, impuro!", gritaba el leproso desde lejos, de manera que todos se pudieran parar y evitar así acercarse a él (Lev 13, 45). Los rabinos lo consideraban como si estuviera muerto y pensaban que su curación era tan improbable como una resurrección. Marcos indica que Jesús lo toca. Y lo cura. Eso es precisamente lo que pensaba  el  leproso: él puede   todo  lo  que  quiere.   Con  la  condición de que se crea en él. Así es como se  realiza el encuentro.
No hay miseria alguna que lo eche para atrás, pero espera nuestro “si quiero, puedes”, que debería ser casi tan poderoso como el amor con  que está  dispuesto  a acogernos. Pensemos en los “leprosos” de hoy. Me gustaría moverlos hacia Jesús; a los despreciados, a los marginados, a los que sienten la vergüenza de su cuerpo, de su corazón, de su vida. Pero también me dirijo a mí mismo. ¿Acaso estoy yo tan sano?. Muchos de mis encuentros con Jesús han sido inútiles porque nada me impulsaba a suplicarle: “¡Sálvame!. Si quieres, puedes curarme”. Para decir esto con una fuerza capaz de arrancarle gracias muy grande, es menester que me sienta  leproso  y  que  lo sienta  de  verdad.
Este doble despertar de nuestra vergüenza y de nuestra fe es la mejor preparación para un encuentro. Como cuando decimos: “Ante de celebrar esta eucaristía, reconozcamos nuestros pecados”. Preparémonos a cada uno de nuestros encuentros con Jesús reconociendo que somos leprosos.
Pbro. Roland Vicente Castro Juárez 

sábado, 4 de febrero de 2012

COMENTARIO DEL DOMINGO 05 DE FEBRERO DEL 2012

LAS SIRVIENTAS Y LOS SERVIDOS

 1° LECTURA: Job. 7, 1-4. 6-7: Mis día se consumen sin esperanza.
SALMO: Sal 146: Alaben al Señor, que sana los corazones destrozados.
2° LECTURA: 1Cor. 9, 16-19. 22-23: ¿Ay de mí si no anuncio el Evangelio!.
EVANGELIO: Mc. 1, 29-39.: Curó a muchos enfermos de diversos males.

Jesús es el hombre de los caminos, de la gente y de la oración en los lugares  desiertos. Pero conoció también el calor de una casa en donde uno está seguro de ser bien recibido. Pensemos en Betania, en la casa de Lázaro, Marta y María. Pero hubo otro sitio en donde se sintió más en su casa: la casa de Pedro y de Andrés en Cafarnaún. La página  que se nos propone es tan rica que nos detenemos poco en el primer episodio, la curación de la suegra de Pedro. Sin embargo también aquí hay materia  de reflexión. Está claro que Marcos recoge lo que le contó el mismo Pedro. Mi suegra estaba en cama con fiebre muy alta. Llegó Jesús se lo dijimos, él se acercó, la tomó por la mano y la levantó, la fiebre le dejó y ella se puso a servirnos. Fíjense bien en dos palabras: “La levantó” y “se puso a servirles”. Como el milagro es siempre una enseñanza, el evangelista quiere indicarnos que el poder de Jesús nos puede levantar para que nos convirtamos en personas que sirvan. Todo esto ocurre “en la casa”. Y la mujer que sana Jesús es la que le ofrece su hospedaje. ¡Qué seguramente no parará mientras Jesús estaba allí!. Ahora sólo tiene a los cuatro preferidos: Pedro, Andrés, Santiago y Juan. Pero pronto tendrá  a los doce, con sus esposas y sus hijos. ¡Y la gente!. Marcos dice un poco más adelante: “Acudían a él de todas partes, de forma  que no le dejaban tiempo ni para  comer”. Todo esto no le  resulta   muy   agradable  a  la  dueña  de la casa que ve cómo se le enfría la comida. Nos imaginamos a la suegra de Pedro haciendo frente a todo aquello, como tantas mujeres que  tienen el genio de la hospitalidad con todo lo que esto supone de generosidad y de discreción. “Les estuvo sirviendo”. Vale la pena meditar sobre “las sirvientas”. Tanto si nos sentimos llamados nosotros mismos a esta vocación como si necesitamos tomar más  conciencia de nuestra actitud con todas esas personas abnegadas. Bromear jamás con la palabra  suegra. Las caricaturas y los chistes crean una atmósfera malsana en torno a una función que es muy delicada: no obligar a un hijo a dividirse entre madre  y esposa, ayudar a una nuera a ser discreta y paciente y  cuidar con gusto de los niños sin querer educarlos al margen de lo que piensan los padres. Quizás sea el momento con ocasión de este evangelio, de examinar nuestro comportamiento y nuestras palabras ante el Señor que cura todas las malas fiebres. Esposa, madre, suegra o soltera, una mujer suele hospedar a otros con frecuencia.
Si le propongo que se vea sirviendo a Jesús y a sus apóstoles, quizás se ponga  a reír o ponga mala cara: ¡Esos hombres a los que intenta dar buena cama y comida no son Jesús!.
Pero  le invadirá cierto gozo al pensar en su misión: asegurar unas condiciones de vida que permitan a los apóstoles vivir felices y tranquilos.
Pbro. Roland Vicente Castro Juárez

viernes, 3 de febrero de 2012

4. OTROS LUGARES BÍBLICOS EN RELACIÓN A JESÚS.

4. OTROS LUGARES BÍBLICOS EN RELACIÓN A JESÚS.

4.1. Ain Karem

Ain Karen (Región montañosa de Judá)
Este pequeño pueblo, situado a unos siete kilómetros al oeste de Jerusalén, centra la atención del peregrino en torno a un doble misterio que allí se conmemora: el nacimiento de San Juan Bautista y la Visitación de la Virgen a su prima Santa Isabel.


