lunes, 16 de enero de 2012

7. SENTIDOS DE LA SAGRADA ESCRITURA.

7. SENTIDOS DE LA SAGRADA ESCRITURA.

"El intérprete de la Sagrada Escritura, para conocer lo que Dios quiso comunicarnos, debe estudiar con atención lo que los autores querían decir, y lo que Dios quería dar a conocer con dichas palabras" (D.V. 12).

            7.1. El problema.

Cuando abrimos la Biblia, nos solemos encontrar con correspondencia que existen entre los dos testamentos: el Antiguo en el Nuevo. vgr Rom. 5,14s Gn. 3,17s; 1Pe. con Gn. 7,7. ¿Cuál es la razón fundamental de esta correspondencias?...La Biblia cuyo autor es Dios el cual abraza todo el curso de la historia y de la revelación y los libros que va inspirando son  capítulos de su grande Libro, en los que va manifestando gradualmente su verdad. Los escritores sagrados son sólo eslabones aislados de esta obra y depositan una percepción particular y parcial de la verdad divina.[1]

Dichos esto, se sigue, que no basta descubrir el sentido que el autor humano ha dado a sus palabras, es necesario llegar hasta el sentido "pleno" que Dios ha depositado en las palabras del escritor.

En el A.T. se deben distinguir dos grados de profundidad dentro del sentido literario: aquél en el que la crítica de se detiene y aquél que llega hasta la teología, franqueando los límites de la crítica. El sentido "pleno". Este sentido es la interpretación de los textos del A.T. hecha a la luz de Cristo.

Existe además otro sentido relacionado no con los textos sino con las realidades (personas, sucesos, cosas). Es el llamado sentido típico.

Teniendo en cuenta que el sentido pleno es solo una visión más profunda del sentido literal primario, se pueden describir así:



                                                     "PRIMARIO"

       SENTIDO LITERAL

                                                     SEGUNDO O PLENO


     SENTIDO TÍPICO


            7.2. Los sentidos escriturísticos.

                        7.2.1. El sentido literal.

            El sentido literal es aquel que radica en las palabras. Puede ser literal primero y segundo o "pleno".

                                   a) Sentido literal primero.

Es el sentido expresado inmediatamente por las palabras del autor sagrado. Este sentido primero de las palabras puede ser expresado o bien por un estilo propio mediante una frase llana sencilla, que debe interpretarse tal como suena; o bien en un estilo "impropio", mediante una figura literaria vgr. metáfora, hipérbole, parábola, alegoría, símbolo, enigma, etc...

                                   b) Sentido literal segundo o pleno.

Es el acrecentamiento de significado objetivo que reciben las palabras del Antiguo Testamentos cuando son tomadas en el Nuevo Testamentos a la luz de la realización aportada por Cristo.

Este sentido pleno que descubre el texto del N.T. : vemos que se  encuentra implícita, pero realmente en el texto del A.T.; fue desconocido por el autor humano, aún en sus instituciones oscuras; pero, fue depositado allí por Dios, en la objetividad de la palabra que él quiso escoger. Por lo tanto, "el sentido pleno es propiamente escriturístico" (vgr. Mt. 1,22 e Is. 7,14; Mt. 8,17e Is. 53,4 Hch 2,17-21 y Jl. 3,1-5).

                        7.2.2. Sentido típico.

Es aquél que radica en realidades: personas, acontecimientos, o cosas. "Es el sentido que reciben realidades ( ya sean personas acontecimientos  o cosas) el A.T. cuando son tomadas en el N.T. a la luz de la revelación aportada por Cristo".

El texto posee ciertas palabras "claves" que sirven de fundamento para que  el acontecimiento antiguo se relacione con el nuevo acontecimiento. Ejemplo:
-          Adán, tipo del Cristo futuro (Rm. 5,14).
-          Los acontecimientos del Éxodo, sucedieron de manera típica, es decir, para nuestra instrucción (1Cor. 10,6.11).
-          El arca de Noé, tipo del bautismo (1Pe. 3,20).
-          El Maná, tipo de la Eucaristía (Jn. 6,32s).
-          La serpiente en alto, tipo de Cristo en la cruz (Jn. 3,14).

Todo sentido típico es fundamentalmente cristológico, pues es Cristo quien da el perfeccionamiento y el cumplimiento decisivo a los acontecimientos de la antigua alianza.