Sacerdotes de España, México y un peruano
en la región Montañosa de Ain Karen
Iglesia de San Juan

Casa en donde nació Juan el Bautista

Sacerdotes peregrinos entran a venerar la cueva
donde la tradición ubica el ancimiento de Juan el Bautista

Construida sobre el lugar tradicional de la casa de Zacarías e Isabel, una gruta situada en la parte izquierda de la iglesia conmemora el nacimiento de Juan el Bautista, el Precursor, "El mayor de los nacidos de mujer" según expresión del propio Jesús. Sobre restos de una iglesia del siglo VI los cruzados construyeron otra iglesia en el siglo XII.

La cripta, excavada por el padre Saller, ofrece algunos restos de la época romana y dos pequeñas capillas bizantinas del siglo VI. Seguramente que los romanos de Adriano construyeron en este lugar un altar dedicado a Venus y Adonis a semejanza de los construidos en Belén y Jerusalén‑ en el Gólgota y en el Monte del Templo.

En el patio que sirve de antesala a la iglesia y convento se están colocando desde hace muy pocos años mosaicos con la inscripción del Benedictus, canto con el que Zacarías bendijo a Dios por el premio del hijo en su ancianidad.
El "Benedictus" o el cántico de Zacarías en hebreo"
4.1.1. Iglesia de la Visitación

Iglesia de la visitación

En el frontis de la Iglesia de la Visitación

Se trata de uno de los lugares más recogidos y encantadores de toda la Tierra Santa. Es un remanso de paz que invita al silencio y a la oración.

La actual construcción consta de dos niveles:
a) nivel inferior que evoca la tradición según la cual en este lugar de la montaña y detrás de una roca Isabel escondió al  niño Juan para librarlo de la persecución de Herodes.
b) el segundo nivel, al que hay que acceder por unas escaleras adornadas con preciosas macetas, conmemora el misterio de la visitación de la Virgen a su prima Isabel. Desde Nazaret, María se puso en camino con presteza para felicitar a Isabel que iba a ser madre, a pesar de su ancianidad y esterilidad. En el patio exterior hay un bello jardín, y en el muro hay colocados azulejos con el canto del Magnificat en 41 lenguas, homenaje de todos los pueblos a la Virgen con ocasión del AÑO  MARIANO .

En el interior de la Iglesia de la Visitación,
luego de haber celebrado al Eucaristía
4.2. Belén

4.2.1. A modo de introducción.

Ciudad de Belén

En la explanada de la Iglesia de Belén.
Al fondo se ve la Iglesia en donde
esta el lugar del nacimiento de Jesús

Entrada Basílica Natividad

Perteneciente a la tribu de Judá, la ciudad de Belén tiene una rica y larga historia.
‑ Lugar tradicional del enterramiento de Raquel, hija de Labán y esposa preferida de Jacob. Madre de José y Benjamín, murió de sobreparto al dar a luz a Benjamín y fue enterrada en el camino de Efrata (Gn 35,16‑20; 48,7).
‑ En sus campos pastoreaba sus rebaños el joven David cuando fue escogido como rey y ungido por el profeta Samuel (1Sam 16,1‑13; 2Cro 11).
- Beit Lehem: casa del pan en arameo. En sus fértiles campos espigaba Rut la moabita las espigas que caían de las manos de los segadores. Lugar del idilio entre Rut y Booz (Rut 1,2‑3).
‑ Lugar del nacimiento de JESUS‑ el betlemita por antonomasia‑ el pan de la vida (Lc 2,1‑7).
‑ Hasta Belén llegaron los tres Reyes Magos venidos del Oriente siguiendo la estrella (Mt 2 lss).
‑ El rey Herodes el Grande, celoso y lleno de temor, publica un edicto ordenando matar a todos los niños recién nacidos en Belén y en los alrededores y así acabar con la vida del rey de los judios que acababa de nacer (Mt 2).

Para cortar el flujo de gente que peregrinaban hasta Belén, el emperador Adriano profanó el lugar del nacimiento de Jesús y mandó construir un templo pagano dedicado al Dios Adonis, templo rodeado de un bosque. Esto fue hacia el año 135 d.C.
Interior de la Basilica de Belen
Hacia el año 326 el emperador Constantino mandó construir una gran basílica conmemorativa sobre la gruta del nacimiento de Jesús. Esta basílica fue destruida por los Samaritanos en la revuelta del año 521. Poco tiempo después el emperador Justiniano mandó construir una nueva basílica sobre los restos de la basílica constantiniana. La construcción de Justiniano sobrevivió a posteriores invasiones. Los persas de Cosroes, en la invasión del año 614, no la destruyeron en honor de los tres personaje esculpidos en el frontispicio de la basílica y que simbolizaban a los tres reyes magos vestidos con vestimenta oriental. Resistió también a la invasión de los árabes del año 647 por ser iglesia de Santa María la Madre de Jesús. Tampoco sufrió ninguna destrucción en la posterior invasión de Hakén del año 1010.

Con distintas reformas posteriores, sobre todo la llevada a cabo por los cruzados, la Basílica que hoy contemplamos es de construcción justiniana, contemporánea de Santa  Sofía de Estambúl y del Monasterio de Santa Catalina del Sinaí.

Se trata de una construcción de cinco naves en forma de cruz latina, separadas las cinco naves por cuatro filas de columnas monolíticas de seis metros cada una y construidas de pórfido rojo, adornada cada columna con la figura de algún personaje bíblico. En el pavimento de la nave central pueden admirarse restos del primitivo pavimento de la basílica constantiniana, bellos mosaicos con abundancia de figuras geométricas, hojas, frutos, aves. Fue descubierto el año 1936.

En las paredes de la nave central y en los laterales del crucero se conservan restos de mosaicos parietales de la época cruzada en los que están representadas escenas del Antiguo y del Nuevo Testamento y de los siete primeros Concilios Ecuménicos.


4.2.2. La Gruta del Nacimiento

Iglesia de la Natividad

La estrella señala el lugar del nacimiento de Jesus en Belen

Bajo el altar mayor de la basílica de la Natividad se encuentra la tradicional gruta del Nacimiento de Jesús a la que se accede por escaleras situadas a ambos lados del presbiterio. Se trata de una espaciosa gruta de unos treinta y seis metros cuadrados. En el lugar tradicional del nacimiento de Jesús hay una estrella donde puede leerse: Aquí, de María la Virgen, nació Jesús.

¿Qué nos dicen los Evangelios acerca de la gruta? : En la redacción de Lucas, que es él único que cuenta el nacimiento de Jesús, no se menciona expresamente la gruta. Únicamente dice: "Y María acostó al niño en un pesebre, porque no había sitio para ellos en la posada".

"Cuando llegaron los pastores a Belén, encontraron a María y a José y al niño acostado en un pesebre".

No es de extrañar el silencio sobre la gruta. Se consideraba la vivienda normal de las gentes, sobre todo en los pueblos pequeños y en el campo. Hay  numerosas grutas en Nazaret, en el Monte de los Olivos, en Belén. La gruta servía  de vivienda ordinaria. Estaban dotadas de pequeños almacenes‑silos para guardar las aceitunas, el trigo, el pienso para los animales domésticos y en ellas se recogía el agua en los días de lluvia.

4.2.3 La Gruta en la tradición

Gruta del nacimiento.
Basilica de la natividad.
A principios del siglo II existe  ya constancia de la veneración de la gruta como lugar de nacimiento de Jesús:
‑ La profanación de Adriano del año 135.
‑ Orígenes en su lucha Contra Celsum dice que Jesús ha nacido en una gruta y que esto lo saben hasta los paganos.
‑ El protoevangelio de Santiago habla de una gruta de luz. Este apócrifo es del siglo II.
‑ Otro apócrifo,  la  Ascensión de Isaías, de finales del siglo I o principios del II, habla del nacimiento de Jesús en una gruta.
‑ San Cirilo de Jerusalén habla también del nacimiento de Jesús en una gruta.
‑ Eusebio de Cesarea, historiador del siglo IV, en su Demonstratio aporta también el testimonio del nacimiento de Jesús en una gruta.
‑ San Jerónimo, se retira desde Roma hasta Belén atraído por el misterio del anonadamiento y humillación de Jesús y se instala en algunas grutas contiguas a la del nacimiento por no sentirse digno de ocupar la misma gruta donde nació Jesús.
‑ La peregrina Egeria en su Itinerario protesta porque con la construcción de la basílica constantiniana no han respetado la gruta del nacimiento y la han transformado. Ella hubiera querido encontrarla sin cambio alguno, tal y como era.

Basilica Santa Catalina Belen

Al interior de una de las cuevas del Campo de los Pastores

Pantocraton de la Iglesia del Campo de los Pastores

Niños cristianos con el padre Peter en una Eucaristía
en la Parroquia Campo de los Pastores

Al exterior de las cuevas del Campo de los pastores (Belen)

Iglesia del Campo de los Pastores
          4.3. Betania

Localidad cercana a Jerusalén. Dista de la Ciudad Santa unos tres kilómetros, situada en la ladera oriental del Monte de los Olivos.

La primera referencia de Betania se encuentra en el Antiguo Testamento como lugar de asentamiento de algunos judíos a la vuelta de Babilonia (Neh 11,32) hacia el año 538.

En los Evangelios se cita a Betania en varias ocasiones como lugar donde Jesús solía retirarse en los momentos de cansancio o de dificultad:
‑Vivían en Betania Lázaro, Marta y María (Lc 10,38‑42; Mc.11,1; Mt 21).
‑En Betania Jesús resucita a Lázaro a quien manda salir del sepulcro en el que estaba desde hacía cuatro días (Jn 11,38ss)
‑Jesús cena en casa de Simón el leproso y una mujer le unge los pies después de lavárselos (Mt 26,6‑13; Mc 14,3‑9; Jn 12,1‑8). Lc 7).

Desde los primeros tiempos del cristianismo existe una fuerte tradición y una constante devoción por la tumba de Lázaro. En un principio no existe ninguna construcción, pero la tumba de Lázaro es el lugar de peregrinación de los cristianos que vivían en Jerusalén.

Testimonios de la tradición:
‑Anónimo de Burdeos: (333). Habla de la existencia de un sepulcro y de una cripta. Todavía no se había construido la iglesia.
‑Egeria y Jerónimo (segunda mitad del siglo IV). Dan fe de la peregrinación anual que los cristianos de Jerusalén hacían a Betania‑Tumba de Lázaro  el sábado anterior a Ramos y en esta fecha se hacía la proclamación solemne de la próxima Pascua. Cuando San Jerónimo traduce el Onomasticón de Eusebio de Cesarea (393) dice que ya se ha construido una pequeña iglesia. Parece que ésta se construye en la segunda mitad del siglo IV. Todavía hoy pueden contemplarse restos de los mosáicos de aquella iglesia bizantina.

En el siglo VII se consagra una iglesia, la del encuentro de Marta con Jesús, iglesia que se había construido el siglo anterior.

En la época de los cruzados llega a ser Betania un centro religioso importante debido a la construcción de un monasterio por la reina Melisenda.

En las excavaciones arqueológicas realizadas en época reciente se han encontrado restos de habitación del siglo VI antes de Cristo, restos relacionados con los que allí se establecen a la vuelta del exilio. Se ha encontrado también cerámica de la época persa, romana, bizantina y medieval. Lo que indica que estuvo siempre habitada.