            7.3. Armonía entre los sentidos pleno y típico

Entre los sentidos pleno y típico existe, una relación estrecha. Los hechos o tipos que son el objeto del sentido típico, son conocidos solo a través de las palabras, que son objeto el sentido pleno. Abrahám que va a inmolar a su Hijo es tipo del Sacrificio del Calvario, en la medida como es presentado este hecho en el escrito (Gn. 22,2.12 y Jn., 16; cfr. Rom. 8,32).[2]

Pero también un tipo bíblico puede corresponder a una existencia literaria y no a una histórica vgr. Melquisedec, es un tipo de sacerdote celestial (Hb. 7,3) no porque no tuvo padres, sino porque la Escritura no afirmó que los tuviera. El factor esencial es el sentido típico, porque es un sentido escriturístico, debe buscarse y hallarse en las palabras de la Escritura.

            7.4. Alcance del sentido "segundo"

                        7.4.1. ¿Puede haber sentidos segundos dentro del mismo A.T.?

Ciertamente algunas fórmulas antiguas pudieron ser tomadas en un sentido más pleno después vgr. el éxodo tipo de regreso de la cautividad. Pero usos progresos son poca cosa en comparación del salto decisivo y recomienzo radical aportado por Cristo. Por esa razón, más vales reservar los sentidos plenos y típicos al perfeccionamiento traído por Cristo.

                        7.4.2. Y ¿Dentro del N.T.? 

La misma respuesta. Pues, aún, cuando la luz del Espíritu Santo hizo profundizar en el misterio de Cristo, sin embargo sólo es la toma de conciencia el gran don que Dios nos hizo en su Hijo. Qué más se puede esperar que acreciente substancialmente este don...

                        7.4.3. Sentidos típico y pleno en los límites del "texto sagrado".

Por lo tanto, hablando con formalidad de términos, se es más  fiel al objeto formal preciso de "inspiración escriturístico" si se mantienen los sentidos plenos y típicos en los límites del "TEXTO SAGRADO", que  se vuelve el mismo a tomar y comentar.

            7.5. Sentido consecuente y acomodaticio.

Los sentidos escriturísticos propios son el literal y el típico, pero a través de los siglos, los textos de la S.E. han sido utilizados o aplicados más allá de las fronteras de estos sentidos escriturísticos. Veamos algunos de ellos:

                        7.5.1. Sentido consecuente.

Es el sentido en que la teología especulativa toma ciertos textos de la Biblia para descubrir en ellos o deducir de allí algunas de sus conclusiones vgr. Mc. 2,6ss y Jn. 2,24-25 servirá para tratar de la ciencia infusa de Cristo. De Lc. 1,28, un mariólogo deducirá la plenitud de gracia de la Virgen María o el privilegio de su Inmaculada Concepción.

                        7.5.2. Sentido acomodaticio.

La Liturgia y la Predicación toman también en numerosas ocasiones los textos bíblicos en sus sentidos escriturísticos o consecuentes.

Sin embargo en muchos casos emplean pasajes de la Biblia dándoles un "sentido acomodaticio" es decir aplicándolos a personalidades, circunstancias que no caen bajo el sentido literal pretendido por los autores sagrados vgr. La Liturgia toma textos sapienciales y los "acomoda" a la Virgen María: Prov. 8,22-31; Ct. 8,5; Eclo. 24,1-22 confesores: Eclo. 45,1-5. La lectura espiritual de la Biblia, nos invita a hacer nuestras plegarias de la Salmos.[3]

Preguntas para el diálogo.

1. ¿ Cuál es el privilegio de la Biblia?.
2. ¿ Cómo pueden ser los sentidos escriturísticos?.
3. ¿ En que radica el sentido literal?.
4. ¿ En que radica el sentido típico?.
5. ¿ Cómo puede ser el sentido literal?.
6. ¿ Descubre el sentido pleno en Mt. 1,22; Is. 7,14?.
7. Lee en 1Pe. 3,20 el ejemplo del antitipo.
  R.P. Roland Vicente Castro Juárez


[1] CARRILLO ALDAY, S. o.c. pags.117-118.
[2]CASTRO TELLO, Carlos M.Sp. S.; "Introducción a la Biblia" Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima 1983 (Pro Manuscrito); CARRILLO ALDAY S. o.c. pag. 118ss.
[3] CARRILLO ALDAY, S ; o.c. pags 121-130.