4.4. Betfagé

Es una pequeña aldea situada en la parte oriental del Monte de los Olivos y cercana a Betania. Es el lugar conmemorativo de la salida de Jesús a lomos de un pollino en su entrada triunfal en Jerusalén después de haber coronado el Monte de los Olivos y atravesado el torrente Cedrón, tal y como se creía en la tradición judía sobre el advenimiento del Mesías. Cada año, el domingo de Ramos, la muchedumbre cristiana, entre cantos y hosannas, repite el gesto de Jesús hasta entrar en la ciudad santa por la puerta de San Esteban.

La peregrina Egeria describe Betfagé como el lugar del encuentro de Jesús con las hermanas de Lázaro cuando se dirige a Betania después que su amigo ha muerto.

4.5. Monte de las bienaventuranzas

Iglesia en el Monte de las Bienaventuranzas
Vista desde el Monte de las Bienventuranzas
Vista preciosa desde la Iglesia de las Bienaventuranzas

El monte, el lago Galilea y la zona fronteriza de Jordania

Pequeño montículo situado al norte del Lago de Genesaret y tradicionalmente identificado como el lugar de las enseñanzas de Jesús o "Sermón del Monte" del que forman parte las Bienaventuranzas.

La peregrina Egeria y con ella toda la tradición posterior señala una gruta bastante cercana al Lago como el lugar donde Jesús enseñó y pronunció el más maravilloso programa de vida, fuente de dicha, de gozo y de felicidad: Dichosos... Bienaventurados... Felices...

El actual lugar conmemorativo se sitúa un poco más al norte. En él hay un precioso recinto ajardinado y maravillosamente cuidado , con distintos lugares para poder celebrar la eucaristía o para dedicar un tiempo precioso para la reflexión, la meditación, el silencio, contemplando a la vez las aguas del Lago, las barcas que surcan sus aguas.

En el silencio interior todavía parece oírse el eco de  las palabras de Jesús, un mensaje antiguo y siempre nuevo que ha servido de hilo conductor a tantos y tantos que al cabo de la historia se han esforzado por vivirlo hasta el heroísmo.

4.6. Cafarnaúm


La ciudad estaba construida con piedras de basalto o sea volcánicas

Piedras de molino amontonadas.
"Al que escandalice a uno de estos pequeños, más le valdría que les encajasen
en el cuello una piedra de molino y lo arrojen al fondo del mar"
Estas piedras pesaban mínimo 200 kgs.
4.6.1. A modo de introducción.

Situada en la parte norte del Lago de Tiberiades, esta ciudad de Cafarnaún fue el escenario de la primera etapa del ministerio público de Jesús y lugar donde realizó gran parte de sus milagros.
Rechazado por los habitantes de su propio pueblo Nazaret, Jesús se refugió en la ciudad de Cafarnaún. Al referirse a esta ciudad, los evangelios la llaman "Ciudad de Jesús" (Mt 9,1).

Importante centro agrícola y de pescadores, con puerto propio, sobresalía, también, por encontrarse situado en las cercanías de la Vía Maris; por ser ciudad límite entre los dominios de Herodes Antipas y su hermano Filipo, tenía aduana propia en la que estaba de recaudador de impuestos Levi‑Mateo (Mt 9,9) quien fue llamado al apostolado por el propio Jesús. La Sinagoga de Cafarnaún era una de las más espléndidas de Galilea.

Referencias bíblicas:
- Comienzo de la predicación de Jesús (Mt 4,17).
- Vocación de Levi‑Mateo (Mt 9,9).
- Jesús enseña en la sinagoga (Lc 4,31).
- Jesús resucita a la hija de Jairo (Mt 5,22 ss).
- Cura al siervo del Centurión (Jn4,46‑54).
- Cura a un paralítico (Mc 2,1 ss).
- Cura a un leproso (Mc 1,40‑45).
- Cura a la suegra de Pedro (Mc 1,29‑31).
- Sermón del Pan de vida en la Sinagoga (Jn 6).
- Incredulidad de Cafarnaún (Mt 11,23‑24).

Incrustaciones en las piedras que se ponían en la
sinagoga de Cafarnaum

Sentado en el asiento de honor en la Sinagoga.
Esta solia encontrarse al fondo de la sinagoga
y no delante, pues era para que la gente se diera cuenta
al entrar  que este era un benefactor, ya sea de la sinagoga,
de la ciudad o de alguna institución de Israel
4.6.2. Isla de San Pedro

La casa de Pedro

La casa de Pedro (Detalle)

Se encuentra protegida la casa de Pedro

Desde esta Iglesia se puede ver la casa de Pedro

En la casa de Pedro

Se trata de un octógono de la época bizantina (S. IV) que contiene en su interior la construcción de otro octógono perteneciente al siglo I y habitado como lugar de culto- Domus Eclesiae- por la comunidad judeocristiana que se estableció en torno a la casa de Pedro y formada por cristianos de esta familia.

Entre los restos de esta primitiva iglesia se han encontrado inscripciones‑grafitos e invocaciones religiosas, tales como Xristos y Kyrios, súplicas y oraciones. Tambi)n aparecieron monedas y cerámica y anzuelos de pesca.

4.6.3. Sinagoga de Cafarnaún



La sinagoga de Cafarnaum. Nótese una primera construcción con piedra
basalto y la segunda con piedras blancas

En al Sinagoga de Cafarnaum

La sinagoga de Cafarnaum

Detalles de la Iglesia de Cafarnaum

La base de la sinagoga de Cafarnaún es de la primera sinagoga que
Jesús conoció

Detalles de las columnas
Bajo las ruinas de la sinagoga del siglo IV se encuentran las ruinas de la sinagoga de tiempos de Jesús y que estaba construida con piedra basáltica, la piedra propia de la región procedente sin duda de una erupción volcánica de la época del cuaternario.

En la sinagoga de piedra basáltica predicó Jesús el semón del pan de vida después de la multiplicación de los panes y los peces.

Entre los restos todavía no colocados en la reconstrucción de la sinagoga del siglo IV se pueden admirar capiteles y frisos de columnas con ornamentación de flores, y el candelabro de los siete brazos, el arca de la Alianza y otros símbolos judíos.

4.7. Caná de galilea

La Iglesia de Caná de Galilea al caer la noche

Al interior de la Iglesia de Caná de Galilea

Tinaja de agua en Cana de Galilea

Tinaja en Cana de Galilea
En dirección al lago de Tiberíades se encuentra esta pequeña ciudad, distante unos 8 Km de Nazaret.

Ningún testimonio hay sobre Caná en el Antiguo Testamento. Y los tres textos del Nuevo Testamento que nos hablan de este entrañable  pueblo son del Cuarto Evangelio. Debe su fama, sin duda alguna, a la presencia de Jesús y de María como invitados a la boda que allí se celebró y en la que Jesús realizó "su primer signo", convirtiendo el agua en vino.

Textos bíblicos:
‑Celebración de una boda con presencia de Jesús y María (Jn 2,1‑ 12).
‑Jesús cura en Caná  al hijo del Centurión que vivía en Cafarnaúm (Jn 4,46).
‑Es la patria del Apóstol Natanael- Bartolomé (Jn 21,2).

4.8. El desierto

Desierto de Judá

Desierto de Judá

Desierto de Judá

Desierto de Judea

Monasterio de San Jorge. Desierto de Judá. Entre Jerusalén y Jericó
A los pocos kilómetros de abandonar Jerusalén en dirección este, pasado el poblado de Betania, en seguida aparece ante nuestros ojos el Desierto de Judea, lugar inhóspito, sin vida, áspero y de difíciles caminos. Son muchos kilómetros de montañas abruptas y peladas, donde apenas brotan algunos matojos en primavera que son agostados con los primeros calores del mes de abril o mayo.

El Desierto de Judea , en las proximidades del Mar Muerto y en la zona de Qumran, fue el escenario de la vida de la comunidad de monjes esenios, donde quedan las ruinas de lo que fue su monasterio y las grutas donde se encontraron algunos de los  manuscritos de Qumran. En este Desierto se dejó oir la voz de Juan el Bautista invitando a la conversión del corazón y a preparar los caminos al Salvador (Lc 1,80; Mt 3,1). En el Desierto de Judea vivió Jesús su "cuarentena" en ayuno y oración, preparándose para el ministerio público, y aquí fue tentado por el diablo (Mt 4,19).

Desierto y mar muerto desde la fortaleza de Masada


En el monaterio de Qumran

Al interior del Monasterio de Qumran

Mirador del Monasterio de Qumran

Sacerdotes españoles, mexicanos y un peruano en zona
de descanso aledaña al Monasterio de Qumran

El wadi (Valle) de Qumrán
4.9. Emaús

Aunque son varias las aldeas que reclaman para sí el honor de ser el escenario de la manifestación de Jesús a los dos discípulos que nos relata el capítulo 24 de San Lucas, parece ser que la que más probabilidades tiene es Emaús.‑ El Quebeibeh, pequeño pueblo situado a unos 11 kilómetros al noroeste de Jerusalén.

Se trata de un lugar pobre, austero, pero lleno de unción y de espiritualidad. Los alrededores del Santuario invitan al retiro, a la contemplación y al gozo de sentirse acompañados por aquel peregrino‑compañero invisible que " hace arder de gozo el corazón".

Aunque la tradición que identifica el lugar con la aldea evangélica es bastante tardía, la antigüedad de Emaús ha sido perfectamente constatada por datos históricos y arqueológicos de mucha importancia:

Los distintos restos arqueológicos que han ido sobreponiéndose al cabo de los siglos nos llevan desde la época helenística (S.III a.C.), pasando por los periodos romano y bizantino, hasta los restos de la construcción cruzada sobre los  que se levanta la actual Iglesia, construida por los PP. Franciscanos a principios de este siglo.

Fuera de la Iglesia, al norte, se conservan los restos de la calzada romana y del poblado de la época cruzada.

4.10.  Jericó

Jericó del Antiguo Testamento
Ruinas de Jerico y el Qarantal
(Monte de las tentacioens)

Jerico de lso musulmanes

Jerico, la tierra que mana leche y miel

Mujeres musulmanes se preparan para recibir a Arafat (1994)

En Jerico, el día que llegó Arafat

Carteles alusivos a la bienevenida a Arafat

Excavaciones en Jerico

Ciudad situada en las proximidades  del Mar Muerto, en pleno oasis de una zona desértica, puede ser considerada como la ciudad más baja del mundo, a unos 400 metros bajo el nivel del mar Mediterráneo. Juntamente con Hebrón y Damasco, Jericó es la ciudad más antigua hoy habitada.

Referencias bíblicas: Son abundantes los textos de la Biblia que hablan de Jericó. Estos son algunos de los textos principales:
‑Ciudad conquistada por Josué al entrar en la Tierra Prometida (Jos 6,1‑25).
‑Centro de un grupo de profetas, entre los que destaca Eliseo (2Reg 2,4‑22).
‑Tiene una fuente cuya agua salada fue transformada en dulce por el profeta Eliseo (2Reg 2,19‑22).
‑Jesús cura a un ciego-Bartimeo. (Lc 18, 35‑43).
‑Jesús cura a dos ciegos (Mt 20,29‑33).
‑Encuentro de Jesús con Zaqueo (Lc 19,1‑10).

Cuatro emplazamientos ha ocupado la ciudad de Jericó al cabo de la historia:
a/ Jericó del séptimo milenio: Ciudad que en la Biblia se relaciona con Josué y que según el relato bíblico fue tomada por este caudillo al entrar en la tierra prometida.

En los años sesenta la arqueóloga inglesa Miss. Kenyon excavó las ruinas llamadas de Tell el Sultan. Llegó a la conclusión que estas ruinas pertenecen a un asentamiento urbano y que ella dató del séptimo milenio antes de Cristo. Posiblemente fue destruida esta ciudad debido a algún cataclismo. Se encuentra una torre circular de piedra. ¿Se trata de un templo votivo, de una casa‑ habitación o de una torre fortaleza?.
- Jericó herodiana: Situada en el suroeste del oasis, en la desembocadura de Wadi Kelt. Ciudad de invierno construida por Herodes el Grande. La Universidad Hebrea de Jerusalén está llevando a cabo las oportunas excavaciones arqueológicas de las ruinas.
- Jericó bizantina y cruzada: Construidas en el emplazamiento de la actual ciudad, nada se sabe de ellas.
- Jericó moderna: La actual ciudad, edificada en medio del oasis.
Los acontecimientos relacionados con Jesús tuvieron lugar en la llamada Jericó herodina.

4.11. El Lago De Genesaret o De Tiberíades

Sacerdotes en la Iglesia del Primado

Lago Galilea

Lago Galilea y la montaña de Jordanaia

Tiberíades desde el mar Galilea

Barcos que transportan a los turistas por el Lago Galilea

Orilla y lago Galilea

Roland, Enrique, Antonio y Luis, paseando por el Lago Galilea

Almorzando a orillas del Lago Galilea


Al fondo del algo Galilea se observa el Monte Hermón

Turistas por e lago galilea

Pesacdo Tilapie o Pescado de Pedro

Llanura, lago y montaña en Galilea

Junto a ti, buscaré otro mar

En la arena, he dejado mi barca

Desde el hotel, observo el lago Galilea
Este remanso de agua dulce, todavía hoy con abundancia de pesca a pesar de sus aguas contaminadas, fue escenario de importantes acontecimientos en la Vida y Ministerio Público de Jesús. En el Lago y las ciudades y lugares de su entorno realizó la mayor parte de sus milagros y pronunció alguno de sus discursos más significativos. Nombres como el Monte de las Bienaventuranzas, Cafarnaún, Et Tabga, Genesaret, etc. evocan todavía hoy a Jesús el Galileo, y sus palabras y su mensaje parecen conservar todavía la frescura y viveza del momento en que fueron pronunciadas.

Con distintos nombres se conoce el Lago:
‑Mar de Galilea (Mateo 4.18; Marcos 1,16).
‑Lago de Tiberíades (Juan 21,21).
‑Lago de Genesaret (Lucas 5,1).

Está formado por las aguas del Jordán que se remansan en la hoya y otras aguas  de manantiales próximos que allí desaguan. Está situado a 212 metros bajo el nivel del mar. Su longitud de norte a sur es de 21 Km. Tiene una anchura de este  a oeste de 11-12 km. y  alcanza una profundidad de 49 metros.

En sus aguas tuvo lugar la pesca milagrosa y la llamada de Pedro a ser pescador de hombres (Lc 5,1‑11).
‑Jesús calma la tempestad (Mt 8,23‑27 y paralelos).
‑Jesús camina sobre las aguas (Mt 14,24‑23  y paralelos).

4.12. El Monte Carmelo
La Virgen del carmen en el Monte Carmelo de Israel

En la cueva de Elias (Monte Carmelo - Israel)

Monte Carmelo - Israel
Más que de un monte o montículo se trata de una cordillera de unos veinte kilómetros de larga que arranca en el Mar Mediterráneo y se prolonga hasta la llanura de Esdrelón o Jezrael (1Reg 18,42-64).

Monte sagrado desde la más remota antigüedad, en sus alturas se dio culto a los dioses paganos de Baal a cuyos sacerdotes reta el profeta Elías (1Reg 18,27-29).

En la soledad del Carmelo floreció la vida eremítica y solitaria de los hombres de Dios del A.T. y posteriormente de hombres piadosos, herederos de los viejos profetas, en los primeros siglos de la Iglesia y en la época cruzada.

La Orden Carmelitana,  heredera espiritual del carisma de los profetas Elías y Eliseo, considera esta Montaña Santa como su cuna, y en la cima occidental levantaron el Monasterio y el Santuario Stella Maris en honor de María, simbolizada en aquella nubecilla como la palma de la mano que se levantaba del mar presagiando la lluvia benéfica que Dios iba a enviar a su pueblo sediento.

Referencias bíblicas:
- Elías otea desde la terraza en espera de la lluvia (1Reg 18, 41-46).
- Reto de Elías a los sacerdotes de Baal (1Reg 8,20-27).
- Elías prepara un altar con doce piedras (1Reg 18,30-39).
- Elías pasa a espada a los sacerdotes de Baal (1Reg 19,39-41).
- La profetisa y juez Débora hace justicia ( Juc 4,4-7).
- Sísara es derrotada y muere ( Juc 4,12-23).

4.13. Monte Tabor
Monte Tabor

Monte Tabor

El Monte Tabor

El Monte Tabor al caer la tarde

Iglesia de la Transfiguración de Cristo

Iglesia del Monte Tabor

Iglesia del Monte Tabor
Como queriendo romper la monotonía de la llanura de Esdrelón, surge el Monte Tabor que se eleva unos 588 metros sobre el nivel del mar. Forma parte del grupo de Lugares Altos y Montes Santos desde la más remota antigüedad. En su cima los cananeos construyeron un altar donde se ofrecían sacrificios idolátricos (Os 5,2).

En la antigüedad era el límite entre las tribus de Isacar, Zabulón y Neftalí.

En la época de los Jueces, Baruc, general de los ejércitos de Israel, a instancia de la profetisa Débora, declaró la guerra a los ejércitos de Sísara a quienes derrotó junto al torrente Quisón, al pie de la Cordillera del Carmelo (Jueces 4‑5).

La tradición cristiana, ya desde los orígenes de la Iglesia, siguiendo el testimonio del apócrifo "Evangelio  de los Hebreos" identificó el Tabor con la "Montaña Alta" en la que se transfiguró Jesús, teniendo como testigos a los tres discípulos predilectos: Pedro, Santiago y Juan.

Al cabo de la historia se han sucedido distintas construcciones en la cima de la montaña:
‑Iglesia del siglo IV, conocida y citada por el peregrino anónimo de Piacenza que la describe como "tres basílicas" en recuerdo de los tres tabernáculos que Pedro había sugerido construir.
‑Iglesia cruzada con monasterio de benedictinos, hoy totalmente destruida y cuyas ruinas son visibles todavía.
‑Iglesia actual, construida en los primeros años de este siglo por el arquitecto Barluzzi.

Resulta muy sugerente retirarse a la soledad de las terrazas que rodean la actual basílica y desde las que se contemplan maravillosas vistas de la llanura de Esdrelón y orar y contemplar el misterio de la Transfiguración o Metamorfosis de Jesús, después de una atenta lectura del hecho relatado por los tres sinópticos

4.14. Naím

Naim desde el Monte Tabor

Pequeño pueblecito situado al sur del Monte Tabor en la llanura de Esdrelón. Su población hoy es totalmente musulmana. Una familia guarda la llave de la Iglesia conmemorativa del milagro de Jesús.

La única referencia bíblica de Naím se encuentra en el evangelio de San Lucas (7,11‑16) al contarnos el milagro de la resurrección del hijo de aquella madre viuda. Una vez más se manifiesta el corazón tierno, compasivo y misericordioso de Jesús ante el desamparo y soledad de aquella madre que había perdido lo único que tenía: su hijo.

4.15. Nazaret

La anunciacion

El orante. encontrado en Nazareth

Vajilla del siglo I encontrada en Nazarteh. Podemos deducir que la
Sagrada Familia era una familia humilde

Iglesia de Nazareth

Grafiti alusivo a María

XE MARIA = Alegrate María

Casa - cueva de Nazareth

Casa - Cueva en Nazareth

Fuente de María, en Nazareth en donde María iría
con frecuencia a sacar agua con su hijo Jesús

Agua de la fuente de María

Los desposorios de María y José (Nazareth)

Una imagen de María Joven (15 años) Nazareth

Sueño de José (Nazareth)

Muerte de José,asistido por Jesús y maría

Niños de Nazareth

Cuadro de la Sagrada Familia en la casa de José (Nazareth)

Niños a la salida del colegio

El lugar de la encarnación (Casa de Maria en Nazareth)

En la acasa de María (Nazareth)

La casa de María o de la Encarnación

Cúpula de la Iglesia de Nazareth

La Iglesia de Nazareth


Iglesia de la Encarnación

En las Iglesia de María o de la Encarnación

Celebrando Misa en la Casa de María

Advocaciones Marianas en Nazareth

En la casa de San José (Nazareth)

En la sinagoga de Nazareth
Pequeña "ciudad" de Galilea, como la llama San Lucas, pertenecía a la tribu de Zabulón. En ninguna ocasión se la cita en el Antiguo Testamento. Aparece en la escena bíblica en el momento de la Anunciación del ángel Gabriel a Nuestra Señora la Virgen María.

Esta pequeña ciudad de sueños y vivencias íntimas nos habla en todo su ambiente de José el carpintero, hombre silencioso y trabajador; de su esposa María, ama de casa, humilde y laboriosa; de Jesús, hijo obediente " sometido a sus padres y creciendo en edad, en sabiduría y en gracia ante Dios y ante los hombres " (Lc 2,52).

De la humildad del poblado y de sus gentes nos hablan los restos arqueológicos conservados entre los dos wadis y celosamente guardados por los PP. Franciscanos.

Cuando se está en Nazaret puede rezarse con toda propiedad: "Aquí el ángel anunció a María". "Aquí la palabra de Dios se hizo carne".

Aquí, en Nazaret, podemos meditar en el silencio del corazón, en lo mas íntimo de nuestro ser, misterios tan relevantes de nuestra fe, que Nazaret se convierte en lugar de reflexión, de reposo y de oración.

Referencias evangélicas:
‑Anunciación del ángel a María. Encarnación de la Palabra en el seno de una Virgen ( Lc 1,26ss).
‑Vida de trabajo, de silencio y de amor de la Sagrada Familia ( Lc 2,51; Mt 2,23).
‑En la Sinagoga de Nazaret Jesús presenta su programa mesiánico (Lc 4,16‑25 ).
‑Se siente rechazado por los suyos y en su propio pueblo (Lc 4,28‑30 ).

4.15.1. La Gruta de la Anunciación

Se trata de una gruta natural abierta en la pequeña montaña. A pesar del fanatismo de tiempos pasados que no respetó el lugar queriendo llevarse pequeños pedazos de roca como reliquias, se conserva bastante bien. Para los cristianos es uno de los lugares más entrañables de toda la Tierra Santa.

Aquí conmemoramos los católicos la escena del anuncio de Dios por medio del Arcángel Gabriel a María en el que se le dice que ella es la elegida para ser la madre del Mesías. El motivo de su veneración está plasmado en una inscripción colocada al pie del altar: "Aquí, la Palabra de Dios se hizo carne".

No muy lejos de la gruta se encuentran el baptisterio de la comunidad judeocristiana, restos de una iglesia bizantina, el llamado mosaico de Konón y otros restos que indican la antigüedad de la veneración del lugar como la Casa de María. Entre todas las reliquias ocupa el primer lugar la base de una columna donde está escrita en griego dórico la abreviatura del saludo del ángel a María: XE MARIA: Alégrate, María. Actualmente se conserva en el pequeño museo de los PP. Franciscanos.

4.15.2. Taller de San José o Casa de la Sagrada Familia

Unos pocos metros, aproximadamente doscientos, al norte de la Basílica de la Anunciación, veneramos los católicos el lugar llamado "Taller de San José " o "Casa de la Sagrada Familia de Nazaret". Se trata de una iglesia edificada este siglo sobre restos de iglesias anteriores. Posiblemente en el lugar ya hubo una construcción en tiempos del emperador Justiniano, en el siglo VI. En la cripta destaca el baptisterio de la comunidad judeocristiana de la casa de San José al que se accede bajando siete escalones y que permanece bastante bien conservado. Importantes son también los silos del subsuelo, necesarios para la recogida del agua de la lluvia y para guardar los alimentos.

4.16. El Pozo de Jacob

Entre el Ebal y el Garizim, montañas sagradas de la Samaria, en la ruta de los pozos, se encuentra este pozo que el padre Jacob construyó para beber hombres y ganados.

Ya en tiempos de Constantino, en el siglo IV, se construyó una iglesia, restaurada más tarde en la época de Justiniano. Los griegos ortodoxos a quienes pertenece el lugar intentaron construir una nueva iglesia a principios de este siglo, proyecto que no pudo llevarse a cabo y cuyas obras están todavía sin terminar.

En este lugar  tuvo lugar el encuentro de Jesús con la mujer samaritana que iba a buscar agua con sus cántaros. Jesús se le reveló como el agua que sacia hasta la vida eterna. Jesús es el don de Dios, el regalo de Dios al hombre: "Si conocieras el don de Dios y quien es el que te pide de beber..."

Referencias bíblicas:
- El pozo de Jacob (Gn 33,18-20).
- Jesús, cansado del camino, se acerca al pozo (Jn 4,s


4.17. Primado de San Pedro

Celebrando al Eucaristía en al Iglesia del Primado a orillas del Lago galilea

Proclamando la Palabra de Dios

En la piedra de Jesús

Una foto como fondo el lago Galilea
A escasos metros de Et Tabga se encuentra un precioso y evocador recinto conmemorativo de una de las apariciones de Jesús a sus discípulos mientras estaban pescando en el Lago; de la triple manifestación de amor y de fidelidad de Pedro a Jesús y de la entrega del Primado.

En Cesarea de Felipe Jesús había prometido a Pedro: "Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia". Aquí Jesús le confía apacentar el rebaño: "Apacienta mis corderos; apacienta mis ovejas". Pedro, consciente de su debilidad y de sus vanas  promesas de fidelidad, humildemente responde a Jesús: "Señor, tú sabes que te amo".

Una pequeña iglesia construida sobre una roca firme recuerda el cimiento sobre el que Jesús afianza su Iglesia. El pedrejón de dentro de la Iglesia recuerda "la mesa" sobre la que el Señor sirvió a los suyos los peces que les había preparado asados sobre unas brasas.

La peregrina Egeria recuerda en su Itinerario que a finales del siglo IV ya existía en el lugar una capilla conmemorativa de la aparición de Jesús.

Al sur de la actual capilla pueden contemplarse unos escalones sobre la piedra, escalones que se prolongan hasta el Lago.

4.18. Río Jordán

Renovando el rito bautismal en el Río Jordán a unos turistas chilenos

Río Jordán

Curso del Río Jordán

Rio Jordan

Río Jordán

Rio Jordán
Es el río más largo y caudaloso de la Tierra Santa. Nace a los pies del monte Hermón, en Panias o Banias, en la región de Cesarea de Filipo, formado por las llamadas "Fuentes del Jordán". Después de algunos kilómetros por la región de la Alta Galilea se remansa en el Lago de Genesaret a 208 metros bajo el nivel del mar Mediterráneo, una importante reserva de agua dulce que proporciona al país abundancia de agua para sus muchas y variadas necesidades.

Al suroeste del Lago salen sus aguas y de nuevo forman el Jordán durante unos 300 kilómetros hasta desembocar en el Mar Muerto, casi 400 metros bajo el nivel del mar.

Referencias bíblicas:
- El pueblo de Israel atravesó el río Jordán al norte de Jericó para entrar en la Tierra Prometida (Jos 3-4).
- Naamán el sirio es curado de la lepra al bañarse en sus aguas (2 Reg 5).
- Eliseo asume la herencia de Elías ( 2Reg 2,1-14).
- Juan bautiza en las aguas del Jordán (Mt 3,4ss).
- Jesús acude desde Galilea a ser bautizado por Juan (Mt 3,13-17).

4.19. Et Tabgha


Junto al mosaico que indica el lugar de la Multiplicación de panes

Molino y piedra de Molino

Mosaico de la Multiplicación de panes

Fuente d elso siete peces

Mosaico

Pileta en forma de trébol

Mosaico de marmota y un ave
Este lugar, situado en la parte noroeste del Lago, al pie del Monte de las Bienaventuranzas, conmemora el milagro de la multiplicación de los panes y los peces. Su nombre griego ‑Heptapegón‑ viene de las siete fuentes manantiales que brotaban en su entorno. A finales del siglo IV visita el lugar la peregrina Egeria, y en su Itinerario dice que la roca sobre la que Jesús había puesto los panes había sido colocada como altar de una iglesia. A la derecha del altar pueden verse todavía hoy los restos de una iglesia construida hacia el año 350 y que fue la iglesia visitada y descrita por Egeria.

Un siglo después se construyó otra iglesia bizantina más grande. La roca quedaba debajo del altar. Esta iglesia fue adornada con bellos mosaicos de influencias egipcias, entre los que destaca el que hay debajo del actual altar: una cesta de panes y unos peces, símbolos evidentemente eucarísticos para las primeras comunidades cristianas.

Los persas destruyeron esta iglesia del siglo V en la invasión del año 614 y sus restos permanecieron ocultos durante siglos, hasta que en la década de los treinta de este siglo fue sacado a la luz por arqueólogos alemanes. Hoy es un lugar de descanso y de meditación con manifiestas resonancias eucarísticas.